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Nota del editor: Esta práctica es la continuación de Grupo de Acción por el Desarrollo: Programa de viviendas populares (Ciudad del Cabo, Sudáfrica), buena práctica Best de 2004.
País/Estado — Sudáfrica
Región según Naciones Unidas — África
Región ecológica — costera
Ámbito de la actuación — metropolitana
Agentes — organización no gubernamental (ONG); sector privado;gobierno local.Categorías — Vivienda: vivienda asequible; acceso a la financiación de la vivienda; mejora y modernización de asentamientos precarios; acceso igualitario a la vivienda y su propiedad. Equidad de género e inclusión social: acceso a los recursos; control de los recursos; integración. Vivienda y derechos humanos: propiedad asegurada; vivienda accesible; vivienda asequible; igualdad de derechos de propiedad y herencia (para las mujeres).
The Kuyasa Fund 3 Wrensch Road Obseratory 7925 Cape Town RSA Teléfono: + 27 (0)21 448 31 44 Fax: + 27 (0)21 447 31 40E-mail: info@kuyasa.org.za
20, Milner Avenue St Andrews Bedfordview Johannesburg RSA Teléfono: + 27 (0)11 453 49 53 Fax: + 27 (0)11 453 49 53Colaboración financiera.
Culemborg The Netherlands Teléfono: +31 345 477814 Fax: +31 345 477950Web: http://www.culemborg.nl
Rooftops Canada / Abri International Suite 313 - 720 Spadina Avenue Toronto ON M5S 2T9 Canada Teléfono: +1 416 366 1445, ext.233 Fax: +1 416 366 3876E-mail: admni@rooftops.ca
El Grupo de Acción por el Desarrollo [Development Action Group (DAG)], una ONG de desarrollo comunitario con base en Ciudad del Cabo fue el responsable de la puesta en marcha del Fondo Kuyasa. El DAG fue galardonado como Práctica Best en el concurso de Buenas Prácticas de Naciones Unidas de 2004, Grupo de Acción por el Desarrollo: Programa de viviendas populares. El Fondo Kuyasa es hoy una ONG completamente autónoma que facilita el acceso a la vivienda como herramienta para mejorar el bienestar y como apoyo al desarrollo de un sector financiero dirigido a las personas más desfavorecidas. Creemos que el acceso a una financiación ayuda a crear hogares y comunidades sostenibles, aliviando la pobreza. Consideramos que las personas menos favorecidas son merecedoras de créditos y capaces de construir capital social y financiero a través de préstamos y ahorros. Nuestra misión consiste en proveer crédito destinado a la vivienda y a la construcción de capital social; pretendemos hacer posible que nuestros clientes construyan viviendas de un tamaño adecuado que satisfaga sus necesidades, proporcionando un ejemplo eficaz de préstamos a personas financieramente marginadas.
Trabajamos con comunidades que perciben ingresos bajos, una media mensual por hogar inferior a 1.600 rands (260 dólares EEUU). Nuestros clientes proceden de los grupos capaces de acceder a subsidios estatales para vivienda y que utilizan fórmulas de ahorro comunitario. Hemos buscado explícitamente dirigir nuestros servicios a mujeres cabeza de familia, a aquéllas personas empleadas en el sector informal y a los pensionistas, ya que las personas pertenecientes a estos grupos humanos se han visto tradicionalmente excluidas del sector financiero formal. El 74% de nuestros clientes son hoy mujeres.
Hasta el momento hemos realizado más de 4.000 préstamos con un valor de más de 20 millones de rands (3,3 millones de dólares EEUU). Nuestros clientes constatan los beneficios derivados de la tenencia en propiedad de una vivienda, y no los limitan a la seguridad física, sino que perciben estos beneficios reflejados en una mayor cohesión del hogar, en una disminución de las tensiones derivadas de la pobreza a las que se ven sometidas las relaciones familiares o de pareja, en una mejora de la salud y en un incremento de la sensación de bienestar y de dignidad, así como en una mayor implicación con su comunidad. El Fondo Kuyasa está firmemente comprometido en el uso de la microfinanciación como medio no sólo para la obtención de una vivienda sino también para la creación de comunidades sostenibles. Desde este punto de vista, reconocemos la necesidad continuada no sólo de construir viviendas sino de crear las condiciones sociales, económicas y ambientales apropiadas para comunidades dinámicas constituidas por un rango amplio de participantes institucionales.
Importancia de los préstamos microfinancieros: El Fondo Kuyasa siempre ha considerado de forma explícita los micropréstamos como su competencia principal. Se han establecido colaboraciones con organizaciones preocupadas por el problema de la vivienda tales como ONG, gobiernos locales o OBC.
La necesidad de sostenibilidad en el hogar antes que de sostenibilidad institucional: A través de este proyecto se ha desarrollado un programa de microfinanzas capaz de priorizar la sostenibilidad del cliente y su bienestar mientras se busca, de forma simultánea, la sostenibilidad financiera de la institución.
Concentración en mujeres y pensionistas: Las personas que pertenecen a estos grupos vulnerables constituyen la mayoría de los beneficiarios de los préstamos.
Ahorro colateral: al contrario que los bancos formales, utilizamos los ahorros existentes como garantía de los préstamos, permitiendo a las personas con empleos informales el acceso al sector financiero.
El Fondo Kuyasa funciona a través de una estrategia en dos frentes. En primer lugar incentiva un programa de ahorro y préstamo comunitario que construye capital financiero y social utilizando mecanismos de crédito apropiados para los muy desfavorecidos, impactando en los niveles doméstico y comunitario. En segundo lugar, esta práctica se apoya en un proceso de documentación y análisis dirigido a mejorar el modelo y a contribuir en el sentido más amplio a las finanzas del usuario final y a mejorar las oportunidades de acceso a la vivienda. Estos frentes complementarios generan fuertes redes y grupos de oportunidades que reúnen a profesionales, comunidades y políticos en torno al problema de la vivienda.
Nuestra financiación mayoritaria inicial, utilizada para financiar los préstamos de nuestros clientes, procedió de un prestamo del Fondo de Oportunidad de la Red del Sector Urbano [Urban Sector Network Opportunity Fund], que a su vez estaba respaldado financieramente por la Agencia Sueca para el Desarrollo Internacional [Swedish International Development Agency (SIDA)]. El déficit operativo y el robustecimiento del proyecto se han financiado con cargo a becas obtenidas de una variedad de patrocinadores, entre los que se incluyen la Unión Europea, USAID, el ayuntamiento de Culemborg, la Fundación Gilles, CORDAID y IBIS. Con la colaboración técnica de Shorebank, Kuyasa está entablando negociaciones con el sector bancario formal de Sudáfrica. El objetivo de estas negociaciones es asegurar la capacidad de Kuyasa de acceder a un mercado financiero amplio y facilitar la eventual integración del mercado de bajos ingresos en el sector financiero formal. El Fondo Kuyasa se plantea el objetivo de atraer una variedad de patrocinadores internacionales para promover la generación de conocimiento local que ataje el déficit de créditos dirigidos a las personas más desfavorecidas. Gracias a nuestro éxito hemos crecido desde un equipo de trabajo de tres personas hasta un equipo de 20 empleados en 2006 (predominantemente mujeres). Dado el nicho único que ocupamos y la herencia del apartheid presente en el sistema educativo sudafricano, encontrar a los gestores y empleados apropiados supone un reto en sí mismo. Los trabajadores proceden del pequeño grupo de solicitantes que reunían las características adecuadas. La mayor parte de la formación se hace puertas adentro, capitalizando el poso de experiencia acumulado en Kuyasa, aunque los empleados acuden a formación externa cuando se considera apropiado.
Los retos más importantes a los que se ha enfrentado el Fondo Kuyasa tienen que ver con el acceso a la financiación de su cartera de préstamos y con la formación. El desarrollo de un producto de préstamo apropiado y de los sistemas idóneos de administración y de gestión de la información también han supuesto retos considerables.
El refinamiento del tipo de préstamo tuvo lugar durante el primer año de operaciones, su principal fortaleza se basó en el uso de métodos tradicionales de ahorro y en la vinculación de éstos con el proceso de préstamo. El modelo común de alquiler con derecho a compra, con el que los consumidores sudafricanos están familiarizados formó parte también de los orígenes de nuestro sistema de préstamo. Al apoyarse en estos dos populares modelos financieros ya existentes, las comunidades a las que nos dirigíamos comprendieron fácilmente el producto ofrecido por el Fondo Kuyasa y fueron capaces de gestionarlo. Nuestros empleados, procedentes de las propias comunidades con las que trabajamos tienen un alto grado de empatía y compresión del contexto en el que se utiliza nuestro producto. Esta estrategia doble de mecanismos de autoregulación entre pares y la alta visibilidad de nuestros empleados ha generado un modelo microfinanciero eficaz.
El Fondo Kuyasa proporciona canales de financiación adicional dirigida a la vivienda, y las comunidades por su parte proporcionan sus ahorros y su trabajo cooperativo. El control del proceso de adquisición de vivienda corre de su cuenta, y aunque Kuyasa facilita el acceso a otras ONG y OBC que apoyan en materia de vivienda, son las comunidades, sus comités elegidos e indivíduos quienes se motivan y construyen sus propias viviendas. Como todos los procesos de empoderamiento, éste es un proceso de negociación y aprendizaje.
Aunque nuestro principal problema ha residido en la consolidación económica del proyecto, según hemos asentado el Fondo Kuyasa y hemos desarrollado un registro de la evolución de los préstamos y de innovación, el acceso a financiación se ha hecho más sencillo. Esperamos alcanzar la sostenibilidad completa del proyecto en los próximos 18 meses.
En el espacio de cinco años, el Fondo Kuyasa ha experimentado un rápido crecimiento, proporcionando más préstamos en el último año que en los cuatro años previos de existencia. Kuyasa mide su éxito a través de la sostenibilidad de los hogares y de su propia sostenibilidad financiera, centrándose nuestro impacto en el nivel doméstico.
Hemos prestado más de 20 millones de rands (3,3 millones de dólares EEUU) a 4.084 clientes, de los que el 74% son mujeres. Todos nuestros clientes tienen unos ingresos inferiores a 3.500 rands mensuales (573 dólares EEUU), y un 60% cuenta con unos ingresos inferiores a 1.500 rands (245 dólares EEUU). El tamaño medio de la unidad familiar de nuestros clientes es de cinco miembros; esto quiere decir que nuestros préstamos han repercutido positivamente en las vidas de unas 20.240 personas.
Nuestro saldo de préstamo pendiente es de 8,9 millones de rands, con una tasa de impagos que hoy ronda el 5%. El proyecto logra recuperar el 55% de los gastos totales y, en diciembre de 2005, llegramos cubrir el 79% de nuestros costes de operación.
Utilizando nuestros préstamos, nuestros clientes construyen viviendas de entre 36 y 60 m2. Podemos contrastar esta superficie con la de viviendas construidas de manera formal y pagadas a través de subsidios, que rondan los 23 m2.
Nuestras investigaciones demuestran que nuestros clientes utilizan los préstamos para nuevas viviendas (57%), para ampliaciones (23%), para mejorar la eficiencia térmica (16%) y para acabados (4%).
Aparte de estos resultados tangibles, en Kuyasa creemos que hemos contribuido a generar un modelo de utilización de microfinanzas que integra la responsabilidad social, retando a los sistemas microfinancieros y a los paradigmas bancarios existentes, proporcionando un nexo de unión entre el sector financiero formal y las poblaciones con bajos ingresos.
Añadimos un valor considerable a los fondos que recibimos. Por cada rand recibido en concepto de ayudas en 2001, Kuyasa fue capaz de ofrecer el valor de 1,66 rands en préstamos a nuestros clientes. Esta tasa creció a 3,84 rands en 2004; en 2005 este valor se redujo a 2,09 rands, principalmente porque Kuyasa recibió una importante inyección financiera a través de ayudas a finales de aquel año financiero.
La sostenibilidad financiera de nuestros clientes constituye nuestra mayor preocupación. El punto de partida del proyecto Kuyasa fue el desarrollo de una estrategia microfinanciera y de un producto que satisfaciera las necesidades de nuestros clientes y que a la vez asegurara la mejor tasa posible de devolución. Esto significa que los clientes de Kuyasa pagan intereses por sus préstamos por debajo de los que les ofrecerían las instituciones del sector financiero formal por cantidades semejantes en mercados de préstamo menos arriesgados. La gran fortaleza de Kuyasa reside en nuestro potente contingente de trabajadores de campo que siguen el desarrollo de los préstamos y que aseguran una buena tasa de devolución. Así pues, nuestra apuesta ha sido el desarrollo de los productos, la estrategia y la capacidad institucional requeridas para servir a este mercado en concreto, a partir de aquí hemos obtenido el volumen necesario para servir a este mercado con eficacia de costes.
El Fondo Kuyasa utiliza los préstamos brutos que recibe para financiar los préstamos que hace a sus clientes, se prefiere este método al de las ayudas directas. Mediante este método, Kuyasa se asegura como institución financieramente sostenible, reduciendo así su dependencia de donantes externos y fortaleciendo su habilidad para financiar viviendas de bajo coste en el futuro próximo a través del acceso a préstamos comerciales en el sector bancario. En estos momentos estamos manteniendo negociaciones que consoliden esta línea de financiación. Esperamos alcanzar la sostenibilidad plena en los próximos dos años (2008).
La población a la que se dirige este proyecto incluye mujeres, hogares encabezados por mujeres, pensionistas y aquellas personas empleadas en el sector informal; confiamos en la capacidad de estas personas de gestionar las microfinanzas cuando se les brinda la oportunidad. Así, continuamos abriendo y desarrollando nuevos mercados, llamando a la gran bolsa de población no bancarizada o infrabancarizada, y estrechando el hueco existente entre el mercado conformado por las personas con bajos ingresos y los proveedores de servicios financieros formales.
El Fondo Kuyasa proporciona una vía financiera a grupos de otra forma excluidos; ofrecemos préstamos dirigidos a la mejora de sus casas y viviendas y contribuimos así a la sostenibilidad de los hogares y comunidades. Al integrar los ahorros personales y el trabajo cooperativo en el sector de la vivienda, nos saltamos los canales gubernamentales y privados de acceso a la vivienda, incrementando el valor de las viviendas y provocando el establecimiento de un mercado de vivienda en los vecindarios más desfavorecidos.
Producto préstamo: Durante los últimos cinco años hemos refinado nuestro producto préstamo a partir de su concepción inicial. Acumular la experiencia continua proporcionada por el trabajo de campo para adaptar y definir el modelo de préstamo ha sido clave para crear el eficiente producto que hoy ofrecemos. Aunque hemos construido nuestro producto sobre modelos financieros existentes y sobre nuestra propia experiencia, reconocemos que según crecemos y nos movemos hacia contextos culturales diferentes, nuestro producto deberá evolucionar. Creemos que la expansión geográfica y del tipo de producto que ofrecemos, actualmente en planificación, se beneficiará de las lecciones que hemos aprendido hasta ahora, pero requerirá más refinamiento.
Tasas de devolución: Una gran parte de nuestro aprendizaje está relacionado con las altas tasas de devolución y con la recogida, sobre el terreno, de las devoluciones. Esto es el resultado directo de la construcción de una relación con nuestros clientes y con el extensivo trabajo de campo llevado a cabo para promover el proyecto Kuyasa en los barrios en los que operamos. El Fondo Kuyasa se enorgullece, de forma justa, de la alta tasa de devolución (actualmente del 90%), debida, sobre todo a la presencia continua de nuestros trabajadores de campo en las comunidades a las que servimos.
Capacidad institucional: El tercer gran proceso de aprendizaje en el que se ha involucrado Kuyasa tiene que ver con la necesidad de desarrollar y refinar los sistemas de operación y gestión existentes, de modo que el proyecto pueda apoyar a sus trabajadores de campo de la mejor forma posible. El rápido crecimiento experimentado durante estos últimos años nos ha obligado a transformar radicalmente los requerimientos de los sistemas de gestión de la información iniciales y nos ha obligado a poner en marcha sistemas de gestión adaptados a las nuevas necesidades.
Kuyasa se inspiró en un principio en los sistemas de ahorro rotativo existentes; estos constituían el mecanismo de ahorro y financiación predominante entre los sectores de población con menos ingresos cuando no podían acceder al sistema bancario tradicional. Así pues, hemos crecido a partir de los sistemas de ahorro local. Con más de 4.000 clientes beneficiándose de los préstamos, nuestro producto financiero se ha utilizado con éxito en el área metropolitana de Ciudad del Cabo. En 2005 extendimos nuestro producto a una zona con un contexto socio-económico diferente, donde no existía la tradición de los ahorros rotativos, esta circunstacia nos obligó a adaptar nuestro producto. Nuestro estudio piloto indica que la transferencia a esta zona ha tenido éxito.
El plan trianual hoy vigente incluye una importante expansión regional y del tipo de producto; esperamos crecer hacia nuevas áreas urbanas y ampliar nuestro producto desde la financiación exclusiva para la vivienda al campo de la financiación para la microempresa. De esta forma pondremos a prueba la capacidad de transferibilidad de nuestro modelo en una escala mayor y bajo un contexto organizativo y cultural diferente.
Como microprestamista eficaz, el Fondo Kuyasa se siente inclinado a compartir su experiencia; hemos participado en diversos intercambios regionales e internacionales. Entre ellos se incluyen las visitas que hemos recibido de delegados de Marruecos, India y Madagascar, y la participación en conferencias internacionales sobre microcrédito celebradas en Bangkok y Ciudad del Cabo con el objetivo de intercambiar experiencias valiosas; también hemos participado en talleres con delegados procedentes de todo el área subsahariana.
En particular, Kuyasa se ha involucrado en un proceso de intercambio de conocimientos con la Fundación de Pequeñas Empresas [Small Enterprises Foundation (SEF)], otra entidad microprestamista sudafricana con base en la Provincia de Limpopo. La SEF concentra sus esfuerzos en la reducción de la pobreza a través de la generación de ingresos, la creación de empleo y el empoderamiento social. Planeamos un intercambio mayor de conocimientos cuando se consolide la diversificación de Kuyasa desde los préstamos para la vivienda hacia los préstamos para la creación de microempresas.
Kuyasa colabora con el gobierno regional para comprender los mercados secundarios de vivienda en los asentamientos informales de la Provincia Occidental del Cabo. Somos también un caso de estudio para el programa MBA de la Universidad de Stellenbosch, en un módulo enfocado al desarrollo empresarial sostenible. El Fondo Kuyasa ha sido objeto de dos tesis doctorales y dos trabajos finales de MBA.
Kuyasa ha contribuido y ha liderado una delegación parlamentaria compuesta por profesionales de las microfinanzas cuyo objetivo era informar el debate alrededor de la legislación del sector financiero. Nuestra fructífera experiencia en el campo de los microcréditos nos ha hecho capaces de participar activamente en la Ley Nacional de crédito [National Credit Bill], enfatizando tanto la necesidad de crecimiento del sector microfinanciero, como la necesidad de dicho sector tiene de un apoyo institucional y legislativo del gobierno, no sólo para facilitar su propio crecimiento sino también para proteger a las entidades microfinancieras y a sus clientes. El Fondo Kuyasa también se encuentra implicado en estos momentos en un grupo de presión que busca formas de estimular un mercado secundario de viviendas de bajo precio y en el que se incluye también el gobierno regional de la Provincia Occidental del Cabo.
Socio | 2001 | 2002 | 2003 | 2004 | 2005 |
European Union | 63.037 | 163.612 | 414.374 | 607.239 | 148.388 |
20% | 17% | 23% | 42% | 5% | |
Gilles Foundation | 250.000 | 175.000 | - | - | 300.000 |
80% | 18% | 0 | 0 | 10% | |
Culemborg Municipality | - | 311.139 | 901.700 | 140.929 | - |
0 | 32% | 50% | 10% | 0 | |
USAID | - | 279.081 | 374.894 | - | 122.859 |
0% | 28% | 21% | 0 | 4% | |
CORDAID | - | 54.431 | 106.289 | - | - |
0 | 6% | 6% | 0 | 0 | |
Development Action Group | - | - | 1.283 | - | - |
0 | 0 | 0 | 0 | 0 | |
Western Cape Community Housing Company | - | - | - | 550.000 | - |
0% | 0 | 0 | 38% | 0 | |
Ford Foundation | - | - | - | 110.790 | - |
0 | 0 | 0 | 8% | 0 | |
Urban Resources Centre | - | - | - | 30.000 | - |
0 | 0 | 0 | 2% | 0 | |
IBIS | - | - | - | - | 200.000 |
0 | 0 | 0 | 0 | 7% | |
SIDA | - | - | - | - | 2.281.154 |
0 | 0 | 0 | 0 | 75% | |
Total | 313,037 | 983,263 | 1,798,540 | 1,438,958 | 3,052,401 |
Bulelani, Phillip (2005) «Microfinance holds the key to funding low-income housing», Cape ARgus, October 5th
Kuyasa Fund (2005) Delft Area Housing Needs Analysis Investigación realizada con la colaboración de Finmark Trust, Johannesburgo (http://www.finmark.org.za/documents/2005/AUGUST/Delft_report.pdf)
Van Rooyen, O. and Mills, S. O. (2003) «Banking on the Poor: A Review of the Kuyasa Fund», Occasional Paper, No 8, Housing Finance Resource Programme: Johannesburg (http://www.thekuyasafund.co.za/pdf/Banking%20on%20the%20Poor.pdf)
Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2006 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/06/bp1186.html |