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Fecha de referencia: 26-07-98
Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 1998, y catalogada como GOOD.
(
Best Practices Database.)
País/Country: Canadá
Región según Naciones Unidas: América del Norte
Región ecológica: continental
Ámbito de la actuación: metropolitana
Categorías = Procesos de planificación urbana y regional:
elaboración de presupuesto; planificación comunitaria; proceso
consultivo; planeamiento regional; recursos para el planeamiento
regional. Infancia y adolescencia: de 0 a 9 años; de 10 años a
la edad adulta; desarrollo de la capacidad de participación y del
liderazgo en niños; programas de apoyo comunitario; situaciones
límite: abusos, trabajo infantil, guerras; grupos vulnerables.
Uso de la información en la toma de decisiones: mejora de la
participación; indicadores; sistemas de información geográfica
(SIG), técnicas de cartografía; medidas políticas; investigación.
Contacto principal:
Christiane Sadeler
Organización de base comunitaria (OBC)
150 Frederick St, Main Floor
Kitchener
Ontario
Canadá
N2G4J3
1-519 575 4794
1-519 575 4440
E-mail:schris@region.waterloo.on.ca
Pendiente de terminación, Junio del 1998
Socio:
Regional Municipality of Waterloo (Municipio regional de
Waterloo)
Ken Seiling
Gobierno regional (7 municipios)
150 Frederick Street
Kitchener
Ontario
Canadá
N2G4J3
1-519 575 4555
1-519 575 4440
E-mail:sken@region.waterloo.on.ca
http://www.region.waterloo.on.ca
Colaboración financiera
Socio:
Family & Children Services -Waterloo Region (Servicios sociales
de atención al menor y a la familia de la región de Waterloo)
Peter Ringrose
Agencia de servicios sociales
200 Ardelt Avenue
Kitchener
Ontario
Canadá
N2C2L9
1-519 576 0540
1-519 570 0160
Colaboración: recursos humanos y de investigación
Socio:
Waterloo Region District School Board (Junta escolar del distrito
de la región de Waterloo).
Jan McGraw
Organización educativa
51 Ardelt Avenue
Kitchener
Ontario
Canadá
N2C2E1
1-519 570 0300
1-519 742 1364
E-mail:jan_mcgraw@ad.wrdsb.edu.on.ca
http://www.wrdsb.edu.on.ca/
Colaboración en la investigación
El consejo cree firmemente que, para prevenir la delincuencia,
es necesaria una aproximación global al tema; para ello, es
imprescindible que trabajen en colaboración todos los sectores
de la comunidad. El campo de actuación de este régimen de
colaboración debe abordar casi con total prioridad el mundo de
los niños, ya que según el consejo, la delincuencia tiene sus
orígenes en determinadas condiciones sociales, económicas y
comunitarias que son modificables.
Hasta el presente día, los logros del consejo se pueden resumir
en dos acciones. La primera de ellas consiste en la creación de
una amplia red a nivel regional, que engloba en una sola entidad
a quienes toman las decisiones y a los ciudadanos. La segunda de
las acciones constituye un acuerdo entre varias partes, en el que
se toma la determinación de basar, tanto las acciones preventivas
como las recomendaciones para las mismas, en la investigación y,
sobre todo, en el desarrollo de una investigación que aporte
datos reales que provengan de niños y adolescentes. Es importante
entender que, para conseguir los propósitos del consejo, tanto
los individuos como las organizaciones han de contribuir, en la
medida de lo posible, de forma voluntaria en el proyecto.
Situación antes de que la iniciativa se pusiese en práctica
El consejo para la seguridad ciudadana y la prevención del delito
en la comunidad de la región de Waterloo, creció dentro de un
programa nacional, cuyo objetivo era el de mejorar la seguridad
a través de la prevención, valiéndose para ello de iniciativas
locales. Este programa se explicó detalladamente en una comisión
federal, en la que se subrayó la necesidad de encontrar nuevas
maneras de prevenir la delincuencia, distintas del
encarcelamiento o el refuerzo policial (Horner, Marzo de 1993).
El consejo nacional de Waterloo, que representa a siete
municipios, cuatro de los cuales son áreas rurales y los otros
tres ciudades, presentó una moción para formar parte del programa
nacional, formando un comité local de investigación para la
prevención del delito.
Este comité estaba liderado por el jefe de policía local, el cual
afirmaba que era necesario realizar un acercamiento
multidisciplinar a la delincuencia para hacer de su prevención
responsabilidad de todos y cada uno de los miembros de la
comunidad. El consejo, tal y como lo conocemos hoy en día, está
formado por distintas partes que representan sectores clave de
intervención en la comunidad, y que, a su vez, trabajan en
colaboración con los ciudadanos. Antes de que se estableciera el
consejo, la relación entre los distintos colaboradores era
totalmente periférica y, o bien se centraba en proyectos
específicos de tiempo limitado o intentaba abarcar todos ellos
sin dar solución a ninguno.
La región de Waterloo, al igual que tantos otros centros urbanos
de Canadá, es desde todos los puntos de vista una comunidad
bastante próspera y segura, sin embargo, en los últimos tiempos
han ido aumentando progresivamente los índices de delincuencia
y el miedo de la población hacia la misma. El consejo para la
seguridad ciudadana y la prevención del delito en la comunidad
es la única iniciativa de este tipo a nivel regional que tiene
como prioridad la prevención del delito y que incluye una extensa
red de participantes que trabajan en un régimen de colaboración
e igualdad de condiciones. Los principales problemas a los que
había que hacer frente eran:
Preparación de la información y clasificación de las prioridades.
Se invitó a participar en el proceso a aquellas personas que
tuvieran una experiencia previa en materias tales como
sociología, educación, vivienda, comunidad, leyes, etc, ya que
podían aportar una visión más enriquecedora de los distintos
sectores de intervención. La organización estructural a la que
se llegó, constituyó uno de los primeros procesos gubernamentales
basados en una toma de decisiones consensual. El consejo estaba
formado por personas que ocupaban un puesto de responsabilidad
en la comunidad (alcaldes, jefes de policía) y por los ciudadanos
integrantes de la misma, tanto jóvenes como adultos.
Formulación de objetivos, estrategias y movilización de recursos.
El consejo se marcó como objetivo el trabajar en colaboración con
las personas integrantes de la comunidad, con la única intención
de construir una ciudad segura, libre de delincuencia, en la cual
poder vivir, trabajar y crecer sin ningún temor. Esta misión se
debía lograr a través de la consecución de tres objetivos
fundamentales:
Los distintos campos de actuación se abarcaron gracias a la
creación de ocho equipos cuya principal tarea era la de definir
y dar solución a determinados comportamientos delictivos. Estos
ocho grupos se dividían en las siguientes categorías: Asociación
de base comunitaria; Desarrollo e investigación; Diseño y
planificación; Personas mayores; Infancia y adolescencia; Sistema
judicial de base comunitaria; Planificación a nivel de barrio;
Asesoría de prensa. La labor de estos grupos de trabajo fue
altamente reconocida por los miembros del consejo, así como su
experiencia, ya que estos equipos estaban integrados por personas
entendidas e interesadas en la materia, lo cual aportaba una
visión más amplia y concisa del problema de la delincuencia en
cada caso.
La colaboración política estaba asegurada y se organizaba de la
siguiente manera:
El proceso
El consejo no contaba con los medios necesarios para una
iniciativa a nivel regional como la que se quiere llevar a cabo,
cuyo objetivo es el de crear una cultura de base comunitaria, en
la que la lucha contra la delincuencia esté basada en un
entendimiento global del tema, el consejo no contaba con los
medios necesarios. Por esta razón, se ha solicitado a altos
cargos del gobierno la colaboración de patrocinadores para poder
disponer de mejores recursos. Algunas de estas peticiones todavía
están pendientes de confirmación, pero confiamos en que el
gobierno federal de Canadá, nos reconozca como modelo de
coalición en régimen de colaboración, y eso sirva para aportar
a la comunidad recursos adicionales.
Una de las acciones que nos ha ayudado en gran medida para la
puesta en práctica del proyecto, ha sido el asociarnos de manera
informal con el Centro nacional e internacional para la
prevención del delito. Creemos firmemente en la importancia de
que las organizaciones influyentes del país entiendan y valoren,
en la medida que se merecen, las contribuciones y los objetivos
de las iniciativas de base comunitaria. Con este fin, y para
poder ser útiles a otras comunidades, hemos editado recientemente
un libro guía donde se cuenta detalladamente nuestra historia.
El centro nacional para la prevención del delito es el que ha
propuesto esta iniciativa y el que de manera parcial la ha
financiado.
El pequeño comite formado al principio ha ido sufriendo una
evolución progresiva hasta convertirse, hoy en día, en una amplia
red a nivel regional, en continuo crecimiento, para la prevención
del delito. El resultado directo, a día de hoy, es un importante
aumento en el nivel de cooperación y de integración de todas las
partes que lo componen. A través de métodos mixtos de
investigación, llevados a cabo por el consejo y por los miembros
de los grupos de trabajo en nuestra localidad, se han evaluado
las ventajas y desventajas de los trabajos realizados en régimen
de colaboración. La experiencia y la percepción de los
participantes han corroborado la importancia del trabajo en
colaboración.
Nuestro modelo de asociación ha tenido cierta repercusión a nivel
nacional. El centro nacional para la prevención del delito así
como el Comite de justicia federal de Canadá han examinado
nuestros informes. Como consecuencia de estas revisiones, se nos
pidió que realizásemos un estudio sobre la distribución de los
fondos federales entre las distintas comunidades en función de
sus aportaciones a la localidad. Con este fin, hemos organizado
recientemente un grupo centrado únicamente en este tema y los
resultados obtenidos en sus investigaciones han sido aceptados
favorablemente por el Centro nacional para la prevención del
delito.
El 16 de abril de 1998 se celebró nuestra tercera cena anual
conmemorativa en la cual, la honorable
Anne McLellan, Ministra
de Justicia de Canadá, fue la principal conferenciante. En su
discurso describía la iniciativa de colaboración de la región de
Waterloo como singular e innovadora. La principal medida a tomar
en cuenta para conseguir el éxito de la iniciativa, consiste en
conseguir un cambio progresivo en la actitud de la población, lo
que significa que habrá que prestar especial atención a la
infancia. Nuestro reciente estudio sobre 3.000 niños y
adolescentes de la localidad, muestra cuáles pueden ser las
condiciones de partida que favorecen la delincuencia en los
adolescentes. Esperamos que este informe sirva como herramienta
informativa en los departamentos de recursos financieros y
humanos de los colegios, en las organizaciones comunitarias, en
los centros de salud y servicios sociales y en los gobiernos
locales.
Como acción complementaria, el gobierno provincial de Ontario ha
decidido asignar una pequeña subvención para desarrollar un "KIT"
de acción destinado a los barrios. Este documento brindará a los
ciudadanos de las herramientas y recursos necesarios para llevar
a cabo cualquier acción preventiva con el objetivo de conseguir
mayor seguridad, ahora y en un futuro. Estas herramientas se
basan en las investigaciones nacionales y en los indicadores
locales. Nuestro principal objetivo es conseguir un cambio en la
actitud de las personas frente a la delincuencia, consiguiendo
así estimular la responsabilidad individual de cada uno y
desmitificar el delito, de tal manera que las "buenas prácticas"
se conviertan en experiencias aplicables a nivel local.
Sostenibilidad
Como se ha descrito con anterioridad, en los últimos tiempos
contamos con el apoyo del gobierno regional en nuestra
iniciativa para la prevención del delito. Se están realizando
peticiones de apoyo a altos cargos del gobierno y se están
llevando a cabo numerosos debates sobre los servicios sociales
y el apoyo a las asociaciones corporativas. A pequeña escala,
hemos observado un aumento tanto en la curiosidad de la gente de
la localidad como en la buena voluntad de los mismos para
colaborar con la causa. Este hecho se ha podido observar
claramente en la celebración de la cena anual por la justicia,
a la que se han acercado más de 500 personas. Los precios de la
entrada eran populares gracias al apoyo de las empresas, y el
dinero recolectado se mandó a un banco de alimentos bajo el lema
de "comida para los niños". La sostenibilidad de nuestra
iniciativa a día de hoy depende fundamentalmente del fuerte
compromiso de un grupo de participantes.
Lecciones aprendidas
Como expresó el guía comunitario de nuestra coalición, la región
de Waterloo debe forjar su propio camino. En nuestro intento de
llevar a cabo un cambio en el paradigma local podíamos basarnos
en dos importantes iniciativas:
Transferibilidad
Cada comunidad es un caso singular y necesita, por tanto, seguir
sus propios pasos en el desarrollo de un determinado programa.
Aún así, creemos que nuestra iniciativa puede ser de gran ayuda
y un ejemplo tangible para otras comunidades de cómo establecer
un entorno comprensible y estable para los adolescentes y los
niños a través del trabajo en colaboración de los dirigentes y
los propios ciudadanos. De hecho, un gran número de comunidades
de todo Canadá nos han pedido información sobre nuestra
experiencia. Como nuestros recursos son limitados para poder
satisfacer todas las peticiones con demostraciones in situ, hemos
editado una guía y un vídeo dirigidos a todas aquellas
comunidades que deseen emprender un proceso de colaboración
colectiva para la seguridad ciudadana. Insistimos, tanto en el
vídeo como en la guía, en que dicha colaboración es tan singular
como la comunidad de la que emerge. De todas maneras, esperamos
que nuestra iniciativa sirva como motivación otras comunidades
para realizar acciones similares, aunque creemos que la
experiencia es irrepetible en sí misma, confiamos en que alguno
de los ingredientes esenciales sirvan como estímulo en otras
partes de Canadá.
Referencias
Tony Reinhart (1998) "Region's crime prevention program draws
praise from justice minister" (Kitchener-Waterloo Record. April
17, 1998)
Kelly Daynard (1998) "Council hears from Council" (New
Hamburg Independent. April 22, 1998)
(1998) "Don't cheat kids, government urged"
(Kitchener-Waterloo Record. April 1, 1998)
Frank Etherington (1998) "Treat causes, not symptoms of teen
crime" (Kitchener-Waterloo Record. March 21, 1998)
Tony Reinhart (1998) "Prevention of Crime works best"
(Kitchener-Waterloo Record. March 11, 1998)
Frances Barrick (1998) "Tackle Roots of Crime, MPP told"
(Kitchener-Waterloo Record. February 17, 1998)
(1998) "Neighbourhood Action Kit to be 'cruiserware'"
(Kitchener-Waterloo Record. March 26, 1998)
Community Safety and Crime Prevention (1998) "The many faces
of crime prevention (video)" (Council of Waterloo Region. March
1998)
Community Safety and Crime Prevention (1998) "Launching a
Community Coalition for Crime Prevention and Safety" (Council
of Waterloo Region; National Crime Prevention Centre. April
1998. Pag 1 - 43)
The Child and Youth Action Team for The Waterloo Region
Community (1997) "Report on The Region of Waterloo's Youth
Survey" (Safety and Crime Prevention Council, Dr. C. Barry
McClinchey. April, 1998. Pags: 1-78)
Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 1998 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/98/bp425.html |