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Desarrollo de infraestructuras y vivienda "People Square" en Windhoek (Namibia)


Fecha de referencia: 26-07-98

País/Country: Namibia

Región según Naciones Unidas: África
Región ecológica: árida y semiárida
Ámbito de la actuación: barrio

Categorías = Igualdad y equidad de género: acceso a los recursos; plena participación en la sociedad; necesidades por razón de género. Vivienda: vivienda asequible; carencia de hogar, personas sin hogar; propiedad del suelo y seguridad. Participación ciudadana y riqueza cultural: educación cívica; participación comunitaria.
Contacto principal:
Ms Edit Mbanga
Saamstaan Housing Union (OBC)
c/o Namibia Housing Action Group
P P Box 21010
Windhoek
Namibia
Tel 264 61 239398
Fax 239 61 239397
nhag@africa.com.na

Socio:
Dr. Anna Muller
Namibia Housing Action Group (ONG)
P O Bo 21010
Windhoek
Namibia
Tel 264 61 239398
Fax 239 61 239397
nhag@africa.com.na
Colaboración financiera
Colaboración técnica
Socio:
Ms Kambua
Build Together Programme (Gobierno Central)
Mugunda Street. Kututura
Private Bag 13289
Windhoek
Namibia
Tel: 264 61 218064 or 218022
Fax: 264 61 218020
Colaboración financiera


R E S U M E N

La Saamstaan Housing Union (Unión por la Vivienda de Saamstaan) tiene como objetivo abordar las necesidades de vivienda de la población de bajos ingresos, especialmente de las madres solteras que viven en chabolas en los patios traseros, en asentamientos informales y en habitaciones alquiladas. Para ello les ofrecen una parcela y un alojamiento seguros y asequibles. Esto se consigue a través de la auotayuda y del trabajo colectivo. Esta asociación voluntaria también pretende ayudar a construir lazos comunitarios y a que asuman la responsabilidad de conseguir su propia vivienda.
El People Square Group (Grupo de la plaza del Pueblo), uno de los cinco subgrupos que componen la Saamstaan, trabaja por su cuenta en este campo desde 1989. Después de un proceso de negociación que duró dos años y que había comenzado antes de que el país alcanzara la independencia, lograron que la Local Authority in Windhoek (Autoridad Local de Windhoek) les permitiera comprar suelo a un precio asequible. Ellos mismos urbanizaron y construyeron las infraestructuras de servicios, y en un plazo de cinco años llegaron a levantar cuarenta y cinco casas dotadas de agua y saneamiento. Para conseguirlo se partió de lo que los habitantes podían realmente permitirse y se ha contado con el trabajo colectivo para reducir los costes. El grupo inicial ha pasado a ser una comunidad cohesionada en la que cada problema ya no se aborda sólo desde el ámbito familiar respectivo, sino dentro del contexto de un grupo más amplio. A lo largo del proceso las mujeres han ganado confianza en sí mismas y los participantes han incrementado su capacidad de autogobierno y de abordar sus problemas. Como dijo una trabajadora comunitaria del ayuntamiento "Teneis mucha fuerza". En su lucha por conseguir una vivienda asequible, ha sido el primer grupo en Namibia que consigue comprar y urbanizar una tierra colectivamente.



Fechas clave

13 de agosto de 1987: Constitución de la Saamstaan Housing Union
1990; Adquisición de la parcela comunal
1993: Inicio de la construcción de viviendas
13 de agosto de 1997: Inauguración de las 45 casas



D E S C R I P C I Ó N

Motivos para el desarrollo de Saamstaan
A lo largo de la década de los 80, es decir, durante los años precedentes a la independencia del país, la situación de la vivienda en Windhoek y en toda Namibia fue empeorando. Las políticas estatales no permitían a la población de bajos ingresos acceder a una vivienda, con lo cual comenzó a aumentar la ocupación de los patios traseros, que se ocultaban al exterior mediante telas de gallinero y pilas de ladrillos. En aquel momento estas ocupaciones estaban prohibidas y el ayuntamiento podía desmantelar las chabolas. La población de bajos ingresos quedó excluida del proceso de vivienda formal, pues sus ingresos eran demasiado reducidos para acceder a las casas de calidad construidas por la organización semiestatal National Building and Investment Corporation (NBIC) (Corporación Nacional de la Construcción y la Inversión). Por esa razón las empleados de hogar, los trabajadores autónomos y las personas con bajos ingresos del sector servicios tuvieron que recurrir a otras estrategias para conseguir un alojamiento.

Relaciones entre los principales agentes implicados
Las Autoridades Locales dejaron de ser las encargadas de la oferta de viviendas en alquiler y, de acuerdo con la
orientación fijada por el gobierno, la organización semiestatal, introdujo la vivienda en propiedad. Las autoridades locales continuaron siendo responsables de urbanizar los terrenos, siguiendo un principio de recuperación de costes. Dos destacados líderes comunitarios del sector no gubernamental, un trabajador social de la iglesia y un sacerdote, celebraron una reunión con cuatrocientos miembros de la comunidad, dentro del Año Internacional del Alojamiento de 1987. Alentaron a la comunidad para que se organizara, en un principio a través de la Iglesia Católica. Se trataba de la primera iniciativa comunitaria que abordaba el problema de la vivienda. Durante los dos primeros años, los miembros gestionaron la compra directa de suelo a la autoridad local, pero el aumento de los precios hizo que dejara de ser una opción al alcance de sus posibilidades. Cuando la Saamstaan Housing Union comenzó su andadura, no existía confianza ni entendimiento entre los distintos agentes. Muchos pensaban que cooperar con el gobierno era una forma de colaborar con el sistema político opresivo, mientras que desde las estructuras oficiales se desconfiaba de los movimientos populares, considerados una amenaza para su propio status quo.

Contexto socioeconómico y ambiental
Los miembros de la Saamstaan vivían en Katutura, un barrio construido para alejar a la población negra de la ciudad de los blancos, siguiendo el modelo de Sudáfrica, que aplicaba el apartheid (segregación racial) en la planificación urbana. Hacia 1987, los habitantes de Kututura vivían en casas de renta baja que las autoridades locales habían construido; por aquel entonces la NBIC desarrolló un par de proyectos de viviendas en propiedad. La población indigente nunca participó en el proceso convencional de alojamiento, pues se les consideraba y trataba como mera fuerza trabajo, al servicio de los intereses de la población blanca. Para ellos comprar un solar, obtener un crédito o construir una vivienda eran conceptos absolutamente ajenos. Las personas cuyos ingresos se encontraban por debajo de la línea de la pobreza no tenía posibilidad de comprar las casas que la NBIC ofrecía. El trabajo de las iglesias tenía un enfoque básicamente asistencialista y la población no estaba articulada socialmente ni organizada para afrontar sus propias necesidades. Cualquier organización cívica era considerada una amenaza política para el gobierno, mientras que las principales organizaciones políticas centraban sus actividades fuera de Namibia. En el país no se habían creado organizaciones comunitarias para satisfacer las necesidades de la población. Además, a la población indigente se le negaba el acceso a las oportunidades económicas y de educación. Los miembros de la Saamstaan proceden del grupo de población de menores ingresos de Windhoek.

Problemas abordados
De acuerdo con el contexto socioeconómico descrito anteriormente, el principal problema al que había que enfrentarse era la falta de suelo y de vivienda asequibles. Dado que se había decidido trabajar conjuntamente, uno de lo elementos fundamentales pasó a ser la creación de una dinámica comunitaria que incluyera tanto las propias acciones colectivas como la construcción de autoconfianza. La población local se encuentra en el último escalón de la política oficial de vivienda, una política centrada básicamente en la vivienda en propiedad. Se trata de una estrategia que no resuelve el problema de alojamiento pero que genera expectativas en la comunidad. Así pues, era importante que la población desarrollara una actitud diferente hacia la vivienda y que cambiara la forma de afrontar sus propias necesidades. La iglesia, que se implicó inicialmente en el proceso de un modo asistencial, también despertó expectativas entre algunos de los miembros de la Saamstaan.

Preparación de la información y establecimiento de las prioridades
Lossocios de la Saamstaan eran, y todavía continúan siendo, los principales implicados en el proceso de obtención de información y de establecimiento de prioridades. Con el apoyo de profesionales voluntarios, los miembros recopilaron los datos de su entorno para establecer los perfiles socioeconómicos. En las reuniones se delegó en algunos de los miembros para que investigaran las opciones de alojamiento disponibles. Tomando como referencia la información socioeconómica obtenida, se discutió sobre qué sería asequible para los miembros y se establecieron las prioridades. La Saamstaan llevó a cabo un estudio sobre sus propios miembros en 1988 y llegó a la conclusión de que el rango de ingresos más habitual se encontraba entre los 20 y los 40 dólares de EEUU al mes. En ese momento hubieran necesitado ganar más de 140 dólares de EEUU para optar al único programa de vivienda que ofrecía la NBIC. En septiembre de 1989 también se organizó el congreso "Un espacio donde vivir para todos" , en el cual diferentes grupos compartieron información y la población de menores ingresos redactó un comunicado, dirigido al nuevo gobierno, en el que estipulaban sus necesidades. El gobierno sólo comenzó a implicarse una vez alcanzada la independencia nacional, y su compromiso se tradujo en el desarrollo del Build Together Programme (Programa Construyamos Juntos).
Al mismo tiempo, en 1992, los grupos de usuarios de vivienda de los sectores de bajos ingresos de Namibia constituyeron el Namibian Housing Action Group (NHAG) (Grupo Namibio de Acción por la Vivienda), su propia red de organizaciones que contaba con una unidad de Servicio de Apoyo. Antes de la creación del NHAG Support Service (Servicio de Apoyo del NHAG), el respaldo que recibía la Saamstaan se basaba en las aportaciones voluntarias de distintos técnicos. Con el NHAG aumentó el intercambio de información entre las comunidades de Namibia y también creció el número de contactos con otras grupos de alojamientos precarios internacionales, como la South African Homeless People's Federation (Federación Sudafricana de las Personas Sin Hogar).

Formulación de objetivos y estrategias y movilización de recursos

Objetivos
El People Square Group tenía que conseguir solares y viviendas asequibles para sus miembros, y resolver así su situación inestable de alojamiento.

Acciones
La organización y la planificación se preparan en las reuniones de grupo, en las cuales los miembros deciden cómo organizarse y qué métodos seguir para desarrollar su programa. El primer paso consistía en obtener el suelo. Puesto que los solares aislados son demasiado caros, los miembros decidieron postular conjuntamente por una porción mayor de suelo, que posteriormente ellos mismos dividirían en parecelas, encargándose también ellos mismos de la construcción de la red de agua y saneamiento. La negociación para conseguir el suelo duró dos años y, una vez que cumplieron el requisito exigido por el ayuntamiento de constituirse en organización asistencial, la Saamstaan procedió a pagar la compra del terreno. Esto fue posible gracias al apoyo del Ayuntamiento de Kitchener, de Canadá, que les concedió un préstamo. Aunque en realidad el dinero recibido no era un préstamo individual a los miembros de Saamstan, ellos lo han devuelto con intereses, con lo cual ha sido posible crear un fondo rotativo. Con la ayuda, en primer lugar, de técnicos voluntarios y después del NHAG-SS, los miembros de la Saamstaan desarrollaron el trazado urbanístico y el plan de vivienda. En un taller se acordaron las normas y el reglamento para la propiedad del suelo. Se diseñó un contrato en el que se recogían los derechos sobre el suelo de los individuos, que podían ser heredados o transferidos a otros miembros.
Los miembros se encargaron de la organización de los recursos propios, como los ahorros, la recaudación de fondos o la aportación de trabajo; así mismo, recogieron dinero para producir ladrillos y realizaron las excavaciones. Todos los miembros de la Saamstaan tenían sus ahorros en la Credit Union, pero esta institución no estaba preparada para gestionar préstamos para vivienda, con lo cual se puso en marcha un plan independiente de ahorro para devolver el préstamo para las viviendas.
La construcción comenzó cuando el primer grupo, de veintiún personas, terminó de pagar sus parcelas y consiguió ahorrar el 10% de sus préstamos, como medida de seguridad. Las otras veinticuatro casas restantes se construyeron en una segunda fase. Estudiantes bajo supervisión y artesanos capacitados se encargaron de levantar las paredes de ladrillo e instalar las tuberías. Por otra parte, cuatro de los miembros, entre ellos una mujer, han recibido capacitación como albañiles.
El Build Together Programme ha financiado la construcción de las casas, lo cual implica que el programa reconoce como destinatarios a los grupos comunitarios.
Con la excepción del People Square, el grupo de la Saamstaan Housing Union se ha embarcado en otras actividades no directamente relacionadas con la consecución de una vivienda. Ante las perspectivas de una nueva financiación potencial, desarrollaron un ambicioso plan de acción, como parte de los preparativos de la conferencia Hábitat II. Sin embargo, cuando la oficina de Saamstaan sufrió la crisis económica de 1997, que provocó una reducción de personal, los miembros optaron por centrarse en primer lugar en las actividades relacionadas con el suelo y la vivienda, puesto que la organización se había creado para abordar precisamente esa necesidad.

Respaldo político
A raíz de la independencia nacional, la Saamstaan consiguió un mayor apoyo y reconocimiento público. Varios miembros expusieron sus temas de trabajo, sus problemas y sus peticiones en el primer taller celebrado tras la independencia, que fue organizado por el Minister of Regional and Local Government and Housing (Ministerio de Gobiernos Locales y Regionales para la Vivienda). El Dr. Amadhila, Primer Ministro, asistió a un encuentro con la Saamstaan en 1996 y el actual Ministro Dr. Iyambo inauguró las cuarenta y cinco casas del People Square, el 13 de agosto de 1997.

Recursos
En los primeros años y con fondos recibidos de donaciones, los propios miembros de Saamstaan producían los ladrillos y una cuadrilla llevaba a cabo la construcción. Pero posteriormente, con el People Square, la situación cambió, pues no era posible continuar con estas dos actividades "subsidiadas". Los miembros han comenzado a aportar más recursos propios e incluso han conseguido devolver el préstamo que habían recibido para comprar la tierra. Mediante presión política y negociaciones, los miembros han logrado acceder a la propiedad del suelo y a la financiación .

Liderazgo
Los miembros de la Saamstaan formularon los objetivos y ejecutaron el programa de vivienda. Así mismo, son ellos quienes eligen a sus propios líderes y a los comités de trabajo. Hay líderes comunitarios, profesionales, personal de la Saamstaan y del Servicio de Apoyo del NHAG que dan apoyo técnico a los miembros para que sean capaces de llevar a cabo las acciones necesarias para cumplir sus objetivos.

Proceso

Problemas

  1. . En una primera etapa era difícil emprender acciones colectivas que no se encuadraran dentro de las estructuras familiares. El proceso de reconocimiento desde las instituciones públicas fue lento y los miembros se impacientaban porque no veían resultados inmediatamente. Esto se ha podido superar gracias a que un grupo de personas ha mantenido su compromiso con el programa y los miembros han recuperado la ilusión y motivación en cuanto se han empezado a ver los resultados.
  2. . Los solares y los materiales eran muy caros. El grupo estuvo negociando con la autoridad legal durante dos años y, una vez que se constituyó como organización asistencial, los miembros recibieron una oferta razonable para comprar suelo.
  3. . También hubo problemas con el control financiero de la oficina central por parte del personal. La construcción de las viviendas se desarrolló en dos fases. Durante la primera de ellas, la oficina de la organización controlaba los libros de cuentas, y los gastos superaron lo presupuestado. El grupo decidió atajar este problema y en la segunda fase controlaron ellos mismos el dinero. Han conseguido hacerlo de forma eficaz. Hacia 1997, todos los grupos de la Saamstaan Housing Union (Cooperativa de Vivienda de Saamstaan) empezaron a controlar localmente sus finanzas. Éste ha sido un factor importante para alcanzar la sostenibilidad.
  4. . En cuanto a la sostenibilidad financiera, se hizo evidente que el enfoque inicial, según el cual los materiales para ladrillos y el trabajo era financiado por los donantes, no era sostenible. Los miembros abandonaron este método y han optado por utilizar sus recursos propios. Un segundo aspecto estrechamente relacionado con la sostenibilidad se deriva del hecho de que, como los miembros tienen bajos ingresos y empleos informales e inseguros, pueden perder fácilmente su trabajo y con ello su capacidad de devolución de los préstamos. Para abordar este problema y aumentar la seguridad de pago, los miembros han incorporado un sistema de ahorro previo y como medida interna ante un problema de pagos, han acordado alquilar las viviendas, usando mientras tanto las casas provisionales pertenecientes al grupo.

Temas pendientes
El grupo tiene que mantener sus sistemas de control financiero, pues de otro modo no podrían acceder a los servicios individuales ni a la propiedad del suelo. Para realizar las subdivisiones legales de los solares, con las que se permite la tenencia individual, tienen que intervenir tres profesiones diferentes y en la actualidad no sería posible mantener los estándares seguidos en el programa. El gobierno ha diseñado un contrato de propiedad flexible de la tierra, que permitirá a los miembros registrar la propiedad. Habrá que afrontar los altos estándares exigidos para subdividir los terrenos de forma que los miembros puedan actualizar sus títulos con escrituras de propiedad independientes.

Logros

Objetivo alcanzado
Para medir la consecución de objetivos, se tiene en cuenta la situación actual del alojamiento y como indicadores se adoptan aspectos relacionados con los costes. El grupo ha alcanzado el objetivo de conseguir suelo y vivienda. Las cuarenta y cinco familias del People Square Group tienen una parcela y un alojamiento básico que cuenta con agua y saneamiento. Los miembros están adoptando medidas de garantía contra la pérdida de sus viviendas en caso de problemas económicos, no perderán sus casas, para lo cual la comunidad trabaja unida. Los miembros pagan entre veinte y treinta dólares EEUU al mes, cantidad que es inferior a la que se paga actualmente para alquilar una habitación. El dinero que pagan supone entre una tercera y una cuarta parte de sus ingresos (unos ochenta dólares EEUU al mes). Al utilizar sus propios recursos, han logrado construir sus casas por sesenta y un dólares EEUU por metro cuadrado, precio que incluye la red de agua y de saneamiento de las parcelas. Esto supone en torno a una tercera parte de los costes de vivienda de otros proyectos de vivienda para población de bajos ingresos, ejecutados en 1997 por organizaciones paraestatales.

Coordinación e integración
Se ha desarrollado un espíritu comunitario y se han generado canales para resolver los problemas. Esto no existía al principio, cuando el grupo comenzó a reunirse. Hay más personas implicadas en el control financiero, mientras que en las primeras etapas la única persona activa y líder era el clérigo.

Impacto
La Saamstaan Housing Union es la organización de vivienda líder y su enfoque de tierra comunal, autocontrol, acciones colectivas y ahorro previo suponen un ejemplo para otros grupos.
Impacto en las políticas y las estrategias.
A nivel local, las estrategias seguidas por los miembros de la Saamstaan en el proyecto de la People Square, han inspirado a otras comunidades locales, dentro y fuera de la Saamstaan, para que aborden sus problemas de alojamiento. Tres grupos han accedido a terrenos de forma comunitaria, y otros tres están en el proceso de negociación por el suelo. A nivel nacional, el congreso inicial condujo al reconocimiento público de que las personas sin hogar tienen un papel que jugar _ y esto se ha convertido en el pilar de la estrategia gubernamental llevada a cabo en el Programa Construyamos Juntos. Con el National Plan of Action (Plan Nacional de Acción) de marzo de 1996, para preparar la conferencia Hábitat II se identificó a los grupos de ahorro como los beneficiarios del programa. Los sistemas alternativos de tenencia de suelo desarrollados por la People Square son un ejemplo de cómo sistemas flexibles de propiedad pueden ayudar a la población de bajos ingresos a acceder a un terreno seguro en las ciudades planificadas, y no sólo en los asentamientos informales.

Capacidad institucional
Desde que se fundó la Saamstaan en 1987, se han desarrollado y han crecido las capacidades para afrontar los problemas de alojamiento a nivel local. Las personas que veían el acceso a una vivienda desde una perspectiva asistencialista, han aprendido que ellas pueden gestionar sus propios proyectos y programas, y que no necesitan esperar hasta que vengan otros a ayudarles. El apoyo profesional inicial está disminuyendo y, dentro de Namibia, entre las personas implicadas en el fortalecimiento comunitario, hay hoy más usuarios de vivienda que contratados a tiempo completo.
Recursos
Tanto los recursos de suelo como los financieros se negociaron fructíferamente a través del lobby de los miembros de la Saamstaan y el hecho de que el Build Together Programme conceda financiación a grupos organizados se han convertido en una práctica aceptada.

Repercusión en las actitudes y en el comportamiento
Hoy se reconocen las necesidades de la población de bajos ingresos. Los esfuerzos comunitarios tienen un reconocimiento público fuera del grupo, mientras que, en el interior del mismo, ha aumentado la cooperación. Los miembros han pasado de una actitud de dependencia a tener seguridad en sí mismos.

Sostenibilidad
En cuanto a la integración de los elementos económicos, ambientales y culturales, el desarrollo del proyecto se ha basado en las necesidades económicas y sociales de los participantes. No se podían recoger todos los elementos a la vez, pero la población ha ido dando pasos gradualmente para alcanzar la sostenibilidad económica.
Inicialmente, los miembros gestionaron los recursos con la ayuda del Servicio de Apoyo del NHAG o de los voluntarios. En la actualidad, los miembros participan en las negociaciones sin ninguna ayuda externa, y ellos mismos se ocupan de temas como el rechazo al desalojo o el acceso al servicio eléctrico.
La recuperación de costes se dirige principalmente a la tercera parte del monto total, destinada al pago de servicios y préstamos. Después de las lecciones aprendidas al dejar en las manos del equipo contratado la recaudación de cuotas, ahora es el grupo quien asume la responsabilidad de esa recaudación. Cuando asumieron el control de la contabilidad en 1997, abordaron con energía los retrasos en los pagos municipales. Han conseguido solucionar los problemas y, desde entonces, los miembros gestionan activamente los retrasos en los pagos y buscan alternativas para aquellas personas que se encuentran en dificultades.
El Peopole Square se ha alejado de las actividades fuertemente subsidiadas. Ahora ellos pagan por los trabajos o lo realizan por sí mismos y financian la producción de ladrillos con los fondos obtenidos de las aportaciones locales de los miembros. Es cierto que los fondos para la compra de suelo provinieron de financiación externa, pero no se trataba de un donativo, sino que los miembros han devuelto ese dinero al fondo rotatorio de la Saamstaan.
Los miembros del grupo han desarrollado habilidades para poner en marcha sus propias iniciativas y el grupo es básicamente autosuficiente. En este sentido no necesitan recursos externos para conservar su parcela y su vivienda.

Lecciones
El trabajo desarrollado por la Saamstaan supone una referencia para los grupos de usuarios de vivienda de bajos ingresos en Namibia. Los mismos miembros han ido modificando el programa inicial a medida que iban detectando errores en el proceso. Las aportaciones provenientes de la South African Homeless People Federation también han contribuido a plantear nuevos enfoques en las comunidades. Algunas de las lecciones son las siguientes:

  1. . Las personas pueden organizarse y desarrollar sus propias soluciones para el alojamiento, a través de la ayuda mutua, incluso cuando, como ocurre en Namibia, no exista tradición en este tipo de prácticas en la ciudad.
    2. Aprender a controlar el dinero localmente es un factor importante para la construcción de la comunidad. La oficina encargada no gestionó los primeros préstamos adecuadamente y se excedieron en los gastos, por ello el grupo asumió la gestión de sus propios préstamos y posteriormente también se encargaron de la contabilidad. En la actualidad, incluso la parte relacionada con el ahorro se gestiona localmente, y ha resultado un factor fundamental para el desarrollo de lazos comunitarios. Se puso más énfasis en este tema después de la reunión celebrada en noviembre de 1996 para intercambiar experiencias con la South African Homeless People Federation, y de varios programas de intercambio.
    3. El sistema de ahorro previo ha sido fundamental para el desarrollo de Saamstaan. El primer grupo de parcelas individuales no fue capaz de devolver los préstamos y, por ello, el People Square Group puso en marcha un plan de ahorro previo al inicio de la construcción.
    4. La propiedad comunitaria del suelo y la ayuda mutua deben partir de un enfoque de abajo hacia arriba, que la propia comunidad haya identificado como solución; las circunstancias locales determinarán qué pasos hay que dar en primer lugar.

Transferibilidad
Las lecciones aprendidas se han aplicado en otras partes de Namibia y en el propio Saamstaan, donde tres grupos de la Saamstaan y otros tres grupos distintos participan en la red del NHAG. Se ha transferido el principio de trabajar juntos para abordar el problema de alojamiento, mientras que las medidas específicas a tomar en cada caso dependen de las decisiones de los miembros de cada grupo y de las circunstancias locales. Todos los grupos del NHAG aplican ahora el criterio de comenzar a ahorrar antes de conseguir los préstamos para construir viviendas.



Este documento se ha editado a partir de una versión inglesa.

Traducido por Marian Simón Rojo.


Revisado por Carlos Verdaguer.

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