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Buenas Prácticas > Españolas > Concurso Internacional 1996 > http://habitat.aq.upm.es/bpes/onu/bp259.html

Ciutat Vella, rehabilitación integral en el centro histórico de Barcelona (España)


Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 1996, y catalogada como GOOD. ( Best Practices Database.)
País/Country: España

Región según Naciones Unidas: Europa Occidental (Turquía incluida)
Región ecológica: Zona costera
Ámbito de la actuación: Barrio
Instituciones: Gobierno central, gobierno local, gobierno regional, organismos internacionales, sector privado (sector informal incluido)

Palabras clave = Asequible. Servicios básicos. Área edificada. Conservación. Desarrollo económico.

Categorías = Servicios sociales: seguridad ciudadana; ocio; grupos vulnerables. Protección del medio ambiente: reducción de la contaminación; creación de zonas verdes en la ciudad; uso de tecnología. Vivienda y uso de suelo: industria de la construcción; acceso a la financiación de la vivienda; ordenación territorial y normativa (SGI incluido)

Contacto principal:
Marti Abellá
Area de Gerencia
PROCIVESA
Rambla, 77
08002-Barcelona España
Tel: +34.3.301.66.16
Fax: +34.3.318.74.41

Patrocinador:
Diputación de Barcelona
Pza. Sant Jaume
08002-Barcelona, Catalunya España
Tel: +34.3.402.73.89
Fax: +34.3.402.73.91

Socio:
Pere Cabrera
Director del Area de Rehabilitación Integrada
de Ciutat Vella
Ayuntamiento de Barcelona
Rambla, 77
08002-Barcelona, Catalunya España
Tel: +34.3.301.66.16
Fax: +34.3.318.74.41


R E S U M E N

Desde 1987 en Ciutat Vella -centro histórico de Barcelona- se desarrolla un Plan de Rehabilitación Integral que abarca diferentes programas sectoriales de intervención: urbanismo, vivienda, seguridad, bienestar social, revitalización económica, movilidad, accesibilidad, equipamiento e infraestructuras. Entre 1987 y 1994 se han invertido 86.000 millones de pesetas en el distrito, en el que residen 96.000 personas con un nivel de renta por debajo de la media y una fuerte componente de tercera edad. Una parte importante del área está peatonalizada y se desarrolla una experiencia piloto de acceso restringido en un barrio con el fin de mejorar la movilidad que se irá extendiendo al resto de la zona. La operación cuenta con el apoyo de la UE a través del programa Life.


Inicio: 1987
Final: en curso


D E S C R I P C I Ó N


1. Descripción de la actuación

Desde 1987 el Plan de Rehabilitación Integral para el conjunto de Ciutat Vella -centro histórico de Barcelona- (96.000 habitantes) desarrolla diferentes programas sectoriales de intervención que han transformado profundamente el distrito. Programas que afectan al urbanismo, la vivienda, las infraestructuras, los espacios públicos, el equipamiento y las dotaciones, bienestar social, la revitalización económica, movilidad, accesibilidad y seguridad.
Ciutat Vella fue durante siglos el centro político, industrial, comercial y financiero de Barcelona. Con la nueva dimensión urbana que adquiere la ciudad tras la realización del Ensanche en el XIX, el distrito entra en un imparable proceso de degradación progresiva. La pérdida de peso económico y la marcha de las clases de mayor renta a otras zonas de la ciudad hace que estos barrios se vean pronto afectados por los problemas derivados de la falta de renovación del tejido urbano, deterioro de la vivienda, asentamiento de actividades marginales y precarias. El paso de los años acentuó los problemas generando importantes bolsas de marginalidad social y urbana. Por otra parte, el grado de centralidad del distrito incrementó la movilidad con todas sus secuelas: congestión, caída de la calidad ambiental por ruido, contaminación, riesgos...
En 1987 se considera Ciutat Vella como Area de Rehabilitación Integrada, un instrumento del MOPTMA que permite articular las actuaciones de todas las administraciones en la zona. Se crea una sociedad anónima municipal, Promoció de Ciutat Vella (Procivesa) encargada de llevar adelante el proyecto.
El modelo por el que se apuesta es el de hacer compatible la residencia con la actividad económica terciaria (comercio, hostelería, turismo, servicios, ocio) y potenciar su rango de centralidad mediante la instalación o potenciación de una oferta cultural importante. Se trata de desarrollar actuaciones que no solo eviten la fuga de población residente sino que sean atractivas para atraer otra nueva en el futuro provocando la revitalización social, económica y urbanística del territorio.
Desde 1987 a 1994 se han canalizado inversiones hacia Ciutat Vella por valor de 86.000 millones de pesetas que, desglosadas en los principales capítulos de actuación, arrojan el siguiente balance: vivienda (16.279), infraestructuras (12.699), aparcamientos (3.579), espacios públicos (18.077), equipamiento-ciudad (15.874), Universidad (9.675) y equipamiento de barrio (9.969).
En el Plan de Actuación de Ciutat Vella han intervenido el Ayuntamiento, la Diputación de Barcelona, la Generalitat y la Administración Central (MOPTMA). Desde el punto de vista de la financiación se ha contado con el apoyo de los Fondos de Cohesión de la Unión Europea. El grado de participación ciudadana ha sido importante.
A grandes rasgos el Plan de Rehabilitación Integral para Ciutat Vella ha respondido a los siguientes criterios:



A lo largo del proceso se han priorizado en tiempo y recursos las zonas más degradadas y con estructura más deficiente del distrito.



El complejo entramado de la red ha permitido establecer un mosaico de zonas verdes y plazas públicas, entrelazadas por calles con un marcado componente peatonal, que tiene consecuencias positivas sobre el tráfico.
La misma potenciación de la complejidad y diversidad urbana de Ciutat Vella incentiva nuevos modos de uso del espacio. Se refuerza con la peatonalización -que incluye circuitos señalizados- e incremento del espacio público en la zona, especialmente en las calles y zonas comerciales. La eliminación de barreras arquitectónicas es otro rasgo de la actuación, así como la creación de ejes para bicicletas.
Un aspecto especialmente relevante es la regulación del acceso de vehículos, experiencia piloto que se lleva a efecto en el barrio de la Ribera. Barcelona es una de las cinco ciudades europeas (junto con Bolonia, Dublín, Marsella y Trondheim) que colaboran con el proyecto Gaudí del programa DRIVE2 de la Dirección General XIII de la Comisión Europea. Se experimenta con tecnologías innovadoras aplicadas a una gestión integrada de la movilidad urbana para implantar sistemas de control del acceso de vehículos a zonas restringidas. El sistema aplicado persigue reducir el tráfico en el interior de la zona mediante la restricción física al acceso que permita el paso tan solo a los vehículos autorizados durante los periodos preestablecidos. Se utiliza una tecnología de tarjeta inteligente con bolardos retráctiles gobernables desde el Centro de Control de Tráfico. Durante el período de libre acceso -carga y descarga- los bolardos se encuentran escondidos bajo la calzada.
Está prevista su ampliación mediante un Plan Global para Ciutat Vella consistentes en una zonificación compuesta por nueve supermanzanas cuyo acceso será controlado por un sistema informático centralizado.

En relación con la cohesión y el bienestar social:
La actuación se ha centrado en la creación de dotaciones y equipamientos locales, centros cívicos.
programas de atención social, sanidad, atención a la infancia y tercera edad. Se incluye la atención a los problemas de seguridad ciudadana (Plan de Seguridad).

2. Situación anterior
En Ciutat Vella reside el el 5,88 por 100 de la población de Barcelona sobre el 4,31 por 100 de su territorio (la densidad es de 220 habitantes/Ha frente a los 180 de media de Barcelona). El distrito presentaba al final de la década de los setenta y mediados de los ochenta una población envejecida que iba reduciéndose a un ritmo acelerado, con una sustitución de residentes autóctonos por inmigrantes sin recursos (desde 1974 hasta hoy perdió el 40 por 100 de su población). Fruto de este proceso se da un envejecimiento progresivo de la población (el 24 por 100 de los residentes tienen más de 65 años).
Los indicadores socioeconómicos presentaban elevados índices de paro, lo que unido a la pérdida de actividad económica marcaban una espiral de marginalización en el distrito..
Ciutat Vella cuenta con una estructura urbanística de origen medieval fuertemente densificada: calles inadecuadas a las necesidades actuales, edificios lenta e inexorablemnte degradados... .El 70 por 100 de las viviendas existentes fueron construidas con anterioridad a 1900; la superficie media de las viviendas es de 60 m2, pero el 60 por 100 de todas ellas no alcanzan dicho tamaño. Siete mil viviendas no disponían de baño privado y tan sólo el 10 por 100 contaba con ascensor, circunstancia especialmente relevante en relación con el alto número de ancianos residentes. De los 6.300 edificios existentes, un 2 por 100 se encontraba en estado ruinoso. Sólo el 60 por 100 de las viviendas disponía de conducción de gas. El incremento constante de la movilidad, especialmente tráficos de paso, tiene como secuelas la contaminación, ruidos, congestión, ocupación del viario por vehículos, riesgos añadidos para el peatón....

3. Situación posterior



4. Proceso
La actuación se inicia con la declaración del distrito como Área de Rehabilitación Integrada y la creación de Procivesa, entidad que articula los diferentes proyectos y programas a desarrollar. Esto permite refundir en un solo documento las inversiones y los programas de actuación de los diferentes Planes Especiales de Reforma Interior. La suma de todo ello obtiene un efecto multiplicador, dando racionalidad global al conjunto de la operación, permitiendo asignar recursos con mayor eficacia y priorizar las zonas de intervención.
Las actuaciones de liberación de suelo se realizan con la ayuda de la capacidad expropiatoria de la administración municipal. Todas las familias residentes en zonas de remodelación tienen la posibilidad de escoger entre una indemnización económica o su realojamiento en viviendas de promoción pública.
Existe un elevado grado de conciencia sobre la necesidad de realizar un ambicioso programa de renovación urbana, de manera que todas las administraciones con competencias en el proceso participan a través de un consenso muy elevado. También los residentes y comerciantes participan activamente en la toma de decisiones que afectan a sus respectivos intereses. Esta participación de la sociedad civil en el proceso ha sido de especial importancia, permitiendo la identificación general del ciudadano con el proyecto.. Además de las medidas de participación contempladas en las ordenanzas, se han desarrollado mesas y comisiones de participación vecinal y de asociaciones en prácticamente todas las acciones que se han desarrollado dentro del Plan integral.

5. Puntos fuertes


6. Puntos débiles





S O S T E N I B I L I D A D


La experiencia desarrollada en el Centro Histórico de Ciutat Vella aporta una serie de elementos relevante:





I M P A C T O




Este documento se ha editado a partir de una versión castellana.
Revisado por Javier Echenagusía.

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