| Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2012 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/12/bp_23.html |
País/Estado — España
Región según Naciones Unidas — Europa
Región ecológica — continental
Ámbito de la actuación — global
Agentes — institución académica o de investigación; gobierno central; asociación de profesionales.Categorías — Tecnologías, instrumentos y métodos: soporte lógico (incluyendo sistemas expertos); soporte físico; sistemas y tecnologías de información y comunicación; tecnologías apropiadas. Cooperación Técnica e Internacional: creación de redes; formación continua. Transferencia.
Avenida Juan de Herrera 4, 28040 Madrid (España) Tel: +34 91 3364235E-mail: habitat@ee.upm.es
Ministerio de Fomento, Paseo de la Castellana 112, 28046 Madrid (España) Tel: +34 91 7284091 Fax: +34 91 7284862E-mail: concursobbpp@fomento.es
Paseo de la Castellana 112, 28046 Madrid (España) Tel: +34 91 7284091 Fax: +34 91 7284862Web: http://www.fomento.es
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La Biblioteca Ciudades para un Futuro más Sostenible (CF+S) se puso en marcha en 1996, con el objetivo de difundir en castellano las buenas prácticas del Concurso Internacional de Dubai.
Ese primer objetivo está claramente cumplido: la presencia que actualmente tiene la Biblioteca en Internet (constatable, entre otros datos, gracias a los 350.000 enlaces que se dirigen a ella y las numerosas citas en libros y publicaciones científicas) la convierten en máximo difusor de buenas prácticas de la comunidad hispanohablante en Internet, ya que es la mayor base de datos en castellano de buenas prácticas del mundo. Esto, junto con la gran accesibilidad de la información, han convertido a la Biblioteca en un lugar de referencia para aquellas personas o entidades interesadas en esos temas, permitiendo así una transferibilidad potencial de todas las buenas prácticas de la base de datos.
Además de la presencia en la red, la Biblioteca se ha vinculado con la vida académica de la Escuela de Arquitectura, lo que ha permitido que durante los 16 años que lleva en marcha el proyecto se hayan formado alumnos de grado y de postgrado mediante su participación en las tareas de mantenimiento y publicación de contenidos. Esa formación abarca tanto el conocimiento de las buenas prácticas como la capacitación en temas de sostenibilidad (ya que la base de datos incorpora también una gran cantidad de contenidos de carácter más teórico y reflexivo).
Otro de los aspectos fundamentales de la Biblioteca es la puesta en práctica de principios de sostenibilidad en su funcionamiento cotidiano, mediante la reutilización de equipos informáticos y el uso de software libre poco exigente en recursos y que permite, además, el acceso a la información de la Biblioteca incluso con conexiones precarias a Internet.
La puesta en marcha del programa de buenas prácticas a raiz de la Conferencia Hábitat II, cuyo objetivo era la difusión de las mismas, no contaba con una estrategia de difusión adaptada a la entonces incipiente Internet. La base de datos oficial (http://www.bestpractices.org) era de acceso restringido y dificultaba la indexación de sus contenidos por parte de los buscadores. Por otra parte, aunque el inglés es la lengua franca de la ciencia y de los negocios, hay muchos ámbitos de conocimiento y muchas áreas geográficas en las que esta lengua no está tan extendida, de forma que muchas veces los destinatarios de la información que se generaba a través del concurso de buenas prácticas no tenían acceso a la misma.
Al poner en marcha una base de datos de buenas prácticas se tuvo claro que la iniciativa debía ser independiente de la coyuntura del país, de forma que, aunque la idea había surgido del Comité Hábitat Español y del MOPTMA, que ejercía su secretaría técnica, su gestión se puso en manos de una institución dedicada expresamente a la generación y la difusión del conocimiento, es decir, una universidad.
En cuanto al diseño del funcionamiento de la Biblioteca CF+S, se realizaron una serie de reuniones entre representantes del Ministerio y el equipo encargado de la dirección de los trabajos, formado por varios profesores de la Escuela de Arquitectura.
Se priorizó que la base de datos fuera accesible en todos los sentidos: gratuita, sin necesidad de suscripción y ligera para que cualquier conexión permitiera utilizarla de manera eficaz.
La iniciativa de traducir al castellano la documentación del Concurso de Buenas Prácticas y publicarla en Internet surge en el seno del Comité Hábitat Español, y la asumen como propia el entonces Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente (MOPTMA) y la Escuela Técnica Superior de Arquitectura (ETSAM) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM). El Ministerio aporta los recursos financieros, mientras que la Escuela de Arquitectura aporta los recursos humanos y técnicos.
A lo largo de los años se ha mantenido este compromiso de colaboración. Durante el mandato de cinco distintos gobiernos de la nación se ha venido renovando cada año el convenio que da cobertura financiera a esta iniciativa (excepto en 2006). Por otra parte, también se han producido cambios en la propia universidad, con la aparición de una nueva figura, los grupos de investigación, que ha venido a reforzar la autonomía y la sostenibilidad del proyecto.
En este tiempo también se han realizado todo tipo de actividades de difusión en colaboración con asociaciones comunitarias, ONG, instituciones académicas, asociaciones profesionales y entidades gubernamentales, siendo especialmente reseñable la colaboración con el Foro Iberoamericano y del Caribe sobre Mejores Prácticas.
La Biblioteca Ciudades para un Futuro más Sostenible (CF+S) se puso en marcha en 1996, con el objetivo de difundir en castellano las buenas prácticas del Concurso Internacional de Dubai, en un servidor alojado en el dominio de la Universidad Politécnica de Madrid: http://habitat.aq.upm.es. Esta iniciativa optó por la creación y difusión de conocimiento mediante herramientas de software libre (en concreto, el sistema operativo Debian GNU/Linux, el servidor web Apache y el buscador Namazu), aplicando criterios de accesibilidad, haciendo un esfuerzo especial por hacer llegar las buenas prácticas a aquellas personas que, trabajando sobre el terreno y en condiciones precarias, más provecho podían sacar de las mismas.
Los principios de la Biblioteca, mirados en perspectiva, son los mismos que han hecho de Internet lo que es ahora —un esfuerzo cooperativo y abierto a todos— pero en 1996, en mitad de la primera burbuja punto-com, este planteamiento ‘desinteresado’ no estaba ni mucho menos tan extendido fuera de los círculos académicos.
Así, la principal innovación de la Biblioteca CF+S en relación con la base de datos de buenas prácticas ha consistido en convertirse en una auténtica salvaguarda de la información, poniendo todos sus esfuerzos en conservarla y divulgarla, independientemente de las modas y de las supuestas fechas de caducidad que se pretendían imponer desde fuera. El resultado es la mayor base de datos en castellano de buenas prácticas del mundo, donde puede estudiarse la evolución del concurso y ver cómo las enseñanzas aportadas por las primeras buenas prácticas se han ido incorporando de forma natural a las posteriores.
En cuanto a la propia experiencia, conviene resaltar el crecimiento y la maduración del proyecto en un triple sentido:
La Biblioteca también ha colaborado con otras entidades en diversos proyectos y eventos. En primer lugar, se ha prestado colaboración a otras dos iniciativas también patrocinadas por el Ministerio de Fomento, como es el Foro Iberoamericano y del Caribe de Mejores Prácticas y el European Urban Knowledge Network (EUKN). En el ámbito inmediato de la Escuela de Arquitectura se han organizado y se ha participado en numerosas actividades docentes de divulgación de las buenas prácticas y del concepto de sostenibilidad entre la comunidad universitaria; entre todas ellas cabe destacar la Iniciativa para una Arquitectura y un Urbanismo más Sostenibles (IAU+S), que organizó dos eventos, en 2004 y en 2006, en los que participaron expertos invitados, profesores y alumnos de todos los departamentos de la ETSAM y que han dado lugar a sendas publicaciones con las aportaciones recogidas en dichas jornadas. También en el ámbito universitario, la Biblioteca colaboró en la organización del Simposio Internacional Desarrollo, Ciudad y Sostenibilidad celebrado en 2009 en La Serena (Chile), en el marco del programa conjunto de doctorado de la Universidad Politécnica de Madrid y la Universidad de La Serena. Finalmente, en el año 2011 se organizó en la Escuela de Arquitectira una exposición sobre el VIII Catálogo Español de Buenas Prácticas para amplificar la difusión de las mismas, organizándose una jornada de presentación con representantes de las experiencias premiadas en ese concurso.
A lo largo de sus 16 años de existencia, la Biblioteca CF+S sólo ha tenido dificultades financieras en 2007, teniendo que reducir su actividad al mínimo, debido a un problema administrativo que impidió firmar el convenio correspondiente al ejercicio 2006 con el entonces Ministerio de Vivienda. Posteriores convenios han cubierto el desfase producido, pero desde entonces se ha estado buscando fuentes alternativas de financiación que eviten problemas similares en el futuro. Así, a través del recién creado GIAU+S se firmaron con el Instituto para la Diversificacion y Ahorro de la Energía (IDAE) y el Centro de Estudios Ambientales de Vitoria-Gasteiz sendos convenios para recopilar buenas prácticas de movilidad sostenible y de gestión de suelos agrícolas periurbanos, que se han incorporado a la base de datos de la Biblioteca.
La visibilidad que la Biblioteca CF+S ha alcanzado la convierte en un medio de referencia en Internet para la difusión de las buenas prácticas y todos los temas relacionados. Desde que la Biblioteca comenzó su andadura en 1997, el número de visitas a la página se ha ido incrementando, hasta estabilizarse en aproximadamente 8 millones de visitas anuales. En los últimos cinco años se han recibido 40 millones de visitas. El 42% de las menciones que existen en la red a la ETSAM y el 18% de las menciones a la UPM son debidas a la mención de la Biblioteca Ciudades para un Futuro más Sostenible. El número de enlaces que se dirigen hacia CF+S desde todo tipo de entidades públicas y privadas alcanza una cifra estimada en 350.000. Además, el número de citas se sitúa en torno a 1.700 en libros y unas 700 en publicaciones científicas.
Todo ello convierte a la Biblioteca CF+S en el máximo difusor de las buenas prácticas en el ámbito de la Internet de habla hispana, con 2.000 buenas prácticas disponibles. Además, acoge una publicación periódica como el Boletín CF+S, que cuenta actualmente con 50 números y una sección de Documentos con más de 30 monografías. En este sentido, la Biblioteca se ha convertido en un recurso muy valioso para la formación de muchos técnicos y profesionales implicados en la elaboración de todo tipo de planes y proyectos de mejora de las condiciones de vida de las personas, aunque también se recibe un número significatico de consultas de personas que querrían que tales experiencias se llevasen a sus pueblos y ciudades.
El 42% de las menciones que existen en la red a la ETSAM y el 18% de las menciones a la UPM son debidas a la mención de la Biblioteca Ciudades para un Futuro más Sostenible.
La infraestructura de trabajo ya está consolidada y, gracias a la visibilidad y el prestigio que ofrece la Biblioteca CF+S, cuenta con el apoyo de la ETSAM y la UPM, lo que garantiza la continuidad de la base de datos. Una debilidad reside en la excesiva dependencia respecto del Ministerio de Fomento, que proporciona la mayor parte de la financiación; en caso de que fallase ésta habría que restringir las actividades y reducir el volumen de publicaciones, aunque no se pondría en riesgo la continuidad de la Biblioteca ni de los materiales ya publicados. En cualquier caso, dados el gran volumen de documentación disponible, su magnífico posicionamiento en buscadores y la gran importancia logradas en la red, es de esperar que no sea difícil encontrar nuevos patrocinadores. En último caso, el GIAU+S podría hacerse cargo de su mantenimiento.
Las actividades de la Biblioteca son desarrolladas básicamente por profesores y alumnos de la Escuela de Arquitectura, a través de becas de formación que ofrecen a los alumnos experiencia en el campo de la traducción y edición de textos al tiempo que una oportunidad de reflexionar sobre temas emergentes como la sostenibilidad, que apenas tienen cabida en el plan de estudios.
Siendo la traducción de todas las buenas prácticas de los sucesivos concursos una de las principales tareas desarrolladas, la utilización de un lenguaje inclusivo y consciente de los conflictos sociales y de género ha sido uno de los elementos fundamentales de la labor de concienciación desarrollada. Este enfoque pedagógico también se ha trasladado a la confección de los equipos de trabajo, en los que se ha buscado un equilibrio de género, aunque las mujeres han sido generalmente mayoría, con diversos vaivenes a lo largo del tiempo.
Después de 16 años, más de un centenar de alumnos han colaborado con la Biblioteca CF+S empapándose de tal manera del espíritu de la misma que en muchos casos han enfocado su carrera profesional hacia temas como la arquitectura bioclimática, el urbanismo participativo o la cooperación internacional, poniendo en marcha proyectos empresariales, cooperativas o colectivos de pensamiento crítico y participando en diversos movimientos sociales. Algunas de las iniciativas que han comenzado de mano de ex-colaboradores de CF+S han sido: Laboratorio Urbano, CC60, Surcos Urbanos, Obsoletos, Urbanismo Urgente y Ne.Re.As. Otros antiguos colaboradores de la Biblioteca participan o han participado de manera activa en iniciativas que ya estaban en funcionamiento y que están vinculadas con la sostenibilidad y la problemática urbana, tales como: Ecologistas en Acción, Asociación de viandantes A Pie, Traficantes de Sueños, Centro Social Seco, Basurama y Observatorio Metropolitano.
Tras la creación del Grupo de Investigación en Arquitectura, Urbanismo y Sostenibilidad (GIAU+S) de la UPM, la Biblioteca CF+S fue incorporada a su cartera de proyectos, por lo que el Grupo sustituyó a los Departamentos de Estructuras y Urbanismo en su función de garantes del proyecto. El GIAU+S en colaboración con el Instituto Juan de Herrera garantiza a día de hoy la existencia de la Biblioteca como una actividad propia.
Desde el principio se ha mantenido una línea de trabajo consistente en fomentar la durabilidad de los equipos informáticos, un sector donde la obsolescencia programada está especialmente implantada y en el que tanto la contaminación química a largo plazo como el coste del abatimiento de residuos son muy elevados. Siempre se ha utilizado el software menos exigente en recursos para realizar cada tarea, un principio que ha permitido reutilizar equipos que se iban retirando del servicio en otras áreas de la universidad. De esta forma, la Biblioteca se ha convertido en un centro de reutilización de material electrónico, aumentando su vida útil.
Las decisiones estratégicas tomadas al comienzo de la iniciativa en favor de la accesibilidad han demostrado ser acertadas. Este enfoque y la propia pervivencia en el tiempo de la Biblioteca CF+S le han otorgado gran visibilidad y prestigio en el ámbito de las buenas prácticas. La integración en un entorno académico, multidisciplinar, así como el constante flujo de personas jóvenes y con inquietudes ha retroalimentado positivamente el proyecto. Por último, la utilización de software libre ha facilitado la integración en una comunidad mucho más amplia que persigue unos ideales compartidos.
Por otra parte, aunque se han desarrollado diversas actividades en el ámbito de la Escuela de Arquitectura y de la Universidad Politécnica de Madrid, su impacto ha sido mucho menor que el conseguido en Internet. En este sentido, los medios digitales permiten enfocarse hacia un público muy concreto, mientras que, incluso sin salir del mundo académico, llegar a poblaciones con intereses más diversos sigue resultando difícil. En cualquier caso, experiencias como la Iniciativa para una Arquitectura y un Urbanismo más Sostenible (IAU+S), compartidas con diversos colectivos y grupos de la Escuela de Arquitectura han resultado muy enriquecedoras y han tenido una proyección posterior muy positiva. De cara al futuro se plantea una extensión de la iniciativa hacia nuevas plataformas (redes sociales en Internet y en el mundo de la investigación), incorporando los contenidos de la Biblioteca a las bases de datos bibliográficos utilizadas en el mundo académico.
Por último, la excesiva dependencia respecto de un socio financiero siempre es un peligro, que se ha intentado solventar mediante dos estrategias: reduciendo los gastos generales de mantenimiento para evitar que éstos lastren la viabilidad del proyecto y buscando fuentes alternativas de financiación a través de nuevos convenios con diversas entidades.
La fórmula abierta y accesible de la Biblioteca CF+S ha servido de modelo a muchas otras bases de datos que se han puesto en marcha posteriormente, tratando temas similares o relacionados con las buenas prácticas. Muchas de ellas enlazan a la propia Biblioteca, reúnen resúmenes o fichas completas de la misma. Algunos ejemplos son: Centro de la Vivienda y Estudios Urbanos A.C. (México), Observatorio Urbano del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Chile), Red de Extensión Académica de la Universidad Nacional (Colombia), Fundación Unidas (Argentina), Centro Complutense de Estudios e Información Medioambiental (España), Red de Desarrollo Local de Castilla-La Mancha (España), Portal Sostenibilidad de la Cátedra UNESCO de Sostenibilidad de la Universidad Politècnica de Catalunya (España).
Como ya se ha indicado, la mayor transferencia de información se produce a través de los 8 millones de visitas anuales. En cuanto a las transferencias directas de buenas prácticas que han sido posibles gracias a la Biblioteca CF+S, es difícil de cuantificar, ya que la Biblioteca promueve el contacto directo entre las partes interesadas, sin pretender convertirse en intermediario de las mismas. Para evaluar este aspecto, se ha realizado una encuesta en febrero de 2012 entre los contactos principales de más de 600 buenas prácticas publicadas en nuestra base de datos. De las primeras respuestas de la encuesta se tienen los siguentes datos:
Además, un número significativo de las personas contactadas (responsables de experiencias seleccionadas en anteriores concursos) afirman utilizar de forma regular la Biblioteca CF+S para documentarse sobre otras buenas prácticas.
| Año/Socio | Ministerio | ETSAM-UPM | GIAU | Total |
| 1996 | 64.394,16 | 33.738,18 | - | 98.132,34 |
| 1997 | 32.197,08 | 16.869,09 | - | 49.066,17 |
| 1998 | 33.055,67 | 33.055,67 | - | 66.111,33 |
| 1999 | 64.812,14 | 33.957,18 | - | 98.769,32 |
| 2000 | 81.557,06 | 34.953,02 | - | 116.510,08 |
| 2001 | 65.376,81 | 33.678,96 | - | 99.055,77 |
| 2002 | 70.480,90 | 37.951,10 | - | 108.432,00 |
| 2003 | 74.442,66 | 40.084,34 | - | 114.527,00 |
| 2004 | 67.592,75 | 41.287,25 | - | 108.880,00 |
| 2005 | 98.400,07 | 60.309,93 | - | 158.710,00 |
| 2006 | - | 26.270,97 | - | 26.270,97 |
| 2007 | 181.243,33 | 90.629,03 | - | 271.872,36 |
| 2008 | 151.898,66 | 27.779,10 | - | 179.677,76 |
| 2009 | 120.000,00 | 24.282,78 | 15.000 | 159.282,78 |
| 2010 | 120.000,00 | 24.282,78 | 20.000 | 164.282,78 |
| 2011 | 100.000,00 | 25.011,26 | 23.000 | 148.011,26 |
| Presupuesto total | 1.325.451,28 | 584.140,65 | 58.000 | 1.967.591,9 |
| Media anual | 82.840,70 | 36.508,79 | 3.625 | 122.974,49 |
El socio que figura como «Ministerio» ha ido cambiando en función de las distintas denominaciones administrativas:
La gestión económica de la ETSAM-UPM se ha realizado a través de la sección de Urbanismo del Instituto Juan de Herrera (IJH), salvo el año 2009 que se hizo a través de la Oficina de Transferencia Tecnológica (OTT).
No existe ningún tipo de legislación relacionada con esta buena práctica.
En esta buena práctica no se incluyen referencias bibliográficas, ya que la propia buena práctica en sí misma es una biblioteca digital.
| Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2012 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/12/bp_23.html |