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País/Estado — Argentina
Región según Naciones Unidas — América Latina
Región ecológica — árida y semiárida
Ámbito de la actuación — provincial/estatal
Agentes — asociación de profesionales; fundación; organización no gubernamental (ONG); gobierno regional; gobierno central; institución académica o de investigación; organización de base comunitaria (OBC).Categorías — Erradicación de la pobreza: generación de ingresos; creación de puestos de trabajo; acceso a créditos. Desarrollo económico: oportunidades para la cooperación; microcréditos; acceso igualitario a los recursos económicos. Gestión ambiental: tecnología ambientalmente responsable; restauración ambiental; sostenibilidad ecológica.
Ruta Provincial 51, km 6. 4300 Argentina Tel: +54 385 4237371E-mail: info@coopsol.com.ar
Laprida 1575 8º 31, 1425 Capital Federal (Argentina) Teléfono: +54 11 4327 5729E-mail: Gabriela Sbarra
Via Marcora 18/20, 00153 Roma (Italia) Tel: +39 065840 400/656E-mail: ipsia.acli@pec.it
Via Cufra 29 20159 Milano (Italia) Tel: +39 02 36582772 Fax: +39 02 3658762E-mail: argentina@icei.it
Piedras 383 Piso 2, C1070AAG Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Argentina) Tel: +54 11 4343 3956 Fax: +54 11 4343 3957E-mail: calidad@fortalecer.com.ar
Libertad 725, 4200 Santiago del Estero (Argentina) Tel: +54 385 4211852 / 4228167 Fax: +54 385 4211852Colaboración financiera.
Avenida Roca (s) 527 piso 1, 4200 Santiago del Estero (Argentina) Tel/Fax: +54 385 4225568E-mail: ssafsantiago@minagri.gob.ar
Av. Belgrano (s) 1912, 4200 Santiago del Estero (Argentina) Tel: +54 385 4509528 Fax: +54 385 4509585E-mail: seadfa@unse.edu.ar
Julio A Roca 651 Piso 5 Sector 6, C1067ABB Ciudad de Buenos Aires (Argentina) Tel: +54 11 4349 3385Colaboración financiera.
Av Rivadavia 551, 4200 Santiago del Estero (Argentina) Tel: +54 385 45050 69/79Colaboración financiera.
Via Francia 1/C, 37135 Verona (Italia) Tel: +39 045 8222660 Fax: +39 045 8008020Colaboración financiera.
La cooperativa de trabajo Coopsol impulsa la iniciativa presentada y desarrollada, que busca cambiar la realidad de subdesarrollo local por medio de la inclusión de jóvenes y campesinos mediante una propuesta productiva y comercial basada en la producción de mieles certificadas orgánicas, generando empleo. La propuesta a los productores se distingue por los valores de sustentabilidad ambiental y económica, asociativismo y precios justos. El programa está orientado a la formación de una organización productiva justa y solidaria, por lo que se define claramente como una empresa social.
El impacto de la propuesta alcanza en la actualidad a 174 familias de las provincias de Santiago del Estero y Chaco. Entre sus logros más destacados podemos describir los siguientes:
La realidad de los productores campesinos presentaba las siguientes características:
Se establecieron las siguientes prioridades a la hora de llevar a cabo la iniciativa:
La propuesta se planteó con los siguientes objetivos:
Los recursos financieros proceden de dos fuentes propias y de aportes de donantes externos. Estos recursos fueron orientados a las sigiuentes actividades:
Los aportes externos provinieron de las siguientes fuentes: IPSIA, IAF, Ministerio de la Producción de Santiago del Estero, IPAC, Fundación Fortalecer y SEPyME
Los recursos humanos pertenecen a COOPSOL. Además se cuenta con la participación activa de los líderes de organizaciones campesinas, como Mesa de Tierra Figueroa y Cooperativa La Estrella. Las organizaciones donantes también participaron de maner muy activa a la hora de decidir las estrategias de para alcanzar los objetivos planteados.
Para la primera intervención se buscó trabajar con jóvenes de ámbitos urbanos y entregarles sin costo las colmenas para la producción de miel. Estas colmenas fueron financiadas por el Gobierno Nacional. Al poco tiempo un 70% de los beneficiaros había abandonado la actividad, con la consiguiente pérdida de las colmenas. Para resolver este problema se dirigió la convocatoria a poblaciones rurales, entregando las colmenas por medio de microcréditos. De este modo se logró un mayor compromiso para la atención de las colmenas, ya que éstos debían ser amortizados mediante los ingresos generados por la producción. Por otro lado, el trabajo apícola resultó una actividad más atractiva para la población rural que para la urbana, si bien normalmente hay muchos más apicultores que viven en la ciudad. Este cambio de estrategia condujo a la creación de un sistema de microcréditos que a día de hoy beneficia a otras actividades emprenditoriales.
Durante el proceso surgieron diversos problemas relacionados con la tenencia de la tierra. Los grupos campesinos habitaron durante muchos años las tierras en las que hoy producen, por lo que son sus poseedores legítimos, a pesar de no poseer los títulos de tenencia. En algunos grupos hubo de afrontarse esta problemática que afectaba al inicio de la actividad apícola, pues los apiarios debían instalarse en estas tierras, que se encontraban en litigio con empresarios que querían expulsarlos o limitar su territorio.
Para poder superar esto se desarrollaron las siguientes acciones:
Como resultado de todo esto, hoy existe una metodólogía clara de acción sobre esta problemática y un fortalecimiento del grupo.
Por efecto del cambio climático, en los meses de noviembre del año 2008 las temperatura se mantuvieron en 42 oC durante un periodo de diez días, lo que provocó un desastre ambiental que causó la perdida de un 30% de las colonias por muerte de las abejas. Una manera de intentar solucionar el problema y de recuperar parte de lo perdido fue acudir, junto a los productores, a la prensa. A partir de ahí, las autoridades decidieron apoyar en la recuperación de las pérdidas no sólo al grupo de Coopsol, sino a todos los apicultores de la provincia.
La incorporación de la actividad orgánica apícola tuvo como consecuencia un aumento de los ingresos, lo que se puede verificar en base a registros de cantidad de colmenas por productor, los kilos de miel por productor y los recibos de cobro del producto. En la actualidad son 174 las familias beneficiadas que, partiendo de cero, hoy posen una media de 30 colmenas cada una.
A partir de este trabajo, el Fondo de microcréditos se diversificó y creció en beneficiarios, financiando a otros pequeños emprendimientos urbanos familiares que incrementaron también sus ingresos.
La formación de la Asociación de Productores Orgánicos del Norte Argentino (APONA) permitió una mejor organización de los productores, dando a la vez formalidad y representación ante los distintos actores sociales.
Se logró construir un enorme capital social, con una alta visibilidad, tanto en organismos públicos como organizaciones sin fines de lucro. Esto va acompañado de una excelente valoración de los resultados, lo que nos convierte en un referente locale de desarrollo.
La diferenciación de la producción apícola a partir del modelo de trabajo de Coopsol con campesinos, es un punto de partida y un ejemplo para otras propuestas llevadas a nivel de políticas públicas.
El modelo de inclusión se desarrolló en base a una propuesta de negocio solidario sustentable consistente en cambiar la realidad a partir de la generación de ingresos, que son superiores a los costos de producción. El ciclo productivo es de 12 meses y los ingresos sólo se dan a partir del décimo mes. Los costos de producción hasta ese momento son afrontados por el productor, ya con sus propios recursos o bien a través de un microcrédito. La recuperación de los microcréditos se realiza por medio de una cuota de capital anual más el pago de intereses mensuales. Los términos del microcrédito comprenden una tasa anual del 18% y pueden consistir en entre uno y tres pagos anuales, todos con pago de intereses sobre el saldo de manera mensual.
La incorporación de una nueva alternativa de producción sustentable permite que se detenga la migración del campesino a los centros urbanos en búsqueda de trabajo. Detener la migración contribuye a la conservación de una cultura milenaria.
En muchos casos, los productores han reemplazado la producción de carbón vegetal y extracción de maderas por la apicultura, que es considerada una de las mejores alternativas para conservar y regenerar el medioambiente. Por otro lado, los productores recibieron capacitación sobre derechos ambientales, sobre todo acerca de la normativa que limita la deforestación y el uso de la tierra. Este conocimiento les sirve para defender el medio ambiente y su territorio.
La sustentabilidad del programa se logra mediante la formación bajo, reglas claras, democráticas y justas, de la asociación de productores APONA y de un Consorcio de Cooperación, WAYRA constituido por Coopsol y dicha asociación. Estas instituciones son la base de la defensa y la representación de todos los intereses que afectan a los productores.
Creemos que el camino andado, nos enseña claramente dos lecciones fundamentales.
Por un lado, la diferenciación de los productos es la única manera de sostener redes asociativas solidarias. Se debe avanzar hacia la calidad máxima del producto para así obtener los mejores precios por productos saludables (verificables por una certificación), dirigidos a un sector de la población más informado y responsable, para el que el precio no es el factor fundamental en sus decisiones de compra, sino que valoran más la calidad, naturalidad y el contexto social de producción y comercialización.
Por otra parte, la integración de los productores en un trabajo asociativo solidario debe dar respuesta a todas las problemáticas con el fin de generar un contexto de estabilidad y crecimiento. Por esta razón debe prestarse especial atención a todas sus limitaciones y realidades, para luego estar atento y acompañarles en todos los procesos de solución.
La iniciativa se continúa replicando en varias comunidades de la región. En todos los casos se sigue la misma metodología de trabajo, convocatoria, capacitación, integración, financiación y producción, además de la integración de los productores formados en APONA. La transferencia se realiza en dos provincias, Santiago del Estero y Chaco, pero existe en la actualidad demanda en otras comunidades y en otras provincias argentinas.
Fue la cooperativa COOPSOL quien comenzó la trasferencia de la iniciativa. La practica trasferida consiste también en la producción apícola con certificación orgánica, cuyo producto se destina al Comercio Justo, realizado en un contexto asociativo solidario en el que Coopsol actúa como entidad encargada de la formación y de financiación por medio del Fondo de microcréditos. Los productores formados se incorporan a APONA, que se integra junto a COOPSOL en el Consorcio Bio del Norte Argentino WAYRA para la comercialización conjunta .
El propósito de la trasferencia fue fue igualmente generar un ingreso genuino y sustentable para los campesinos desplazados de la región a través de la apicultura orgánica y en un contexto asociativo.
IAF e IPSIA, dos organizaciones que buscan generar desarrollo local sustetable en las poblaciones más vulnerables, acompañaron al desarrollo del proyecto.
Las necesidades financieras fueron en su gran mayoría cubiertas por COOPSOL, IAF e IPSIA, aunque también existen aportes de otros organismos.
Los técnicos y socios de Coopsol han trabajado a tiempo completo para llevar a cabo la transferencia. Su trabajo se orientó a la formación y al fortalecimiento de líderes productores locales, quienes asumen el rol de técnico referente local y muchas veces de representante de la comunidad de productores apícolas.
En el fortalecimiento de este rol de referente, se potenció su capacidad por medio de pasantías en otros establecimientos, reuniones técnico-apícolas, participación en la asambleas de productores de APONA, intercambio de experiencias con otras comunidades, etc.
La característica mas destacada es que todos los técnicos y capacitadores que realizaron la transferencia a los campesinos son productores apícolas, viven de la actividad y son socios de COOPSOL o de APONA, por lo que entienden a la perfección todos los problemas planteados por los productores.
La adaptación más importante consiste en que los campesinos incorporen una actividad extraña para su cultura y además la realicen de manera asociativa e integrada en APONA, realizando la comercialización junto a comunidades lejanas en muchos casos desconocidas, que llegan a estar situadas las unas de las otras a distancias de hasta hasta 700 km.
En función de los resultados que se han ido alcanzando, en los encuentros, tanto asambleas, de capacitación o de formación de los productores, se tomaron las siguientes estrategias y métodos:
Como resultados o impacto de la transferencia podemos nombrar los siguientes:
Las lecciones más destacadas aprendidas de la transferencia son:
| Socio | Año 1 | Año 2 | Año 3 | Año 4 | Año5 | Total |
| IPSIA | 400.000 | 800.000 | 750.000 | 604.500 | 2.554.500 | |
| Fundación Fortalecer | 18.000 | 18.000 | ||||
| IPAC | 1.000 | 1.000 | 1.000 | 1.000 | 3.000 | 7.000 |
| Subsecretaría de la Agricultura Familiar | 4.000 | 4.000 | ||||
| SEPYME | 7.500 | 7.500 | ||||
| Ministerio de la producción | 140.000 | 10.000 | 150.000 | |||
| Total (dólares estadounidenses) | 162.000 | 494.800 | 894.800 | 992.300 | 733.300 | 3.330.000 |
La propuestas políticas ya existen, también las leyes que valoran y apoyan este tipo de iniciativa, pero nunca se llevaron a la práctica. Es por eso que la propuesta, cuando inicia sus primeras experiencias de exportación, recibe una alta valoración y apoyo por parte del gobierno local y nacional.
Por ejemplo, Santiago del Estero es la primera provincia en ordenar sus bosques con Ley No 6.942 ello, con la cual cumple la Ley Nacional No 26.331. Con ello se inicia la protección del bosque local aprobándose solo planes de manejo sustentable http://www.redyaguarete.org.ar/noticias/regionchaco/2009/otbn-santiago.html
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