Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2010 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/10/bp2413.html |
País/Estado — España
Región según Naciones Unidas — Europa
Región ecológica — continental
Ámbito de la actuación — metropolitana
Agentes — gobierno local; gobierno central; gobierno regional; sector privado; institución académica o de investigación.Categorías — Buena gestión urbana: gestión y administración públicas; fomento de la colaboración pública y privada; movilización de recursos; gobernabilidad urbana y metropolitana. Procesos de planificación urbana y regional: remodelación urbana; planeamiento regional; recursos para el planeamiento regional; planeamiento urbano y metropolitano. Arquitectura y diseño urbano: diseño eco-lógico y asequible; paisajismo; edificios verdes.
Plaza de la Constitución 1, CP: 28522, Rivas-Vaciamadrid, Madrid, España. Tel: +34 91 660 27 40 / +34 646 159 082; Fax: +34 91 660 27 19Web: http://www.rivas-vaciamadrid.org
Ministerio de Vivienda. Paseo de la Castellana 112, CP 28046, Madrid, España. Tel: +34 91 7284091 Fax: +34 91 7284862E-mail: concursobbpp@vivienda.es
Doctor Esquerdo 136, planta 8, CP: 28007, Madrid, Madrid, España. Tel: +34 91 5019906; Fax: +34 91 5520668E-mail: tfm@metrotfm.com
Plaza 19 de Abril s/n, CP: 28521, Rivas-Vaciamadrid, Madrid, España. Tel: +34 91 6602710; Fax: +34 91 6602734E-mail: peri@rivas-vaciamadrid.org
c/ Marie Curie 5, CP: 28521, Rivas-Vaciamadrid, Madrid, España. Tel: +34 91 4020350; Fax: +34 91 4994740E-mail: palfonso@avantis.es
c/ Tajo s/n, Urbanización El Bosque, CP: 28670, Villaviciosa de Odón, Madrid, España. Tel: +34 902 232350; Fax: +34 91 4687623E-mail: Lourdes.jimenez@uem.es
Esta iniciativa cuenta con dos propósitos fundamentales: el primero es la ruptura de las barreras metropolitanas mediante la mejora de la comunicación del municipio de Rivas con Madrid y su entorno próximo, a partir de la construcción de la línea 9 de metro sobre el trazado del ferrocarril existente, y el segundo es la ruptura de las barreras urbanas internas mediante una operación de costura e integración urbana basada en la recuperación ambiental, social y simbólica de este vacío urbano, que permita dar un sentido global a la vez que articular las distintas urbanizaciones que componen el entorno urbano del municipio de Rivas-Vaciamadrid.
El proyecto puede dividirse en tres etapas , siendo especialmente importante destacar que hasta que no se completó todo el proceso —planteando finalmente un proyecto global— cada una de las fases resolvió un problema, pero planteó otro nuevo.
En una primera etapa, se produjo la transformación de la línea del ferrocarril industrial Madrid-Morata de Tajuña en la línea 9 de metro ligero, consiguiendo una mejora indudable en el sistema de comunicaciones para los habitantes de la nueva ciudad de Rivas-Vaciamadrid, que dependían del coche y de una única conexión viaria a través de la N-III. Esta actuación provocó el efecto indeseado de generar una cicatriz urbana entre los dos márgenes de las vías.
En una segunda etapa, se trabajó en la eliminación de la herida producida por la nueva infraestructura del metro ligero a su paso por la zona más poblada del municipio de Rivas, mediante la cubrición de estas vías. Sin embargo, esto generó un vacío urbano completamente ajeno a la trama y a la ordenación de los tejidos colindantes, un espacio de carácter marginal y residual.
Por último, se trabajó en la reconsideración de este vacío como una oportunidad para generar un espacio de articulación entre las dos franjas de la ciudad que habían crecido dándose la espalda (Covibar y Pablo Iglesias al suroeste y las urbanizaciones de viviendas unifamiliares al noreste). Esto originó una reflexión por parte del Ayuntamiento sobre su futuro, que finalmente fue planteada como un concurso de ideas. El proyecto ganador apostaba por un espacio público singular —un parque público equipado con dotaciones ciudadanas— como elemento capaz de vertebrar la ciudad, de coser las dos orillas incomunicadas, de urbanizar —en su mejor sentido— el banal e inconsistente paisaje suburbano que se había generado en ambos márgenes.
El desarrollo urbanístico del municipio de Rivas contó, desde su origen, con una herida que sajaba en dos partes los nuevos barrios que se iban construyendo al calor de la descentralización residencial de Madrid: la trinchera abierta de una vieja infraestructura ferroviaria que se había construido a principios del siglo XX para conectar la capital con el pueblo de Morata de Tajuña, y que llevaba décadas obsoleta al haberse suspendido el servicio de viajeros en 1953. A este handicap se unían los graves problemas de conectividad metropolitana del municipio en particular y del sureste madrileño en general, provocados por el déficit de medios de transporte públicos de alta capacidad.
El rápido crecimiento y la especialización residencial de este municipio ponían en peligro la creación de forma paralela de servicios y dotaciones que crearan una nueva ciudad equipada, por lo que resultaba necesario el trabajo en equipo de los ciudadanos y la administración para el funcionamiento equilibrado y sostenible.
La Comunidad de Madrid aprovechó el vacío resultante del trazado de esta vieja línea ferroviaria desmantelada para proponer una nueva infraestructura metropolitana de transporte en superficie (el metro ligero) que conectase los nuevos crecimientos residenciales satélite que se estaban produciendo en todo el eje del corredor de la N-III (Rivas Urbanizaciones, Arganda) con Madrid.
Esta nueva infraestructura supuso una indudable mejora de la conectividad metropolitana, rompiendo las barreras de conexión que a escala metropolitana presentaba el municipio hasta entonces. En efecto, la inexistencia de medios de transporte público de alta capacidad y la falta de empleo y de servicios en el propio municipio generaban entonces una demanda importante de movilidad hacia Madrid, que prácticamente sólo podía satisfacerse mediante el uso del vehículo privado, colapsando la carretera N-III.
La puesta en servicio del metro ligero introdujo dos nuevas estaciones en el municipio de Rivas, pero en la escala urbana persistía todavía el efecto de barrera de la vieja trinchera ferroviaria, con un fuerte impacto en el paisaje de la ciudad. El Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid y las distintas mancomunidades de vecinos participaron en el planteamiento del recorrido y la construcción de la línea de metro ligero a su paso por el municipio, mejorando decisiones de proyecto que permitirían más tarde la cubrición de las vías en una longitud de dos kilómetros, lo que supuso la conversión de la trinchera ferroviaria en un gran espacio de 12,5 hectáreas y 2,5 kilómetros de longitud, que permitiría la integración urbana y social de los barrios del oeste del municipio. El gobierno local de Rivas encontró en este lugar un terrain vague situado en el corazón de la nueva ciudad, un vacío aparecido en su mismo centro, al que ambos márgenes urbanos —fuertemente consolidados ya en aquella época— daban la espalda, así como la oportunidad para generar un nuevo espacio de relación urbana y social apostando por un gran parque urbano equipado.
En esta práctica se han planteado dos objetivos fundamentales: la ruptura de las barreras metropolitanas mediante la mejora de la comunicación del municipio de Rivas con Madrid y su entorno próximo, a partir de la construcción de la línea 9 de metro sobre el trazado del ferrocarril existente, y la ruptura de las barreras urbanas internas mediante una operación de costura e integración urbana basada en la recuperación ambiental, social y simbólica de este vacío urbano, que permita dar un sentido global y articular a las distintas urbanizaciones que componen este entorno del municipio de Rivas-Vaciamadrid. Además, se han perseguido los siguientes objetivos específicos:
El objetivo de integración urbana en las distintas escalas (metropolitana y municipal) se planteó siguiendo las estrategias que se describen a continuación:
El proyecto se desarrolla en un periodo de tiempo largo, dada la importancia de la práctica y de la cantidad de agentes que han intervenido.
El proceso tiene como fecha de inicio el año 1995, cuando se empieza a construir la ampliación de la línea 9 de metro, y termina en el año 2008 cuando entra en funcionamiento la estación de metro de Rivas Futura.
En la primera etapa, que comprende el periodo entre 1995 y 1999, participaron Transportes Ferroviarios de Madrid (TFM), como aportación mayoritaria con un 98% de la inversión, y el Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid, con un 2%, concretamente la Concejalía de Política Territorial, Obras e Infraestructuras, encargada de realizar la obra de infraestructura de transporte público metropolitano más importante del sureste madrileño (la ampliación de la línea 9 de metro desde Puerta de Arganda hasta Arganda del Rey). La aportación del Ayuntamiento estaba dirigida al sobrecoste que suponía enterrar 1,4 metros más de profundidad el trazado de la trinchera a su paso por Rivas Urbanizaciones. Esta etapa fue crucial en el desarrollo posterior, ya que decisiones técnicas como incluir la cimentación y las esperas de la estructura de hormigón para la construcción posterior de los muros de contención que sustentarían la cubrición de las vías supuso un ahorro estimado de un 60% de dicha obra de 2 kilómetros de longitud.
La segunda etapa supuso la cubrición del entorno urbano de Rivas Urbanizaciones, desde la entrada del metro en el término municipal hasta el encuentro con la Avenida de los Almendros, ya fuera del tejido residencial de las urbanizaciones. Esta etapa la cubrió en su totalidad TFM.
Entre los años 2005 y 2006 se construyó el edificio destinado a la Infancia y Juventud, posteriormente denominado Centro de recursos para la infancia Bhima Sangha, que fue financiado en su totalidad por la Concejalía de Juventud e Infancia del Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid.
Solapándose con la etapa anterior, desde el año 2004 a 2007, se trabajó primero en la convocatoria del concurso de ideas para la definición del parque equipado sobre la cubrición de las vías de metro, el montaje de una gran exposición con maquetas y paneles explicativos del proyecto y su posterior ejecución. En este momento también se mejoraron las conexiones viarias del entorno con la apertura de la calle Pamplona, que recorre de forma paralela el norte del trazado de la línea del ferrocarril. Aquí la financiación fue asumida por la Concejalía de Política Territorial, Obras e Infraestructuras en su totalidad.
La última fase, en la que participaron TFM con un 20% del presupuesto, la Concejalía de Política Territorial, Obras e Infraestructuras con otro 20% y Avantis con el 60% restante, sirvió para proporcionar mejor acceso mediante transporte público de alta capacidad a la nueva zona comercial, de ocio y negocios del municipio de Rivas, añadiendo una parada más a la línea 9 de metro, Rivas Futura, culminando, de esta forma, la operación de integración urbana con la ruptura de la distintas barreras existentes dentro del emergente municipio del sur de la comunidad de Madrid.
Las diversas instituciones que han participado en esta amplia actuación son las siguientes:
Este conjunto integrado de actuaciones desarrolladas en Rivas ha supuesto diversas mejoras, que puede decirse —por su carácter central y estratégico dentro del municipio— que benefician al conjunto de los habitantes de la localidad (aproximadamente 65.000). En la planificación de usos del suelo y estructura urbana, el primer paso fue la adquisición de los terrenos a TFM por parte del municipio y posteriormente se sucedieron las siguientes mejoras:
En relación al transporte, ya se ha comentado el beneficioso impacto de la nueva línea 9 de metro ligero sobre la movilidad metropolitana (25.000 usuarios de media diaria en 2007), la construcción de tres estaciones en el municipio y el desarrollo de un intercambiador modal de transporte (metro, autobuses, taxis, bicicletas, etc.), junto a un extensivo aparcamiento disuasorio. También se ha construido un nuevo carril bici, articulado con la red existente y permitiendo la continuidad de la red de parques con el entorno natural inmediato. Este carril bici enlaza con la red existente de ciclovías en la Avenida de los Almendros, pasa por el intercambiador y permite la salida hacia el exterior de la ciudad, abriéndola a su entorno natural inmediato.
En cuanto a la mejora del medio ambiente urbano, destaca la realización de un parque sobre lo que era el descampado resultante de la cubrición de las vías, precisamente en una zona de máxima centralidad en el municipio. Las condiciones de partida para este parque eran francamente adversas. Desde el punto de vista físico, la mayor parte del parque tenía que situarse sobre la losa de cubrición de las vías (que apenas tenía una capa mínima de tierra, lo que impedía las plantaciones) o sobre los bordes de ésta (que habían sido rellenados al realizar la cubrición), mientras que el escaso suelo natural existente era de pésima calidad —yesos o escombreras— y prácticamente impedía cualquier tipo de cimentación o de plantación. Las dificultades conceptuales eran aún mayores, pues se trataba de un espacio abandonado desde tiempos inmemoriales, sin ninguna caracterización, sin ningún elemento identificativo y sin ningún rasgo propio.
Ante este paisaje de desolación, sin huellas ni memoria, se decidió reinventar un nuevo paisaje construido. Las claves de su definición —además del programa— fueron la topografía, el agua y la vegetación:
Estas bases proyectuales miran en primer lugar a la naturaleza —teniendo en cuenta que un parque es un objeto artificial, pero construido con materiales vivos y con leyes propias que sentimos necesario respetar— por lo que se ha intentado incluir estos elementos en el nuevo espacio natural creado en la ciudad de Rivas. Esta manera de diseñar con elementos vegetales mirando a la naturaleza ha llevado a componer a partir de las distintas formas biológicas o biotipos según sus asociaciones en la naturaleza, particularmente con las de carácter mediterráneo.
En el campo de la rehabilitación urbana, el aspecto más significativo fue la creación de los distintos puntos de encuentro y acceso a la estructura lineal del bulevar, eliminando áreas residuales para convertirlas en verdaderas áreas de encuentro social.
Respecto al equilibrio funcional, la propuesta que se realizó interpretaba la vocación de los distintos residuos espaciales existentes, atribuyéndoles un nuevo uso acorde con su localización y sus características concretas:
En cuanto a las nuevas formas de gobernanza, se ha contado no sólo con unos sistemas eficaces de gestión municipal y unos servicios técnicos rigurosos, sino que se ha impulsado también especialmente la información pública, mediante exposiciones sobre las propuestas, maquetas descriptivas, etc. En esta misma línea, cabe señalar también el fomento de la participación ciudadana a través de la participación directa de las asociaciones de vecinos, asociaciones juveniles y centros escolares, estos últimos involucrados en una experiencia piloto sobre la elaboración de una encuesta para decidir los juegos infantiles que prefieren instalar en las áreas de recreo, así como la puesta en marcha de foros temáticos.
El conjunto de actuaciones incluye los siguientes aspectos relacionados con la sostenibilidad:
La mejor utilización de los recursos por parte de las dos administraciones y la negociación entre administración central y municipal en el momento de la adquisición de los terrenos para ejecutar el nuevo trazado de metro ligero, con los costes de las expropiaciones necesarias, permitieron la reducción de costes y la posibilidad, por tanto, de su ejecución. Decisiones técnicas importantes como plantear las cimentaciones que iban a ser necesarias para la construcción de los muros de contención para soportar la cubrición de las vías en el momento de la definición del trazado supuso un ahorro del 60% de la obra posterior.
Se ha mejorado el transporte público mediante la dotación de un sistema de transporte de alta capacidad, tres estaciones y un intercambiador. Se ha producido la revegetación de un espacio abandonado, transformándolo en un parque. Se emplean especies autóctonas, de bajo consumo de agua y escaso mantenimiento. También se ha articulado el nuevo parque con la red de espacios públicos y de parques existente, de modo que permite su integración y la conexión con el entorno natural del municipio. Por último, se ha ejecutado de un carril bici articulado con la red existente a nivel municipal. Para todo ello, se han introducido criterios sencillos de acondicionamiento bioclimático en el parque (sombreamiento, láminas de agua, evapotranspiración, etc.).
La creación de un lugar de encuentro y relación en esta zona del municipio de Rivas-Vaciamadrid, marcada físicamente por la herida de las infraestructuras de comunicación intermunicipal y caracterizada por una tipología residencial suburbana de viviendas unifamiliares, ha supuesto un punto de inflexión en la comprensión de la forma y el uso del espacio público, fortaleciendo el sentido de respeto al ciudadano y de convivencia, influyendo muy positivamente en la cohesión social. Desde el punto de vista simbólico, la actuación ha sido también muy relevante, pues ha invertido completamente lo que era un espacio trasero y abandonado en un espacio de referencia en el municipio, con varios elementos simbólicos (torre-mirador, ría, etc.), que contribuyen a enriquecer el sentimiento de identificación y pertenencia a un lugar de la comunidad ciudadana de Rivas. En este aspecto, es destacable también la aportación de elementos de identidad común en un municipio suburbano caracterizado en general por un paisaje urbano banalizado y carente de referencias apropiables por la ciudadanía.
Se ha planteado un conjunto de usos que pretenden articular espacios para distintos colectivos sociales: ancianos, niños, padres con hijos, jóvenes, etc. Al mismo tiempo se ha buscado diferenciar espacialmente los diferentes recintos en base a las necesidades concretas de cada uno de estos colectivos, pero también buscando el carácter complementario (niños junto a ancianos, etc.). Destaca especialmente el esfuerzo que se ha hecho para tratar los temas de juventud e infancia, sobre todo teniendo en cuenta que Rivas es el municipio con la pirámide de población más joven de toda España. En este sentido, en el parque se han incorporado zonas específicas para niños y jóvenes y se ha construido un equipamientos específico, el Centro de Recursos para la Infancia Bhima Sangha, buscando alternativas al ocio juvenil basado en el ‘botellón’.
Es destacable el esfuerzo de información y divulgación en cada etapa de las estrategias elaboradas por parte de la administración municipal, acercando a los ciudadanos en las propuestas y las soluciones planteadas a los déficits de transporte, comunicación, relación y equipamientos con los que contaba el municipio.
El Consorcio Regional de Transportes de la Comunidad de Madrid ha participado y participa activamente en varios proyectos y seminarios, tanto a nivel europeo como internacional:
La colaboración y el diálogo entre los distintos municipios involucrados (Madrid, Rivas y Arganda) en la definición de la red de servicios y estructuras supramunicipales resultaba en un primer momento una dificultad importante en la definición de la estructura urbana, pero la capacidad de diálogo y negociación de las distintas instituciones involucradas se ha convertido en una fortaleza. Esta colaboración ha servido para la resolución de problemas de comunicación en los municipios del sureste madrileño, apostándose tanto por el transporte público como por el desarrollo sostenible.
La situación de Rivas-Vaciamadrid en un punto estratégico de la Comunidad de Madrid, vinculado a la red de ciudades Madrid-Valencia, suponía un peligro en cuanto a la necesidad de suelo para las grandes infraestructuras de comunicación, tanto por carretera como por ferrocarril. El Ayuntamiento ripense y sus ciudadanos tuvieron que reivindicar su derecho a una ciudad sin barreras, consiguiendo logros como la construcción de una red de transporte público que les conectase con la capital y participando en el mejor diseño de ésta a su paso por el municipio, recuperando un entorno degradado causado por la red de infraestructuras supramunicipales para la vida en comunidad. Se ha generado un destino indiscutible para el encuentro social y el intercambio de experiencias colectivas, con la creación de una nueva imagen urbana caracterizada por la calidad de los elementos construidos y un diseño vanguardista.
El crecimiento residencial tan acelerado de Rivas-Vaciamadrid desde el inicio de la década de los 90 podría haber constituido una gran amenaza para la creación de una ciudad diversa y equilibrada, en cuanto a redes de infraestructuras, dotaciones y zonas verdes, pero la cooperación entre los agentes sociales, políticos y económicos para trabajar en este proyecto común ha supuesto un modelo de estrategia de actuación en la integración urbana y la recuperación medioambiental, con la creación de un espacio urbano diseñado con recursos que respetan el medioambiente y el establecimiento de las bases para trabajar en el nuevo concepto de conectividad ecológica.
Se ha pretendido con este proyecto dotar de espacios destinados al conocimiento de los elementos naturales y a la construcción de espacios vinculados al ocio de los distintos grupos de población, niños, jóvenes, adultos y ancianos.
Como actuación singular, está definida y desarrollada para solventar una problemática propia, en un entorno físico y social particular, por lo que efectivamente se trata de una apuesta innovadora, tanto en la planificación urbana como en el diseño físico y las aportaciones sociales.
A pesar de las singularidades y del contexto local, se trata también de una acción transferible, sobre todo desde el punto de vista del análisis de los resultados obtenidos y de los mecanismos utilizados en la gestión y la evolución de la propuesta. Los temas de dotación de transporte, resolución del efecto barrera de las infraestructuras, así como la falta de espacios públicos de referencia en los nuevos desarrollos suburbanos son temas comunes en muchas ciudades españolas de la periferia de las grandes áreas metropolitanas.
Socio | 1995-1999 | 2000 | 2005-2006 | 2004-2007 | 2007-2008 |
TFM, Comunidad de Madrid | 114.192.299,80 | 27.039.534,58 | 2.000.000,00 | ||
Ayuntamiento de Rivas. Concejalía de Política Territorial, Obras e Infraestructuras | 1.815.056,56 | 13.336.311,73 | 2.000.000,00 | ||
Ayuntamiento de Rivas. Concejalía para la Infancia y Juventud | 3.960.000,00 | ||||
Avantis | 6.000.000,00 | ||||
Total | 116.007.356,39 | 27.039.534,58 | 3.960.000,00 | 13.336.311,73 | 10.000.000,00 |
López, Víctor David (2010) «Plan Verde por Rivas», La razón, Madrid, febrero.
Jiménez Garcinuño, Lourdes; González García, Isabel; de Santiago, Eduardo (2008) «Reciclando el paisaje de las infraestructuras metropolitanas: Parque Lineal en Rivas-Vaciamadrid», Paisaje Cultural, 4o Congreso Europeo de Investigación arquitectónica y urbana, disponible en http://www.eurau08.com/int-prgrama%201.htm.
Jiménez Garcinuño, Lourdes; González García, Isabel; de Santiago, Eduardo (2008) «El agua como herramienta de re-creación del paisaje en los intersticios metropolitano: El parque lineal de Rivas», El Paisaje del Agua, Congreso europeo, Zaragoza.
Jiménez Garcinuño, Lourdes (2004) «El parque Bellavista en Rivas-Vaciamadrid», PARJAP, no 34, Madrid.
Jiménez Garcinuño, Lourdes (2004) «La construcción del parque del siglo XXI», PARJAP, no 35, Madrid.
Cortázar, Iván (2000) «Comienzan las obras para enterrar la línea 9 de metro», ABC, 1 de septiembre.
Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2010 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/10/bp2413.html |