Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas
patrocinado por Dubai en 2006, y catalogada como
GOOD.
(Best Practices Database)
País/Estado — Colombia
Región según Naciones Unidas — América Latina
Región ecológica — montañosa
Ámbito de la actuación — ciudad
Agentes — gobierno central; gobierno local; sector privado; organización no gubernamental (ONG); fundación; asociación de profesionales
Categorías —
Servicios sociales: educación; ocio; salud y bienestar.
Vivienda: vivienda asequible; propiedad del suelo y seguridad; acceso a la financiación de la vivienda.
Ordenación territorial: planeamiento y calificación del suelo; sistemas de información geográfica (SIG).
Contacto Principal
Proyecto SUR con Bogotá — gobierno local
Rosa Castaño Calle
Calle 54, nº13-30
Bogotá
Colombia
tel: 3105604 ext. 146, 148, 151
fax: 3105684
E-mail: Surkfw@cvp.gov.co
Organización Nominadora
Fundación Hábitat Colombia — fundación
Lucelena Betancur Salazar
Carrera 13, nº 52-83. Piso 1
Bogotá
Colombia
E-mail: direccion@fundacionhabitatcolombia.org
Web: http://www.fundacionhabitatcolombia.org
Socio
Departamento Administrativo de Acción Comunal Distrital (DAACD) — gobierno central
Dra. Lucía Bastidas
Carrera 30, nº 24-90
Bogotá
Colombia
tel: 2417900
E-mail: daacd@accioncomunal.gov.co
Colaboración administrativa.
Colaboración técnica.
Socio
Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) — asociación de profesionales
Calle 22c, nº 40-99
Bogotá
Colombia
tel: 3447000
fax: 2688343
E-mail: info@acueducto.com.co
Web: http://www.acueducto.com.co
Colaboración técnica.
Socio
Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) — asociación de profesionales
Calle 22, nº 6-27
Bogotá
Colombia
tel: 3386660
fax: 4443037
E-mail: atnciudadano@idu.gov.co
Web: http://www.idu.gov.co
Colaboración administrativa.
Colaboración técnica.
El problema central que ataca el Proyecto es la baja calidad de vida de los habitantes de los barrios populares, lo que se manifiesta en carencias y deficiencias del entorno urbano tales como los servicios públicos, la accesibilidad, la falta de equipamientos y espacios públicos y el déficit de vivienda. A esto se suma la baja cobertura en educación, salud y nutrición, la violencia social y familiar y los problemas institucionales. Estos últimos están relacionados con las deficiencias en los procesos de participación y representación, en el planeamiento y la gestión y ejecución de los recursos de una manera concertada y coordinada.
El Proyecto SUR con Bogotá tiene como propósito contribuir a la mejora sostenible de la calidad de vida de la población, unos 85.000 habitantes, en condiciones de pobreza de 41 barrios aledaños al Parque Entrenubes en las localidades de San Cristóbal, Usme y Rafael Uribe. Esto se lleva a cabo a través de la interrelación de diversos actores institucionales en el diseño, ejecución, seguimiento, evaluación y ajuste de acciones integrales de desarrollo. Se genera un enfoque metodológico reproducible para su mejora integral a través de un planeamiento y una gestión coordinados, contando con la participación activa de la comunidad.
Entre los logros alcanzados en el campo del fortalecimiento institucional está la transferencia del modelo de interacción del Proyecto SUR al Programa de Mejoramiento Integral de Barrios para la Ciudad de Bogotá. Con ella se pretende beneficiar directamente a un millón de habitantes a través de la coordinación interinstitucional entre entidades de orden local y de distrito, consolidando la metodología de mejora integral y estableciendo un sistema de control de impactos, el SUMI.
En el campo social, dos organizaciones de segundo nivel se han consolidado elaborando, junto con la comunidad, planes zonales elaborados a través de procesos participativos en los que se logra reunir a organizaciones comunitarias, sectoriales y generacionales. Se ha venido mejorando las condiciones de acceso a los servicios de salud a través del Plan de Atención Básico y la nutrición mediante la creación de comedores infantiles. Además se está prestando atención a la población vulnerable y denunciando los casos de conflictividad vecinal, familiar o escolar. Se han desarrollado 23 proyectos con el Fondo de Desarrollo Comunitario y también se ha diseñado un programa de convivencia, en colaboración con instituciones de cooperación internacional, para abordar la conflictividad social en la zona.
En cuanto a la mejora de las condiciones físicas de habitabilidad: se alcanza un 98% de cobertura con las redes de abastecimiento de agua y alcantarillado; se ha mejorado la accesibilidad del transporte público y privado a las tres zonas del proyecto a través de la creación de nuevos circuitos viales y la pavimentación de las vías locales. Antes de la iniciativa, sólo se conectaban al sistema de transporte un 5% de los barrios, ahora lo hace un 75% y se ha reducido el tiempo de viaje en 30 minutos. Se han construido 3 grandes jardines sociales, 3 escuelas de educación primaria y secundaria con 6.000 plazas, 27 parques de barrio y se han legalizado 22 barriadas.
- 1998 — El Gobierno alemán envía una comisión de evaluación para llevar a cabo un estudio de viabilidad, concediendo al proyecto 9,9 millones de marcos alemanes.
- 1999 — A principios de año empieza el proceso de consolidación de los equipos de trabajo y a mediados la ejecución de las compensaciones a los distritos.
- Enero de 2001 — Comienza la cooperación formal del Gobierno alemán.
- Julio de 2002 — El Kreditanstalt Für Wiederaufbau (KfW) [Instituto de Crédito para la Reconstrucción] aumenta el presupuesto del proyecto en 4.100 millones de pesos.
- Diciembre de 2002 — Se aprueba, a través de la Unidad de Gestión del Proyecto SUR, el programa de coexistencia previsto para el período 2003-2007.
- Febrero de 2004 — El Proyecto SUR se institucionaliza como Caja de Vivienda Popular (CVP) con la decisión de aprovechar el enfoque y la metodología usados para el desarrollo del Programa de Mejora Integral de Infraviviendas, alcanzando uno de los objetivos fundamentales del proyecto.
Las condiciones preexistentes en el área de intervención eran: bajos niveles de participación, planificación y organización comunitaria; escaso reconocimiento a la labor de las mujeres en los procesos de desarrollo de los barrios; muy poca presencia institucional, distrital y local; 41 barrios de origen ilegal con predominio del estrato socioeconómico 1, el más bajo en la calificación dada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) de Colombia. En la zona viven 85.000 habitantes en 15.580 hogares con pocos recursos. Una población vulnerable en cuanto a sanidad, desnutrición, desempleo... con altos niveles de conflictividad social que se expresa en violencia familiar, abusos sexuales, mal manejo de las relaciones vecinales y con unas condiciones precarias de habitabilidad en cuanto a espacios y servicios públicos, infraestructura comunitaria, accesibilidad, vivienda y uso indebido de los recursos ambientales.
La puesta en práctica del proyecto está a cargo de la Unidad de Gestión adscrita a la CVP. Ésta cumple las funciones principales de coordinar a las distintas instituciones, el desarrollo de instrumentos y procesos relacionados con la planificación participativa y la organización de la comunidad, la gestión y el seguimiento de las inversiones de los recursos financieros, las contapartidas locales y la cooperación internacional, así como el control y la supervisión del proyecto.
Para la definición de las estrategias se realizó una labor conjunta entre la población de las zonas implicadas y un equipo de trabajo compuesto por representantes de entidades de ámbito distrital y consultores internacionales financiados por el KfW. En este proceso participaron la Coordinación de la Conserjería Presidencial para el Desarrollo Territorial y de Santa Fé de Bogotá, el Departamento Administrativo de Acción Comunal Distrital (DAACD), el Departamento Administrativo de Bienestar Social (DABS), el Departamento Administrativo de Planeación Distrital (DAPD), la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) y la consultoría alemana Settlements and Urban Management (SUM).
Desarrollar procesos sostenibles de mejora de la calidad de vida, partiendo de las comunidades de zonas seleccionadas, aledañas al Parque Entrenubes, mediante acciones coordinadas e integrales que faciliten el desarrollo de las infraestructuras de servicios públicos, sociales y comunitarios y el fortalecimiento de la capacidad de organización y autogestión de las comunidades y de los agentes públicos y privados de la localidad.
El seguimiento de los procesos de diseño, ejecución y sostenibilidad de las obras llevadas a cabo por las entidades participantes en el proyecto, como forma de garantizar la mejora y la ampliación de la cobertura de la infraestructura de servicios públicos, sociales y comunitarios de las zonas de intervención.
La dinamización y mayor fortaleza de los procesos de organización y participación comunitaria, propiciando espacios participativos para el planeamiento, el diseño y el desarrollo de programas y obras que garantizan la apropiación y sostenibilidad de estos procesos y de las propias obras físicas.
El fortalecimiento de los procesos institucionales apoyándose en los instrumentos de planificación, coordinación, comunicación y control de los procesos de gestión de las diversas entidades, tanto públicas como privadas, tanto en el ámbito del municipio como del distrito.
- La idea nace en 1997 de una propuesta del DAPD y de la EAAB. Con el propósito de comenzar acciones de mejora de las condiciones de habitabilidad se ponen en contacto con la Conserjería Presidencial para el Desarrollo Territorial de Santa Fé de Bogotá y estudian la posibilidad de buscar cooperación internacional. Se firman los primeros convenios de cooperación entre entidades a nivel de distrito, negociándose los recursos a invertir en el proyecto.
- Entre enero y junio de 1998 se lleva a cabo la formulación del proyecto y el estudio de viabilidad del mismo, creandose instrumentos para la gestión conjunta entre distintas instituciones. Se define la propuesta de intervención y el punto de partida de la cooperación con el gobierno alemán.
- Se determinan, conjuntamente con las entidades del distrito, la preinversión, la conceptualización del proyecto y la administración de las primeras compensaciones, estructurándose la Unidad de Gestión del proyecto.
- En 1999 empieza la puesta en práctica con recursos propios del distrito (80%) y aportaciones del gobierno alemán (20%).
- El diseño de la propuesta requirió del esfuerzo de las entidades participantes: una visita de representantes del KfW a Colombia y otro del DAACD, dentro de su Programa de Desmarginalización, a Medellín a conocer el Programa Integral de Mejoramiento de Barrios Informales (PRIMED) e intercambiar conocimientos, experiencias, metodologías y aspectos técnicos que enriquecieron la propuesta.
- Las organizaciones que han contribuido con más recursos son: IDU, SED, Departamento Administrativo del Medio Ambiente (DAMA), DAACD, DABS, EAAB, Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), DAPD.
- Como parte de su contribución, la CVP aporta recursos humanos: un director; seis profesionales en las áreas de intervención; cuatro coordinadores en las áreas social, técnica, de planeamiento y financiera. Con esto se forma un equipo de gestión operativo que facilita la cooperación entre instituciones, los procesos de planificación y el fortalecimiento de las organizaciones comunitarias y la contribución técnica para poder llevar a cabo los objetivos del proyecto.
Los principales problemas a los que se enfrenta la puesta en práctica del proyecto son:
- Una baja credibilidad que tienen las instituciones locales y del distrito en las comunidades.
- Conflictos entre organizaciones y dentro de ellas mismas.
- Inseguridad en las zonas de trabajo.
- Un enfoque restringido a nivel de barrio, sin tener en cuenta el contexto de la zona.
- Una gestión comunitaria supeditada al intercambio de favores entre políticos y líderes comunitarios.
- Una baja participación comunitaria.
- Un alto grado de rotación en las distintas entidades ejecutoras.
- Intervenciones sectoriales que dispersan la definición conceptual y las acciones institucionales sobre los diversos grupos de población.
Algunos se han solucionado estableciendo, conjuntamente con las organizaciones y líderes comunitarios participantes, un enfoque y un perfil del ámbito de actuación más allá de los intereses de cada barrio. La baja credibilidad de las organizaciones se ha mejorado con una comunicación cercana y recíproca con la comunidad, con una planificación de los compromisos adquiridos y metodologías de trabajo grupal, las cuales han permitido el cumplimiento de casi el 100% de los mismos.
El clientelismo imperante se ha reconducido proponiendo un tipo de comunidad con una gestión colectiva planificada a través de figuras como los planes zonales, en los que se reconocen y priorizan las necesidades locales. Las decisiones se toman de acuerdo con la comunidad y con el apoyo de las organizaciones presentes en el proyecto. A su vez, los líderes políticos pueden redirigir su esfuerzo contribuyendo con su conocimiento acerca de los procedimientos y mecanismos institucionales.
La gente ha participado en la toma de decisiones a través del plan zonal, desarrollado de manera colectiva y consistente en una serie de procesos de diagnóstico, formulación de propuestas, gestión, seguimiento y evaluación. Los participantes contribuyen con su visión y conocimiento del territorio y los problemas de la población, económicos, ambientales, culturales y políticos. Además, se comprometen en programas, proyectos, trabajos y/o actividades. Participando en pequeños proyectos del Fondo de Desarrollo Comunitario, se les ha ofrecido formación en una serie de instrumentos para ser capaces de supervisar, controlar y movilizar los recursos públicos.
Entre los métodos y herramientas usadas están el Método Zoop, técnicas de visualización, talleres de planificación y resolución de conflictos, visitas con la comunidad, registros fotográficos, exposiciones y debates sobre los diseños propuestos...
El Proyecto SUR es un modelo de gestión de desarrollo integral que ha revisado algunos conceptos preestablecidos y que se ha construido colectivamente entre las organizaciones participantes y la población local. En su intervención han establecido métodos de evaluación y de ajuste de criterios, objetivos, estrategias, metodologías, procedimientos e instrumentos específicos. Se han establecido las líneas de intervención contando con los agentes institucionales y comunitarios, a partir de un análisis de los problemas y de las potencialidades, lo cual ha permitido el establecimiento de consensos y la definición de los compromisos y responsabilidades de todos los agentes implicados, tanto públicos como privados. Lo arriba mencionado se ha traducido en decisiones reconocidas, incorporadas en la práctica cotidiana de las organizaciones y comunidades, y en planes negociados y ejecutados de manera conjunta, materializados en el reconocimiento de espacios directamente relacionados con el trabajo administrativo, social y político.
Desde el punto de vista de la puesta en práctica del proyecto, hay una constante en la estrategia de trabajo: el papel mediador de la Unidad de Gestión para hacer frente a los constantes conflictos entre la comunidad y los contratistas encargados de llevar a cabo las obras que ha permitido que el proyecto se desarrolle de una manera efectiva.
Desde el punto de vista político, se produjeron retrasos debido a los cambios en la administración del distrito. La nueva administración y sus funcionarios tenían que conocer el proyecto, sus metas y objetivos para apoyar su ejecución.
Se han mejorado las condiciones de vida de 15.580 familias en condiciones de pobreza, incluidos todos los sectores de la población.
Su calidad de vida se ha mejorado gracias a las obras en la infraestructura básica, incidiendo positivamente en la accesibilidad, mejorando la movilidad y competitividad económica a tavés de una conexión eficaz con otras localidades y zonas de la ciudad. El 75 % de los barrios están ahora conectados al sistema de transporte, frente al 5% de 1998, reduciéndose en 30 minutos el tiempo de desplazamiento al centro de la ciudad.
Se ha aumentado el acceso al agua potable y al saneamiento básico, del 28% de las familias en 1998 al 98% en 2004. La ampliación de la cobertura del Sistema de Identificación y Clasificación de Posibles Beneficiarios de Programas Sociales (Sisbén) y del Plan de Atención Básica en Salud, han mejorado las condiciones sanitarias y ha disminuido los efectos de las enfermedades intestinales y respiratorias.
En educación, la cobertura ha crecido un 15% con 6.000 nuevas plazas de educación básica y media (del 28% en 1998 al 43% en 2004), en 3 colegios nuevos, 4 ampliados y 3 nuevos jardines sociales.
Las zonas recreativas son ahora un 92% más grandes gracias a la construcción de nuevos parques y a la mejora de las zonas verdes y naturales existentes.
La productividad ha contado con la capacitación en economía solidaria, la formación en diversos oficios y la gestión para su consolidación de 8 empresas asociativas. Se ha generado empleo temporal para 670 personas en las obras de construcción, se han desarrollado las capacidades de las comunidades, renovando sus liderazgos y mejorando sus niveles de autoestima. De un 0% de jóvenes y un 10% de mujeres participantes en 1998, se ha pasado a un 25% y un 65% respectivamente.
Han nacido 18 nuevas organizaciones que han terminado por incidir de manera efectiva en los procesos de planificación local, formulándose 158 proyectos gestionados por los líderes comunitarios. Se ha sensibilizado y formado en la gestión de conflictos a 6.329 personas. Además se ha trabajado en la prevención de la violencia familiar a través de procesos de mediación comunitaria, gestión de conflictos escolares, iniciativas como fútbol para la paz, procesos de perdón y reconciliación (en los cuales se registra una disminución del 25% en el sentimiento de venganza, según una investigación de 2004 de la Universidad de los Andes)...
En 1998, había escasa presencia institucional y falta de coordinación entre entidades. Para 2004, gracias a una mejor coordinación entre los distintos agentes, organizaciones e instituciones, se vienen desarrollando acciones de articulación para el logro de los objetivos. Con este fin se realizan periódicamente reuniones técnicas, sociales, de los alcaldes... con el fin de evaluar, reajustar y concertar acciones en el marco del proyecto.
Hay cambios en las conductas y actitudes de la población y en los roles de mujeres y hombres. Se ha avanzado en la construcción de capital social para abordar los problemas de la zona a partir de la solidaridad generada por los procesos de planificación participativa; formación en control social, formulación, seguimiento y evaluación de proyectos; surgimiento de nuevos liderazgos; promoción de proyectos de convivencia; conformación de redes de organizaciones, empresas participativas y cooperativas surgidas en iniciativas comunitarias. Estos procesos han desarrollado liderazgos en grupos de mujeres y jóvenes, los cuales tradicionalmente no se implicaban en procesos comunitarios. Las comunidades muestran hoy una mayor capacidad de gestión y de liderazgo, desarrollando experiencias en convivencia, medio ambiente y género. Se ha producido un incremento de la participación de los líderes en los procesos de desarrollo local y también ha mejorado su capacidad analítica y propositiva, superando la fase de mera respuesta a las iniciativas institucionales.
Se siguieron ciertas directrices de gestión y control de los recursos internacionales y en el diseño y puesta en práctica del Fondo de Disposición. La construcción colectiva empieza en los procesos de planificación participativa y ha permitido tejer una red social que reúne distintos niveles de toma de decisiones y de intervención en las acciones del proyecto. Esto se traduce en compromisos económicos y financieros entre las distintas entidades participantes así como en la constribución de las organizaciones sociales. El Proyecto SUR ha sido la base para la puesta en marcha de un Programa de Mejora Integral de las condiciones de habitabilidad de cerca de un millón de personas así como de la creación de programas para el Plan de Ordenación Territorial y el Plan de Desarrollo Urbano, como formas de intervención pública y participación ciudadana.
La búsqueda de la igualdad de género, la inclusión social y la movilidad económica y social han propiciado procesos de autogobierno, liderazgos y asociaciones con grupos de mujeres, lo que ha derivado en una mayor capacidad de la comunidad para participar en los procesos de planificación a escala del municipio y del distrito.
La institucionalización del Proyecto SUR con Bogotá, a través de la CVP, ha conseguido trascender los planes de desarrollo del distrito (Acuerdo Municipal 119 de 2004) y la sucesión de tres gobiernos municipales. Finalmente el Plan de Ordenación Territorial del Distrito (POT) (ordenanzas 619 de 2000, 469 de 2003 y 190 de 2004) ha generado, a partir de la zona que sirvió de modelo para el CPV, el tratamiento integral de otras 26 zonas de la ciudad adoptando el modelo del Proyecto SUR para asistir a estas áreas de condiciones similares.
La protección del área del Parque Entrenubes y el freno de los asentamientos ilegales es un objetivo prioritario de la Administración del distrito.
En cuanto a la reducción de la dependencia en recursos no renovables y cambios en los patrones de producción, consumo y tecnología, se han desarrollado procesos de concienciación para permitir la consolidación del Parque Entrenubes, pulmón y sustento hídrico de la zona, comenzando por la coordinación institucional, aspecto que actualmente tiene cierta continuidad. Por otra parte, con la definición consensuada de los límites del parque se ha fortalecido la conciencia acerca de los problemas de contaminación ambiental, erosión, explotación de canteras y ocupación ilegal de zonas protegidas y de reserva.
Se han generado procesos de interiorización de valores, orientados a través del refuerzo de la identidad territorial y cultural, la formación artística y la coexistencia pacífica con altos niveles de autogestión y continuidad por sí mismos. Esto se refleja especialmente tras el desarrollo de proyectos con recursos del Fondo de Desarrollo Comunitario, en el que los jóvenes han tenido un papel protagonista.
El Proyecto SUR con Bogotá considera importantes el reconocimiento y la validez de las formas de planificación, gestión y control llevadas a cabo anteriormente en el marco de la mejora de las condiciones de vida de la población que vive en barrios de origen ilegal, por esto se retomaron experiencias como:
- La llevada a cabo en Tintal por la DAPD para desarrollar, con la participación de la comunidad, un plan de mejora integral de la zona.
- La metodología de la EAAB para realizar obras de alcantarillado y agua corriente con la participación de la población.
- El programa Obras con Balance Pedagógico del DAACD en el que varias comunidades compiten por unos recursos, enseñandoles a priorizar. ejecutar y administrar las obras.
- El programa PRIMED en Medellín, en particular el concepto de la participación de una comunidad como agente activo del planeamiento y el establecimiento de oficinas de área para la búsqueda y puesta en práctica de soluciones técnicas apropiadas.
- Las experiencias de las ONG en la gestión de subsidios de vivienda y en la mejora de las viviendas.
Durante todo el proceso de ejecución del proyecto, estas experiencias previas han variado y se han articulado con las nuevas realidades de la ciudad y las áreas de intervención, resultando en una metodología sui generis que por su importancia y logros obtenidos se ha empezado a transferir al Programa de Mejora Integral de Barrios. La base de la metodología está basada en la participación ciudadana, junto con la presencia de instituciones municipales y del distrito y una coordinación basada en los compromisos dirigidos por la Unidad de Gestión del Proyecto SUR, en cada una de las siguientes estrategias:
- Una forma de intervención compartida por diferentes agentes públicos y privados, a nivel local, municipal, nacional e internacional.
- Una estructura operativa basada en la planificación y que implica procesos territoriales de desarrollo económico y social así como de planificación estratégica, con la participación de aquellos implicados en el proceso.
- La permanencia y garantía de continuidad en el tiempo de los procesos sociales y el buen uso y mantenimiento de las infraestrucutras mejoradas y de nueva construcción. Todo esto creando una mayor confianza entre la población local hacia la administración pública.
- Un seguimiento permanente de las acciones y procesos para que el impacto de las medidas adoptadas pueda ser evaluado, reajustado e intensificado cuando sea preciso.
- Una mejora de las condiciones de habitabilidad en las zonas de actuación del proyecto.
- La inclusión de la metodología de trabajo en la ordenanza de adaptación del Plan de Ordenamiento Territorial - POT 469 de 2003
El Proyecto SUR con Bogotá cuenta con el apoyo de un acuerdo internacional de cooperación entre la alcaldía de Bogotá y el gobierno alemán, gestionado a través del KfW y por valor de 9.900.000 de marcos alemanes. Posteriormente, el 29 de diciembre de 2000, se firmó un convenio independiente entre los mismos organismos que incluye la concepción del proyecto, creándose un Fondo de Desarrollo Comunitario. La ordenanza municipal 124 de 9 de abril de 2002 designa a la CVP como coordinadora del proyecto. Finalmente, el proyecto ha quedado incorporado tanto en el Plan de Ordenación Territorial del Distrito como en los últimos Planes de Desarrollo de Bogotá que han tenido como constante las políticas de mejora de barrios.
La administración del distrito ha decidido otorgar a la Unidad de Gestión del Proyecto SUR con Bogotá la coordinación de las acciones en toda la ciudad, para que, a partir de su experiencia, se realice una evaluación de los procesos llevados a cabo en toda la ciudad y se planifiquen las acciones necesarias, partiendo de las directrices metodológicas que inspiraron la forma de intervención del proyecto y que son transferibles y adaptables a otros contextos. Estas directrices incluyen:
- Los criterios para la definición de las zonas a intervenir, la ejecución y planeamiento integrales, la gestión territorial y a construcción social e institucional del territorio.
- La definición de las fases de intervención, de acuerdo con un presupuesto real de inversiones y estableciendo objetivos alcanzables.
- La realización de un trabajo previo de caracterización socioeconómica, física, e institucional de las zonas de trabajo.
- La identificación del perfil productivo de los grupos de población.
- El desarrollo del proceso de planificación participativa, metodología que ha sido asuminda por otras entidades como la Secretaría de Salud en los diagnósticos participativos.
- El diseño y puesta en práctica de una estrategia de comunicación multidireccional entre todos los agentes y los niveles de actuación, empezando por los compromisos y su desarrollo, así como la motivación a la población para participar y organizar la administración del área.
- La definición de una estructura y la gestión de estrategias interinstitucionales y de participación comunitaria, empezando por la presencia directa de expertos de las áreas técnicas y sociales en las zonas de intervención, institucionalizando puntos de información. espacios de encuentro frecuentes y motivando directamente a las comunidades a participar y organizar la gestión de los intereses locales.
- El diseño y la puesta en práctica de un Sistema Único de Control e Impacto de la coexistencia cívica.
- El diseño, gestión y funcionamiento de un Programa de Coexistencia centrado en la construcción de mejoras formas de relación entre los actores sociales que dan forma al territorio, buscando una mejor coexistencia y acondicionamiento del espacio público a tal propósito.
El Programa de Mejora Integral de Barrios retoma del Proyecto SUR la metodología de intervención en el conjunto de sus estrategias y componentes, empezando por:
- La definición de acuerdos de cooperación interinstitucional.
- La composición y los profesionales de la Unidad de Gestión. Dirección, áreas técnicas, sociales, de planificación y coordinación administrativa y financiera, equipos de trabajo locales y con el apoyo de expertos de las diversas áreas.
- El enfoque y las técnicas de planificación y participación y las estrategias de asociación y representación ciudadanas.
- La presencia permanente y cercana en las zonas de actuación a favor del proyecto, empezando por los puntos de información.
- Los mecanismos de coordinación interinstitucional, a través de comités sociales, técnicos e institucionales a nivel municipal y de distrito. En ellos, los compromisos y estrategias de intervención son controlados, evaluados y ajustados.
- Las formas de planificar, gestionar, informar, controlar y evaluar.
- La promoción de maneras asociativas para mejorar la producción y los ingresos.
Año | Gobierno Central | Gobierno Local | KfW | Comunidad |
1998-1999 | 10.590 | 940 | 0 | 707 |
2000 | 4.783 | 388 | 0 | 32 |
2001 | 4.767 | 186 | 104 | 52 |
2002 | 4.218 | 150 | 2.112 | 79 |
2003 | 6.288 | 51 | 2.023 | 187 |
2004 | 1.255 | 0 | 1.214 | 164 |
2005 | 320 | 0 | 19 | 4 |
Presupuesto Total (en miles de dólares EEUU) | 32.221 | 1.715 | 5.472 | 1.225 |
% del presupuesto | 78% | 4% | 15% | 3% |