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Plan de Recuperación Ecológica y Ambiental de la Cuenca del Río Rimac (Lima, Perú)

Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 2006, y catalogada como GOOD. (Best Practices Database)
País/Estado — Perú
Región según Naciones Unidas — América Latina
Región ecológica — ribera (cuenca hidrográfica)
Ámbito de la actuación — regional (internacional)
Agentes — gobierno central; gobierno regional; gobierno local; sector privado; institución académica o de investigación; medios de comunicación.

Categorías — Gestión ambiental: reducción de la contaminación; tecnología ambientalmente responsable; restauración ambiental; higiene ambiental; sostenibilidad ecológica; incentivos para una gestión responsable; gestión de recursos; evaluación, seguimiento y control integrados; contabilidad ecológica; indicadores de sostenibilidad. Agua y saneamiento: gestión del suministro y la demanda de agua; saneamiento ecológico; acuerdos de colaboración pública, privada y comunitaria.


Contacto Principal

Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Perú (SEDAPAL) — gobierno central
D. Carlos Silvestri Somontes
Sede principal de Sedapal
Autopista Ramiro Prialé n. 210,
El Agustino,
Perú.

Centro de atención telefónica AQUAFONO.
Tel: 317 - 80 00 
Atención las 24 horas del día, todos los días del año.
E-mail: sedanet@sedapal.com.pe
Web: http://www.sedapal.com.pe


Resumen

Ofrecer un servicio de confianza y salvaguardar el medio ambiente deben ser las principales prioridades de cualquier compañía u organismo encargado del servicio de suministro del agua potable o de la gestión de las redes de saneamiento público. En otras palabras, el cometido que tienen estas empresas consiste fundamentalmente en garantizar la salud pública de la población y el buen estado del medio ambiente. De esta manera, los ciudadanos confían una doble tarea a estas compañías. Por un lado, esperan recibir de ellas el servicio de abastecimiento de agua potable con un nivel de calidad bueno, y por otro, les encomiendan la responsabilidad de llevar a cabo los tratamientos necesarios de las aguas residuales antes devolverlas otra vez a su cauce natural. Por consiguiente, no sólo es necesario que todo el caudal del agua que se destine al consumo humano pase antes por una serie de de plantas de potabilización, sino que es imperativo que este agua, que proviene de los cursos naturales de los ríos, llegue a las plantas de potabilización con unas condiciones de calidad suficientes, es decir, sin una contaminación previa excesiva. El cumplimiento de estas condiciones es la única manera de proceder que permite ofrecer un buen servicio a las comunidades y que garantiza que los estándares internacionales se cumplan.

En el texto de esta buena práctica se resumen el esfuerzo y los resultados que se han obtenido con el Plan de Recuperación Ecológica y Paisajística de la Reserva Natural del Río Rimac. El ingeniero Carlos Alberto Silvestri Somontes, que ha sido el presidente de Empresa Estatal del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Perú (SEDAPAL), se ha encargado de la concepción, la promoción y la dirección de la ejecución del mencionado plan de recuperación. La finalidad de este plan ha consistido en la regeneración de las características ecológicas originales de la cuenca del río Rimac. Con ello, se ha pretendido convertir la zona en un lugar saludable para el ocio al aire libre y se han promovido las actividades de contacto con la naturaleza. Esto ha contribuido a mejorar la calidad de vida de la población. Además, este plan se ha desarrollado gracias al esfuerzo colectivo de los diversos agentes y comunidades, lo cual ha aportado el beneficio adicional que representa la creación de la Reserva Ecológica y Ambiental del Río Rimac. El gobierno central de Perú ha reconocido legalmente esta reserva y el Instituto Nacional de Recursos Naturales de Perú (INRENA) la ha amparado dentro de sus responsabilidades desde 1998. (http://www.inrena.gob.pe).

Fechas Clave

Descripción

Las fuentes de agua potable de Lima

Las fuentes de las que se abastecen las plantas de potabilización que suministran el agua a la ciudad de Lima, que es la capital de Perú, son tres:

  1. El agua del río Rimac que discurre por la superficie supone el 55% del caudal que consume la ciudad. El suministro se realiza desde la planta de potabilización de agua denominada La Atarjea.
  2. El agua que discurre bajo el nivel freático en la cuenca del río Ricac supone el 40% del caudal que consumen las ciudades de Lima y Callao, siendo esta última el principal puerto marítimo de Perú. La extracción del agua se realiza mediante el bombeo en unos trescientos pozos.
  3. El agua que se obtiene de la cuenca del río Chillón supone el restante 5% del caudal que consume la ciudad de Lima.

En resumen, en la estación húmeda, para poder reunir el caudal de agua que la ciudad de Lima demanda es necesario emplear todos los recursos hídricos que circulan en superficie por la cuenca de dos ríos cercanos a la ciudad. Adicionalmente, durante la estación seca, también es necesario explotar un conjunto de pozos en una de las cuencas.

El río Rimac nace en los Andes peruanos a unos 4.300 metros de altitud sobre el nivel del mar, fluye hacia el océano Pacífico y desemboca en la ciudad de Callao. Se caracteriza por tener un cauce de unos 134 kilómetros de longitud que atraviesa un estrecho valle durante su recorrido. A lo largo de este valle, se concentran las actividades industriales y productivas más importantes de la ciudad de Lima, que es la capital de Perú. Este río constituye la mayor fuente de agua dulce natural con la que cuenta la región metropolitana de Lima. Sin embargo, en la actualidad, se encuentra con unos niveles de contaminación muy elevados. La principal causa de esta contaminación es la concentración en el agua de partículas sólidas densas que provienen de los vertidos de las redes de saneamiento de los cascos urbanos, de las instalaciones agrícolas, de las áreas industriales, de las explotaciones mineras y de las plantas metalúrgicas. Además, el río también sufre una serie de vertidos incontrolados de residuos sólidos urbanos y de escombros procedentes de movimientos de tierras. Otra característica que denota el estado de degradación que presentan las riberas de la cuenca del río Rimac es la existencia de varios asentamientos humanos ilegales compuestos por viviendas precarias. Las riberas también adolecen de la implantación demasiado cercana al cauce de, entre otras instalaciones, fábricas, áreas de almacenamiento ilegales, vertederos no controlados, chatarrerías y explotaciones dedicadas a la ganadería porcina, equina y avícola. Todas estas instalaciones han ido invadiendo poco a poco el cauce original del río. De este modo, la ribera se ha convertido en un almacén de residuos y también, en lugar de residencia para delincuentes y ladrones.

Varios estudios recientes han contabilizado hasta 175 vertidos de aguas residuales sin tratar a lo largo del cauce del río Rimac. En el curso alto del río, la contaminación proviene principalmente de los vertidos que las explotaciones mineras realizan. Éstas dispersan sus desechos y evacúan unas cantidades significativas de aguas ácidas y de aguas procedentes del drenaje del terreno en el propio río, lo cual se traduce en una concentración de partículas sólidas y de metales tóxicos en la corriente desde su nacimiento. En el curso medio e inferior, los principales agentes contaminantes tienen un origen agrícola, urbano e industrial. Además, estos tres sectores de actividad mencionados se apoderan de una parte importante del caudal que transporta el río para emplearla en el desarrollo de sus actividades productivas durante todo el año. Cabe destacar también el gasto de al menos unos cinco metros cúbicos por segundo del caudal del río para el riego de los parques y jardines municipales de la ciudad de Lima. (Véanse las fotos 1, 2, 3 y 4 en el anejo).

Una aproximación al Plan de Recuperación

Desde mediados del siglo pasado, la ciudad de Lima ha experimentado un ritmo de crecimiento urbano rápido asociado a una explosión demográfica de su población. Ésta se ha debido, por un lado, a una elevada tasa de natalidad, y por otro, a la migración de una parte de la población del campo a la ciudad. Como consecuencia de este rápido crecimiento, se ha producido una expansión urbana desordenada, sin planificación previa y sin control. De este modo, han aparecido nuevos barrios de viviendas precarias en los bordes del tejido urbano de la ciudad, e incluso, recientemente, también se han construido edificaciones precarias en altura.

La ciudad de Lima, que está emplazada en la árida costa central de Perú, cuenta en la actualidad con una población que ronda los ocho millones de habitantes. El río Rimac, cuyo caudal representa solamente el 2% de los recursos hídricos dulces del país, atraviesa la región metropolitana de esta ciudad. Paradójicamente, este pequeño porcentaje del caudal nacional con el que cuenta el río supone el 50% del consumo de recursos hídricos por parte de toda la población de Perú, que asciende a 14 millones de habitantes. Este fenómeno se explica por el hecho de que la mayor parte de la población del país se encuentra concentrada en esta franja costera.

En la actualidad, la ciudad de Lima está creciendo en los siguientes frentes:

Las previsiones demográficas pronostican que Lima contará con una población que rondará los doce millones de habitantes en el año 2025. Una población de esta magnitud requerirá un caudal de abastecimiento de agua de unos 41,3 metros cúbicos por segundo. Conseguir semejante caudal de agua va a suponer un reto para el desarrollo del país si se tiene en cuenta que, en la actualidad, el caudal que se acumula anualmente en las reservas de la ciudad sólo asciende a aproximadamente unos 630 millones de metros cúbicos, es decir, unos 20 metros cúbicos por segundo. Hoy en día, esta cantidad sólo permite que SEDAPAL, la compañía gestora del agua, proporcione el servicio de suministro de agua al 89% de la población. De esto se puede deducir el hecho de que, a día de hoy, dos millones de personas no tengan acceso al agua potable en la ciudad de Lima, o que sólo lo tengan parcialmente mediante un servicio restringido a unas pocas horas del día.

La fuente de agua adicional que supone la cuenca del río Chillón abastece parcialmente la demanda de la parte norte de la ciudad de Lima. El caudal obtenido de este río asciende a aproximadamente un metro cúbico por segundo de media anual.

Las reservas de agua natural con que cuenta Lima se almacenan en una serie de lagunas y de pantanos que tienen una capacidad de 282 millones de metros cúbicos. Este volumen de reserva no cubre la demanda anual de la ciudad. Por ello, y porque en la actualidad los años de sequía están siendo más frecuentes que en las últimas dos décadas, es necesario que, al menos, se duplique el volumen de almacenamiento de los pantanos. Otro fenómeno destacable es el incremento del deshielo en las cumbres de los Andes, donde nace el río Rimac. Durante los últimos veinte años, se ha registrado una pérdida del 40% de las nieves perennes debido al cambio climático. Por consiguiente, se deben tomar una serie de medidas que eviten que este caudal de agua adicional se pierda a lo largo del cauce del río. Por último, también es necesario que se emprendan proyectos destinados a mantener la calidad del agua del río para reducir el riesgo de que la población que toma el agua directamente del cauce contraiga enfermedades contagiosas.

Hace medio siglo, especies animales como las truchas y los langostinos vivían en las aguas del río Rimac. Hoy en día, éstas han desaparecido prácticamente. Además, los ecosistemas correspondientes que se sucedían a lo largo de la ribera del río se han visto también degradados. En este sentido, las extensiones dedicadas a la agricultura se han reducido a un quinto la superficie que solían tener. En la actualidad, ya sólo quedan 5.000 hectáreas agrícolas en activo y se ha experimentado un crecimiento agresivo de la población y una proliferación incontrolada de la industria. Sin lugar a dudas, esta serie de hechos ha afectado negativamente a la biodiversidad de los ecosistemas de la cuenca del río en todos sus aspectos.

El primer director del Plan de Recuperación Ecológica y Ambiental de la Cuenca del Río Rimac fue el ingeniero Carlos Silvestri Somontes. Él se encargó del proyecto entre los años 1995 y 2000, período durante el cual también fue el presidente de SEDAPAL, que es la Empresa Estatal del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Perú y que, por tanto, gestiona estos servicios en las ciudades de Lima y Callao. Él, personalmente, lideró, creó y controló el desarrollo de la ejecución del plan que aquí se presenta. El objetivo principal del plan ha consistido desde el principio en la recuperación y en la protección del cauce del río Rimac y del medio ambiente de su cuenca. Inicialmente, la primera fase del plan abarcó un tramo de 28 kilómetros de longitud entre el puente de Huascar en la ciudad de Lima y el puente de Huampaní en la ciudad de Chosica. A día de hoy, se ha realizado el 30% de la inversión que se tiene previsto llevar a cabo para la ejecución del plan.

Siendo el agua un recurso natural limitado en la región de Lima, el abastecimiento de agua potable a la población en la estación seca se convierte en una empresa especialmente difícil. Esto se agrava por el hecho de que el agua que lleva el río Rimac se encuentra altamente contaminada. Se han llevado a cabo una serie de proyectos dentro del Plan de Recuperación Ecológica y Ambiental de la Cuenca del Río Rimac para mejorar las condiciones de vida de toda la población en general y, en particular, de aquélla que vive en las riberas del río entre el puente de Huánuco, la toma de agua y la estación hidroeléctrica de Huampaní. Estos proyectos han pretendido preservar la calidad del agua del río y a proteger las áreas circundantes a las riberas del mismo. Los resultados que se han obtenido con el plan se exponen más adelante en este documento.

La Reserva Ecológica y Paisajística del Río Rimac

La Reserva Ecológica y Ambiental del Río Rimac surge como resultado del Plan de Desarrollo Estratégico y del Plan de Medio Ambiente que el ingeniero Carlos Silvestri Somontes concibió y dirigió durante seis años consecutivos. Esta iniciativa representa un ejemplo muy significativo de las estrategias que se pueden establecer para empezar a recuperar los recursos naturales degradados de los valles de la costa central y, en general, de toda la costa peruana.

La protección de las riberas y de la áreas circundantes al cauce del río Rimac para mejorar la calidad del agua que llega a la toma de entrada conocida como La Atarjea es el principal objetivo del Plan de Recuperación Ecológica y Ambiental de la Cuenca del Río Rimac. Desde La Atarjea, el agua se canaliza hacia las diversas plantas de potabilización para su posterior distribución entre la población de Lima. No obstante, el mencionado plan tiene otra serie de objetivos que, no por secundarios, son menos importantes. De hecho, esta serie de objetivos son complementarios e imprescindibles para que la vegetación y la fauna de los ecosistemas de la cuenca del río Rimac puedan volver a su estado original. También lo son para que el nivel freático se pueda recuperar y regresar a su cota natural. En relación con este último aspecto, entre otros proyectos, se han construido en el lecho del río una serie de muros de contención de hormigón armado que actúan a modo de cortinas para las corrientes de agua subterráneas. También, se ha creado una nueva serie de lagunas artificiales en diversas áreas cercanas al cauce, que se han recuperado previamente para tal fin.

La flora silvestre, la fauna salvaje y, en general, toda la biodiversidad de los ecosistemas de la Reserva Ecológica y Ambiental del Río Rimac se encuentra amenazada y casi al borde de la extinción como resultado de la intervención humana. A lo largo de toda la cuenca del río Rimac, el hombre ha iniciado una serie de diversas actividades sin valorar previamente su impacto sobre el medio ambiente. Destacan, entre otras, el vertido de escombros procedentes de la minería, los asentamientos humanos, las instalaciones industriales, las plantas agroquímicas, las explotaciones de ganado y el vertido de residuos sólidos urbanos, industriales y de materiales de todo tipo. Además, tanto la cuenca en general como el propio río sufren la descarga sin tratamiento previo de las aguas grises urbanas y del agua caliente procedente de los procesos industriales. Este fenómeno, aparte de contaminar el medio ambiente, erosiona el terreno y provoca corrimientos de tierras. (Véanse las fotos de la 5 a la 10 en el anejo).

Perú es uno de los diez países del mundo que tienen mayor diversidad de recursos naturales. Por ello, preservar la fuente de riqueza que éstos suponen es un planteamiento indispensable para el futuro del país. En este sentido, Perú cuenta con una serie de Áreas Naturales Protegidas dentro de su territorio continental y marítimo. La finalidad de estas áreas es garantizar la buena conservación y la protección de la flora, la fauna y, en general, de todas las características representativas de los ecosistemas que las componen. Todas las áreas protegidas del país forman parte del Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (SINANPE) (http://www.areasprotegidasperu.com/sinanpe.htm). El SINANPE se creó a raíz del Decreto de la Corte Suprema 010.99.AG y sus actividades están reguladas por la ley.

Los siguientes sectores constituyen en su conjunto el SINANPE:

  1. Las unidades físicas. Compuestas por el conjunto de áreas naturales protegidas. Las áreas protegidas se dividen en diferentes categorías. En el caso del área conocida como Reserva Ecológica y Ambiental del Río Rimac, la categoría corresponde a humedales.
  2. Los agentes sociales. Compuestos por los diversos agentes implicados y por la propia sociedad civil. Entre estos agentes se encuentran las personas encargadas de las labores de organización y de gestión, los propietarios privados, algunas empresas privadas, diversas instituciones públicas y privadas que desarrollan su actividad en el ámbito de las áreas naturales protegidas y la administración pública, que también participa en el desarrollo de estas áreas.
  3. El soporte legal. Compuesto por el conjunto de normativas generales y específicas destinadas a proteger el patrimonio natural y a regular el empleo de sus recursos. Además, el soporte legal, entre otras funciones, también fomenta la participación de la sociedad civil local, nacional e internacional y establece un rango de sanciones para evitar que se violen las normas.
  4. Los elementos de interacción. Compuestos por los medios de comunicación y por los medios de coordinación entre los diversos agentes y sectores.

El Instituto Nacional de Recursos Naturales de Perú (INRENA) (http://www.inrena.gob.pe) es un organismo público que depende del Ministerio de Agricultura del gobierno central. Su creación se promulgó en el Decreto Legislativo número 25.902. El INRENA es la entidad encargada de patrocinar y gestionar el SINANPE. Además, también tiene como función velar por el correcto uso, gestión y mantenimiento de los recursos naturales renovables del país, así como de los entornos ecológicos donde éstos se encuentran emplazados.

El artículo 22 de la Ley número 26.834 establece que todas las reservas paisajísticas del país pasan a formar parte del Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado conocido por las siglas SINANPE. De esta manera, estas áreas de interés ambiental quedan protegidas y bajo el control de un organismo que vela por el desarrollo armónico de las actividades humanas dentro de la naturaleza. La clasificación de estos territorios dentro de las áreas naturales protegidas garantiza la aplicación de una serie de importantes medidas de seguridad naturales, estéticas y culturales.

El Decreto de la Corte Suprema número 023-98-AG del 24 de diciembre de 1998 aprueba la creación del Área de Protección del Río Rimac. El artículo 4 del mencionado decreto promulga la formación de una comisión técnica multisectorial para la elaboración del estudio de delimitación y categorización de este área natural protegida. En esta línea, SEDAPAL solicita el 27 de marzo de 2000 la categorización final de este área de protección bajo la denominación de Reserva Paisajística del Río Rimac. La solicitud de SEDAPAL también propone la adopción de una serie de estrategias con las que posteriormente se ha elaborado el plan de gestión de esta reserva ambiental.

Como el río Rimac constituye la principal fuente natural de agua dulce de la ciudad de Lima, los primeros beneficiados de la creación de la Reserva Paisajística del Río Rimac son los propios habitantes de toda el área metropolitana de la ciudad. De hecho, la recuperación ecológica de esta área se ha convertido en una de las prioridades más urgentes para la población.

Gracias a la puesta en práctica del plan de recuperación, la población asentada en las zonas limítrofes a la reserva paisajística ha visto como sus condiciones de vida han mejorado. Con anterioridad al plan de recuperación, estas personas vivían de espaldas al río. Esto se debía, entre otros factores, a la inaccesibilidad, a los peligros, a los riesgos para la salud y a la inadecuación para el desarrollo de la vida que el mal estado de toda la cuenca suponía. Por contra, hoy en día, esta población goza de unas viviendas que miran a la reserva paisajística. También, disfruta de las actividades al aire libre, de la naturaleza y del paisaje. Del mismo modo, la fauna y la flora autóctona se han recuperado hasta alcanzar otra vez su plenitud. Adicionalmente, y gracias al cambio, hoy en día es posible organizar actividades deportivas tanto en el río como en las riberas del mismo. Entre otras, destacan los paseos en barca, los descensos en canoa, las acampadas y las actividades aeróbicas como pueden ser el paseo, las carreras o el senderismo.

La formulación de los objetivos de la Reserva Ecológica y Paisajística del Río Rimac

Objetivos generales

Los objetivos generales que se persiguen con la creación de la reserva son siete:

  1. La recuperación de cuatrocientas hectáreas degradadas en la ribera del río Rimac entre el puente de Huascar y el de Los Ángeles.
  2. La adecuación del curso del río en un tramo de 28 kilómetros de longitud para asegurar la circulación de un flujo de caudal suficiente desde el punto de vista ecológico.
  3. El control y la supresión de los elementos que suponen un impacto ambiental negativo para el río.
  4. La garantía de la recuperación y de la conservación de los recursos naturales y paisajísticos.
  5. La promoción de un empleo racional de los recursos naturales.
  6. El fomento de la educación ambiental a través de la oferta de programas educativos.
  7. El estímulo del desarrollo socioeconómico de la población que reside en las inmediaciones del río.

Objetivos específicos

Es posible señalar, con un carácter más específico, diez objetivos más:

  1. La protección tanto de las orillas del río como de las áreas circundantes a ellas desde una perspectiva ecológica.
  2. La recuperación, la salvaguardia y la defensa de las especies vegetales y de la fauna salvaje de la reserva.
  3. La obtención de beneficios mediante la explotación racional y sostenible de los recursos naturales con que cuenta la Reserva Ecológica y Paisajística del Río Rimac.
  4. La rehabilitación de las áreas deforestadas y de las áreas degradadas a través de cualquier otro mecanismo.
  5. El fomento de la protección de todos los bienes y propiedades de interés cultural presentes en la Reserva Ecológica y Paisajística del Río Rimac.
  6. La coordinación de todas las instituciones gubernamentales y de la sociedad civil a la hora de la toma de decisiones, de modo que puedan adoptar estrategias de actuación conjunta más efectivas.
  7. La promoción de actividades de recreo y de educación ambiental enfocadas a la protección y a la mejora del paisaje natural. Con tal fin, se tomarán medidas para animar a las personas vinculadas o cercanas a la reserva a participar directamente en ellas.
  8. La defensa y la difusión de los valores y de la importancia de la Reserva Ecológica y Paisajística del Río Rimac a través de la oferta de educación en temas ambientales.
  9. El fomento de la investigación científica de los recursos naturales de la reserva.
  10. La garantía de recursos hídricos suficientes para abastecer a la población de las ciudades de Lima y Callao.

Las estrategias del Plan de Recuperación

El actual Plan de Recuperación Ecológica y Ambiental de la Cuenca del Río Rimac se fundamenta en los diversos proyectos estratégicos de desarrollo que redactó SEDAPAL en el año 1996. En un primer momento, la implantación del plan se diseñó para tener una duración de 25 años y, posteriormente, en 1999, este plazo se amplió a 30 años. Los responsables de SEDAPAL aprobaron las directrices del plan. Éstas han marcado la orientación de los proyectos que la compañía ha llevado a cabo durante estos años. La mejora de la calidad de vida de los habitantes de la región ha sido la finalidad con la que se han planteado todos estos proyectos. En este sentido, se pueden destacar los siguientes logros:

Entre 1995 y 1999, el lema por el que se rigió el plan de recuperación fue: «Productividad con calidad». En 1999, el lema pasó a ser: <<Productividad con valor>>.

Todo el personal de SEDAPAL ha participado en el desarrollo de este plan. Además, toda una nueva serie de personas emprendedoras también se han involucrado con él. Estos emprendedores se rigen por una filosofía que aboga por la excelencia. Asimismo, representan un nuevo paradigma de iniciativas que apuesta por los valores y por los principios de carácter positivo.

Hay que destacar la labor que otros agentes han desarrollado en colaboración con SEDAPAL. Sin su contribución, el plan no sería hoy una realidad. Entre ellos, se encuentran los contratistas, los proveedores, los fabricantes, las organizaciones de base comunitaria, los ayuntamientos, los medios de comunicación y toda una serie de organizaciones públicas y privadas.

Como apoyo al desarrollo general del plan, se planteó la necesidad de encaminar las diversas actuaciones que se necesitaban acometer hacia la obtención de algunos certificados de calidad. De este modo, se trabajó en la mejora y en la optimización de las siguientes infraestructuras y procesos:

Finalmente, en 1998, se obtuvo el primer certificado de calidad, el ISO 9.002. Posteriormente, en 2002, se obtuvo también el certificado de calidad ISO 14.001.

El desarrollo del Plan de Recuperación

Son varios los proyectos que se han ejecutado con éxito desde 1995 en el marco del plan de recuperación. A día de hoy, la inversión realizada asciende a unos 20 millones de dólares estadounidenses. Esta cantidad representa el 30% de la inversión total de 70 millones de dólares estadounidenses prevista para el desarrollo del plan a lo largo de los 28 kilómetros de ribera en los que se centra la primera fase. Este tramo corresponde con el comprendido entre los puentes de Huascar y de Huampaní.

A continuación, se describen los diferentes proyectos que incluye el plan.

Proyecto de recuperación de los terrenos ocupados ilegalmente a lo largo de las riberas del río Rimac

Con este proyecto se han devuelto al dominio público las áreas ocupadas por el hombre a lo largo de las riberas y de las franjas laterales de protección del río.

Una de las primeras labores que se llevaron a cabo fue el desalojo de las personas que se habían establecido en los márgenes del río a lo largo de los diez kilómetros comprendidos entre la planta de tratamiento de agua conocida como La Atarjea y el puente de Huachipa. Los desalojos comenzaron en 1996 y supusieron el traslado de unas mil personas. De entre ellas, noventa familias recibieron una indemnización económica. El soporte legal que reguló estos desalojos fue el Decreto de las cortes Supremas del 27 de marzo de 1994 que prohibió desde aquel momento los usos urbanos o agrícolas en los suelos clasificados como protegidos en base a su carácter de riberas, ríos, arroyos, lagunas o reservas naturales. Adicionalmente, por medio de una resolución administrativa del Ministerio de Agricultura de Perú, SEDAPAL obtuvo la autorización para llevar a cabo los proyectos de reforestación y protección de 48 hectáreas de terreno en torno a las riberas del río Rimac en el tramo comprendido entre la planta de tratamiento de agua de La Atarjea y el puente de Huachipa.

El proceso de limpieza y desalojo de las riberas tuvo una duración de unos cuatro años. Durante este tiempo, entre otros elementos, se eliminaron los criaderos de ganado porcino, los mataderos, las fábricas de ladrillos, los vertederos y escombreras no controladas, las viviendas ilegales de autoconstrucción, los delincuentes establecidos en la zona y las poblaciones de nutrias. Los trabajos de recuperación consistieron en la reforestación de las riberas y en la construcción de doce senderos peatonales y otros cuatro para tráfico rodado, ambos con miradores en el recorrido. El diseño de estos elementos se realizó desde la disciplina de la arquitectura del paisaje con el objetivo de proporcionar tanto a los habitantes locales como a los turistas la posibilidad de disfrutar del río y de su cuenca. Adicionalmente, también se llevaron a cabo otra serie de trabajos como pueden ser:

Las labores descritas en el párrafo anterior han implicado la devolución al dominio público de 25 hectáreas de terreno que se habían ocupado ilegalmente y la retirada de 250.000 metros cúbicos de escombros a lo largo de los seis primeros kilómetros río arriba desde la planta de depuración de agua conocida como La Atarjea.

Para mejorar el estado de la flora autóctona, se han replantado 50 hectáreas de zonas verdes en los dos márgenes del río. Además, esta nueva vegetación ha contribuido con sus raíces a dar estabilidad al manto rocoso de protección que se ha dispuesto en las orillas y a cohesionar el terreno que conforma el lecho del río. En los trabajos de reforestación, se han empleado especies vegetales autóctonas como el molle, el huaranhuay, la fourcroya, la retama, la tara, el sauce, el palo verde y el eucalipto. Todas ellas han contribuido a la protección del lecho del río y han supuesto en su conjunto la conservación de la biodiversidad del ecosistema. Estas especies se caracterizan por sus sistemas radiculares densos y profundos y por su buena adaptación a los terrenos conformados por arenas y gravas.

La superficie total que se ha reforestado entre los puentes de Huascar y de Huampaní asciende a 395 hectáreas. (Véanse las fotos de la 11 a la 18).

Según la ribera de la que se trate, el proyecto de reforestación se puede desglosar en dos actuaciones diferentes:

Proyecto de actuación bajo el lecho del río para garantizar el nivel freático durante la estación seca

Este proyecto se extiende a lo largo de los treinta kilómetros comprendidos entre el puente de Huánuco, La Atarjea y el puente de Huampaní. Su finalidad consiste en lograr recuperar los ciento cincuenta millones de metros cúbicos de agua dulce que previamente se perdían anualmente en el mar. El coste del proyecto asciende a veinticinco millones de dólares estadounidenses. En la actualidad, se han ejecutado los diez kilómetros comprendidos entre la planta de depuración de La Atarjea y el puente de Huachipa.

El objetivo del proyecto es la creación de una serie de condiciones en el lecho del río que propicien que el agua superficial se filtre hacia los acuíferos durante la estación de lluvias. Para ello, se ha ampliado el cauce y se ha acondicionado el subsuelo de este río, cuyos límites están definidos por los muros laterales que lo canalizan. Las labores de acondicionamiento han consistido en la construcción de una serie de muros pantalla de hormigón armado, colocados de forma transversal a la dirección del río y espaciados cada cien metros. Los muros tienen una profundidad de 3 a 3,6 metros y actúan como cortinas frente a las corrientes de agua. También, se han construido una serie de presas para crear balsas de entrenamiento en el tramo de treinta y dos kilómetros comprendido entre el punte de Huampaní y la toma de entrada de agua a la planta de potabilización de La Atarjea.

Los muros pantalla de hormigón armado reducen la profundidad del nivel freático y, consecuentemente, aumentan la cantidad de agua almacenada en el terreno. También, desaceleran la velocidad de la corriente, lo cual evita que el cauce se obstruya por acumulación de limos y sedimentos. De esta manera, el fondo del río mantiene una suave pendiente y una profundidad uniforme a lo largo de su recorrido. Esto permite que la dinámica del flujo del río esté controlada, lo cual es especialmente necesario en la estación de lluvias cuando el caudal que circula es diez veces mayor que en la estación seca. La filtración del agua hacia el subsuelo permite que ésta se pueda extraer desde los pozos de bombeo en la estación seca. De hecho, el agua obtenida de este modo representa el 35% de los recursos hídricos totales que abastecen a la población de Lima. (Véanse las fotos de la 10 a la 10 I).

Adicionalmente, el proyecto también contempla la construcción de un canal artificial para almacenar el excedente de agua de forma temporal hasta su uso en la estación seca. De este modo, queda garantizado que la totalidad de los recursos hídricos de la cuenca tienen como destino la planta de tratamiento de agua de La Atarjea. Este embalse artificial longitudinal discurre paralelo a la margen derecha del río Rimac, tiene 15 metros de anchura y su longitud final será de unos 22 kilómetros. En su nacimiento, está construido con materiales locales compactados y sin una capa superficial rocosa de protección. A día de hoy, la construcción definitiva con hormigón armado se ha completado en el último medio kilómetro anterior a su desembocadura en la toma de entrada de agua a la planta de potabilización de La Atarjea. El flujo que circula por este canal de almacenamiento para la estación seca se controla de manera electrónica. (Véanse las fotos de la 12 a la 16).

Proyecto de retirada periódica y vertido final controlado de los fangos contaminantes que el río deposita en su desembocadura

Este proyecto consiste en la retirada anual de los aproximadamente 300.000 metros cúbicos de cieno que se depositan principalmente durante la estación húmeda en el canal de remo que sirve como reserva de agua. Este material de desecho se transporta a dieciocho depósitos distribuidos por la zona. Posteriormente, se recicla para otros usos o se procede a su vertido final controlado. Desde que comenzó la andadura de este proyecto en 1998, el agua del río y los ecosistemas costeros ya no reciben las sustancias contaminantes que afectaban el buen desarrollo de la flora y la fauna marinas del océano Pacífico.

El canal de remo artificial se llena de forma anual con la totalidad del agua que el río Rimac aporta durante las 24 horas del día a lo largo de todos los días del año. Así, el volumen completo que se llega a almacenar asciende a un millón y medio de metros cúbicos. La descarga de esta reserva hídrica al mar se solía hacer de una sola vez durante un proceso que no venía a durar más de dos semanas. Hoy en día, gracias al plan, el agua del canal de reserva se somete a dos procesos previos a su llegada a las plantas de potabilización. Por un lado, se realiza una cloración inicial en los colectores de entrada a las mencionadas plantas, y por otro, se lleva a cabo un proceso de decantación primaria con el que se logran depositar con rapidez en el fondo las partículas que el agua lleva en suspensión. El material así decantado se retira del fondo cuando aún está mezclado con una cierta cantidad de agua y se transporta a través de unas conducciones hasta dieciocho depósitos distribuidos por la zona. En ellos, se realiza el proceso de secado de los lodos, el cual tiene una duración de varios meses. Una vez que los lodos se han secado, se retiran de los depósitos para que algunas empresas privadas los reutilicen en sus diversas actividades productivas. Uno de los usos más habituales que reciben es el de material de relleno. Cuando los depósitos de secado quedan vacíos, todo el proceso de limpieza del agua comienza otra vez. (Véanse las fotos 17 y 17 A).

Proyecto de construcción de una valla de seguridad integrada paisajísticamente para la protección ambiental del valle del río Rimac

El proyecto consiste en la construcción de una valla perimetral que evita que se sigan vertiendo al río materiales de derribo y residuos como previamente se solía hacer ante la indiferencia de los vecinos y de las autoridades competentes. La valla está construida con un sistema de barras de hormigón armado que permite ver la reserva natural a su través. Tiene una altura de dos metros y medio y discurre a ambos lados del río Rimac en el tramo comprendido entre toma de entrada de agua a la planta de potabilización de La Atarjea y el puente de Huachipa. (Ver foto 18).

Proyecto del centro de ocio ecológico de Huachipa

El objetivo con el que se ha construido este centro ha sido fomentar el equilibrio que debe existir entre la naturaleza y el desarrollo humano. Además, el centro contribuye al desarrollo económico y social del país. En él, se imparten programas educativos ambientales y se realizan actividades de formación, investigación científica y protección del medio ambiente y de la vida salvaje.

El centro cuenta con unas instalaciones de veinte hectáreas de superficie en las que se llevan a cabo los programas de educación ambiental. Las actividades del centro contribuyen a reforzar la conciencia ambiental de la población y a promover la protección y la conservación de la vida salvaje del país. También, el centro supone una contribución a la investigación de los recursos naturales de la reserva natural donde se encuentra emplazado.

El centro cuenta con unas instalaciones separadas y especialmente acondicionadas donde se pueden encontrar diversas especies de plantas y animales de Perú. La función de estas instalaciones es practicar y promover actitudes positivas del hombre frente a la naturaleza. Otra de las instalaciones del centro está dedicada a resaltar la importancia que tiene el agua para la vida. En ella, se ofrecen recomendaciones y se realizan actividades que promueven la conservación y el buen uso de los recursos hídricos naturales.

El centro de ocio ecológico de Huachipa se inauguró en el mes de diciembre de 1998. Durante su primer año de funcionamiento, recibió casi un millón de visitas y, hoy en día, aún sigue abierto. En 2002, la gestión del centro pasó a manos privadas.

Resultados obtenidos con el Plan de Recuperación

La primera fase del Plan de Recuperación Ecológica y Ambiental de la Cuenca del Río Rimac comprende una serie de actuaciones para un tramo de 28 kilómetros de longitud de la cuenca. La inversión prevista para su ejecución asciende a 77 millones de dólares estadounidenses. A día de hoy, se han ejecutado una parte de los proyectos del plan con un valor de 20 millones de dólares. Los resultados que se han obtenido hasta el momento indican que el plan se está desarrollando de manera correcta. Estos resultados también lo avalan como una propuesta de utilidad que está beneficiando a los ocho millones de habitantes de las ciudades de Lima y Callao. Todo ello, aconseja que no se interrumpan las inversiones previstas en el plan.

A continuación, se presentan los resultados positivos que se han obtenido con el plan divididos en cuatro bloques en función del campo en el que se han producido los beneficios:

Beneficios ambientales

Se pueden destacar cinco resultados positivos que benefician al medio ambiente:

  1. Se ha dado un gran paso en la recuperación ambiental de las orillas del río Rimac. Éstas se encontraban en una situación de deterioro importante. En este sentido, se han retirado las basuras y los escombros que la población había depositado y que habían ido estrechando poco a poco el cauce del río. También, ha desaparecido la contaminación del agua del río gracias a la eliminación de los vertidos directos que se realizaban desde las redes de saneamiento de las áreas urbanas e industriales. La eliminación de las basuras y de los escombros de las orillas también ha supuesto la reducción de las partículas sólidas que éstos desprendían al agua y que se unían en suspensión a la corriente.
  2. Se han reforestado cincuenta hectáreas de terreno en las riberas del río Rimac, lo cual ha contribuido a estabilizar el lecho del río. Además, como la nueva vegetación desprende oxígeno a la atmósfera, la calidad del aire de la ciudad de Lima ha mejorado. Así mismo, los vecinos de esta ciudad, que se caracteriza por su escasez de zonas verdes, también se han beneficiado directamente de la reforestación, ya que esta área se ha convertido en un equipamiento para el ocio al aire libre en contacto con la naturaleza.
  3. Se ha disminuido la contaminación del agua superficial y de los acuíferos de los ríos Rimac y Chillón gracias a la retirada o al traslado de de los siguientes elementos: La construcción de una valla de protección ha sido un factor determinante a la hora de acabar con los vertidos incontrolados de basuras y de residuos en el cauce del río.
  4. Se ha conseguido incrementar la relación de volumen de agua subterránea del acuífero por metro cuadrado de superficie de terreno de la cuenca en unos 1,5 metros cúbicos por metro cuadrado de media diaria. El drenaje hacia el subsuelo de este flujo se traduce en el almacenamiento subterráneo de unos veinte millones de metros cúbicos de agua al año. Las intervenciones que han hecho esto posible han sido, por un lado, el ensanchamiento del cauce del río hasta cien y doscientos metros en el tramo inicial de diez kilómetros de longitud, y por otro, la construcción de muros pantalla de hormigón armado a modo de cortinas subterráneas espaciadas cada cien metros y colocadas a lo largo del cauce de forma perpendicular a la dirección de la corriente.
  5. Se ha reducido la cantidad de partículas minerales en suspensión que arrastra la corriente del río gracias a que el sistema de muros pantalla de hormigón con efecto cortina permite controlar la dinámica de velocidad de la corriente. También, se ha mejorado la calidad del agua que llega finalmente a la toma de entrada de la planta de potabilización de La Atarjea gracias a que se han eliminado los vertidos no controlados de las redes de saneamiento en el tramo del río sobre el que el plan ya ha actuado. De esta manera, como la concentración de partículas físicas, organismos biológicos y contaminantes químicos es menor, el agua que llega es de mayor calidad. (Véanse las fotos de la 19 a la 21).

Beneficios económicos

Se pueden destacar seis resultados positivos de índole económica:

  1. La mejora de la calidad que ha experimentado el agua que llega a la toma de entrada de la planta de tratamiento de La Atarjea ha reducido sus costes de operación, ya que se necesitan menos productos químicos para llevar a cabo el proceso de potabilización.
  2. Los ingresos de SEDAPAL, la empresa estatal encargada del servicio de abastecimiento de agua potable y de gestión del alcantarillado de Perú, se han incrementado. Esto se ha logrado gracias a que la compañía cuenta en la actualidad con un mayor volumen de recursos hídricos para distribuir entre la población.
  3. La venta de los 300.000 metros cúbicos de limos que se obtienen en los procesos de decantación a diversas empresas privadas se ha traducido en la obtención de unos ingresos anuales adicionales.
  4. La venta de unos 500.000 metros cúbicos de material rocoso también genera unos ingresos anuales adicionales. Este volumen de roca se obtiene en las labores de limpieza del lecho del río que se realizan anualmente antes del comienzo de la estación de lluvias para favorecer la filtración del agua al subsuelo. Tras la venta, el destino del material suele ser la industria de la construcción o las empresas especializadas en geotecnia. Estas últimas lo emplean para realizar las labores de asentamiento y contención de los terrenos.
  5. La limpieza previa que, tras la puesta en practica del plan, se realiza de los objetos flotantes de gran tamaño a la entrada de las plantas de tratamiento de agua ha reducido los costes del proceso de depuración. Diariamente, se retiran unos quince metros cúbicos de basuras, bolsas o botellas, lo cual representa el 80% de los elementos flotantes que arrastra el agua del río.
  6. Los recursos financieros obtenidos a través de la venta de los limos y del material rocoso se emplean para financiar los trabajos pendientes del plan y para cubrir parcialmente los costes de operación y mantenimiento de los proyectos en marcha.

Beneficios sociales

Se pueden destacar cuatro resultados positivos de temática social:

  1. La mejora de la calidad del agua que llega a las plantas de potabilización que abastecen a la ciudad de Lima ha mejorado el nivel de protección de la salud pública de la población. Esto es así debido a que el agua del río tiene una concentración significativamente menor de partículas minerales y de materia orgánica.
  2. El servicio de abastecimiento de agua a la población ha mejorado, ya que existe una mayor disponibilidad de este recurso natural.
  3. La cuenca del río Rimac se ha convertido en un atractivo lugar de ocio y de interés turístico. El nuevo entorno natural favorece la práctica de actividades al aire libre como pueden ser los deportes o los descensos del río en barcas y canoas.
  4. El precio del suelo se ha revalorizado en la zona. De esta manera, los terrenos y las viviendas que antes vivían de espaldas al río ahora se han visto beneficiados económicamente, ya que el entorno ha recuperado su interés ambiental. (Véanse las fotos 22 y 23).

Beneficios educativos

Se pueden destacar dos resultados positivos en el campo de la educación:

  1. La comunidad en general y los niños en particular se están haciendo conscientes de la importancia que tiene proteger y preservar el río y sus alrededores.
  2. Los profesores y los estudiantes de los colegios de la zona están participando en las campañas de limpieza y de protección de la cuenca del río Rimac. Esto contribuye a reforzar su conciencia ambiental. Además, estas actividades cuentan con el apoyo del Ministerio de Educación del gobierno central, el cual ha dispuesto unas instalaciones en las proximidades del río para que se puedan realizar estas actividades.

Agradecimientos

La suma de esfuerzos que han hecho posible la puesta en práctica de este plan de recuperación ecológica y ambiental de la cuenca del río Rimac han permitido obtener una serie de resultados palpables que, además, han obtenido el reconocimiento público de la sociedad desde el año 1997. A continuación, se detallan algunos de los galardones y premios nacionales e internacionales que esta iniciativa ha recibido:

El río Rimac, que nace en las cumbres peruanas de los Andes, transporta agua pura y cristalina que procede de las lluvias y de la nieve derretida en las montañas. El deseo de todos los peruanos es que esta agua conserve la misma calidad desde su nacimiento a 4.300 metros de altitud sobre el nivel del mar hasta su desembocadura en las ciudades de Lima y Callao, cuyos ocho millones de habitantes beben de ella.


Edición del 24-11-2006
Traducción del inglés: Javier Muñoz Galán
Revisión: Carlos Jiménez Romera
Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2006 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/06/bp1222.html   
 
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