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País/Estado — Brasil
Región según Naciones Unidas — América Latina
Región ecológica — árida y semiárida
Ámbito de la actuación — ciudad
Agentes — organización no gubernamental (ONG)Categorías — Erradicación de la pobreza: generación de ingresos; formación profesional. Servicios sociales: educación; ocio; salud y bienestar; reducción y prevención del delito; reforma del sistema judicial; grupos vulnerables (incluyendo a las mujeres). Infancia y adolescencia: de 10 años a la edad adulta; salud y nutrición; educación y formación profesional, cuidado de día y cuidados fuera de horario escolar; programas ambientales dirigidos a los jóvenes; desarrollo de la capacidad de participación y del liderazgo en niños; programas de ocio y culturales; legislación/ intercesión; programas de apoyo comunitarios (protección frente a abusos, abandonos, violencia y delincuencia); abusos, trabajo infantil, guerras; grupos vulnerables.
Instituto de Ecocidadania Juriti Rua Padre Cícero, 1121 - Salesiano Juazeiro do Norte - Ceará - 63010-020 Brasil Tel/Fax (55 88) 3512-4474E-mail: ongjuriti@yahoo.com.br
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Projeto Integrado de Liberdade Assistida (PILA): Unos 900 adolescentes de Juazeiro do Norte, una ciudad al noreste de Brasil, se encuentran en espera de juicio por delitos menores. Anualmente, unos 25 adolescentes son juzgados y puestos en un programa de libertad condicional. El Estado está obligado por ley a prestarles ayuda durante este tiempo, pero es insuficiente. Por ello, a menudo los adolescentes vuelven a cometer infracciones. Esta realidad se ve agravada por la ausencia de instituciones públicas capaces de garantizar a los adolescentes sus derechos básicos.
Grupo de Apoio a Familia (GAF): Se creó como un mecanismo de apoyo social para familias con adolescentes problemáticos, y se centra en la generación de ingresos y en esquemas de producción comunitaria para los cabezas de familia.
El IEJ desarrolló una metodología para proporcionar asistencia a los adolescentes en libertad condicional, que incluye trabajo educativo, psicológico y social, tanto para ellos como para sus familias. Con el apoyo de United Nations Children's Fund (UNICEF), PILA tiene muchas posibilidades de convertirse en parte de las políticas públicas junto con el Plano Nacional de Direitos Humanos, y de verse replicado en la región de Cariri. i
El objetivo del proyecto es crear una política de asistencia transversal para adolescentes en libertad condicional, a través de la búsqueda de condiciones favorables para ellos y del seguimiento continuo de su progreso. Se ofrece asistencia desde que se comete la infracción hasta la restauración de su condición de ciudadano con plenos derechos. Además, el programa proporciona, a través de sus aspectos educativo y social, un seguimiento sistemático a lo largo de la vida de la persona. El objetivo principal del proyecto es la viabilidad de la reinserción social de los adolescentes problemáticos, de acuerdo con la ordenación del Estatuto de Infancia y Adolescencia.
Entre los resultados del programa obtenidos en los últimos cinco años (2000-2005), PILA ha creado una base de datos de los adolescentes delincuentes de Juazeiro do Norte, que ha permitido desarrollar un sistema y una metodología que han sido aplicados a todo el proyecto y pueden ser reproducidos fácilmente.
Actualmente, unos cien adolescentes han recibido asistencia del programa, y la mayoría de ellos han retomado su educación formal, se han implicado en el proyecto como coordinadores y no han cometido ninguna infracción más. Ahora el programa, supervisado por la Fiscalía de Infancia y Adolescencia, asiste a 26 adolescentes y sus familias. La mayor parte de las familias son encabezadas por mujeres que reciben asistencia de otro de los programas del Instituto, el GAF, que se creó como mecanismo de apoyo social para familias con adolescentes problemáticos, y se centra en la generación de ingresos y en esquemas de producción comunitaria para los cabezas de familia.
La iniciativa PILA contribuye al desarrollo de mejores ciudadanos, con un nivel más alto de educación y de responsabilidad social, en la sociedad brasileña. Otro resultado importante del programa es la disminución de la violencia y la reducción de las grandes diferencias económicas.
El IEJ fue creado para que los niños tuvieran una oportunidad de vivir su infancia, trabaja en temas relativos al medio ambiente, y sus primeras acciones fueron encaminadas hacia la educación ecológica. Este plan atrajo a muchas personas, en especial a profesores, padres y los mismos chicos. La comunidad necesitaba un cambio: una educación deficiente (no existían ordenadores en las escuelas), nivel alto de abandono escolar (30%), altos niveles de violencia doméstica y urbana, pobreza, desempleo, bajos ingresos (la mayoría tienen ingresos mensuales inferiores a los 100 Reales, unos 33 dólares estadounidenses). Esta situación lleva a los chicos a mendigar en la calle o a cometer delitos.
Por esta razón, el Instituto creó una metodología de asistencia para adolescentes en libertad condicional, empleando instrumentos pedagógicos, como alfabetización digital, educación ecológica y circo, en consonancia con las capacidades y deseos de los jóvenes.
Además, el GAF ayuda a los adolescentes a volver a la escuela y les proporciona conocimientos adicionales para su vida profesional y personal, como autoconocimiento, responsabilidad y autoestima.
El programa cuenta con un equipo humano de varios especialistas, como un psicólogo, que es el responsable del primer contacto con los jóvenes y proporciona asistencia psicológica; un psicopedagogo, que analiza el informe del psicólogo y descubre la fuente del trauma y de otros factores que han llevado al chico a adquirir comportamientos antisociales y a cometer infracciones, a través de terapias individuales y de grupo; un sociólogo, que recoge toda esta información y, junto con el joven, redacta su proyecto ciudadanía, un calendario de compromisos hechos por el adolescente, que incluye un plan de reintegración social. El siguiente paso es establecer un diálogo entre la familia del joven y los profesionales que han trabajado con él, para incluirla en el proyecto. Los profesionales del PILA provienen de otros proyectos sociales, por lo que han aportado una gran experiencia en el campo del trabajo social.
En el IEJ, contamos con un sociólogo, un psicólogo, un pedagogo, un abogado, un profesor de inglés, un diseñador de páginas web, un coordinador de comunicaciones y ocho educadores sociales, que trabajan con 80 niños, 40 adolescentes, 15 jóvenes adultos y 40 cabezas de familia (la mayoría mujeres).
El IEJ gestiona los recursos para el programa e informa a los patrocinadores del estado de las cuentas.
Tras la primera fase financiada por UNICEF en 2002, IEJ continuó asistiendo a los jóvenes, si bien con muchas dificultades y de forma voluntaria, sin ningún apoyo por parte del gobierno. En 2003 UNICEF apoyó de nuevo al proyecto.
En 2004, con miedo a no ser capaces de mantener el proyecto, el equipo se encargó, una vez más, de buscar recursos económicos y nuevos colaboradores: el proyecto se presentó a la Secretaría Especial de Derechos Humanos del Gobierno Federal, a la Secretaría del Estado para Acciones Sociales, al Fondo Municipal para los Derechos de la Infancia y la Adolescencia, a la Compañía Petrolera Estatal (PETROBRAS), y a la Fame Zero (iniciativa del preidente Lula para la eliminación del hambre en Brasil), entre otros.
El problema fue solucionado en parte, gracias a las subvenciones de la Dreams Can Be Foundation y Brazil Foundation, y a la venta de monociclos.
En los últimos dos años, la permanencia de los antiguos participantes del proyecto y la entrada de nuevos jóvenes de las familias que actualmente asisten al mismo ha hecho que se incremente el número de adolescentes que participan en el proyecto. Los padres han comenzado a entender la necesidad de estar más presentes en la vida de los chicos; los resultados de su participación les motiva a permanecer en el proyecto y pasan más tiempo con sus hijos. Hemos obtenido el apoyo del municipio para proporcionar protección y refugio en un centro de rehabilitación a aquellos adolescentes que viven situaciones de amenaza por sus antiguas actividades ilegales, como tráfico de drogas, con la asistencia del equipo de IEJ. Este hecho confirma la necesidad de proporcionar continua asistencia a estos adolescentes.
Uno de los mayores logros del programa es la reincorporación de la mayoría de los adolescentes a la escuela. Además, un número significativo de estos jóvenes permanecen en la organización como coordinadores o voluntarios en las actividades que se realizan en el programa de libertad condicional.
Desde 2003, gracias a los esfuerzos de IEJ, el fiscal remite al Instituto de Ecocidadania Jurita a los adolescentes que comenten un delito por primera vez; allí podrán beneficiarse de los servicios que este programa les ofrece. Este hecho significa que IEJ tiene un impacto real en la comunidad y refuerza los lazos entre el proyecto y el gobierno local.
En los últimos 5 años (2000-2005), Instituto de Ecocidadania Jurita ha recopilado una base de datos de los jóvenes delincuentes de Juazeiro do Norte, que ha servido de base paras la creación de la metodología sistemática que el proyecto lleva a cabo, y está disponible para la sociedad civil e importantes agencias comprometidas con temas relacionados con infancia y juventud.
Estos son algunos de los datos cuantitativos recogidos por el proyecto de libertad condicional en el año 2004:
Inicialmente, y durante un periodo de dos años, el proyecto contó con recursos económicos aportados por UNICEF para la construcción de una metodología que permitiera apoyar a los chicos y sus familias.
La organización ha realizado grandes esfuerzos para conseguir que el Estado adoptara el proyecto como un servicio de trabajo público (algo que sucede a menudo con proyectos sociales que tienen éxito en Brasil). Después de seis años de trabajo, PILA ha sido incluido en el Plano Plurianual, un requisito previo para ser incluido en los presupuestos del estado para asuntos sociales, y, actualmente, se encuentra en la fase de análisis, antes de que se apruebe el apoyo financiero.
En 2004 iniciamos el proyecto GAF con el apoyo económico de la Fundación Brasil. Este programa compuesto por las madres de los chicos que se encuentran en el programa de libertad condicional, que confeccionan muñecas indígenas que venden para generar ingresos, recuperan la tradición cultural en la región, y contribuyen a pagar el alquiler del espacio del proyecto mismo.
En 2005 se presentó el proyecto a la Secretaría Especial de Derechos Humanos (SEDH) y se aprobó, pero el dinero para financiarlo no llegó (cosa frecuente en Brasil, donde el dinero puede aparecer, o no).
El proyecto continúa ofreciendo una serie de cursos para jóvenes, divididos en tres partes: Circo social, alfabetización digital y educación ambiental, que comienza con un primer curso en alfabetización ecológica, tras el cual los jóvenes pasan a actuar como agentes para la comunidad, enseñando reciclaje (con lo que la comunidad también puede generar ingresos) y cómo utilizar materiales reciclados y darles otros usos. Los jóvenes de PILA y de la comunidad (en situación de riesgo, no delincuentes) que se han beneficiado también del proyecto, han aprendido y crecido juntos.
Nuestra metodología está sistematizada, organizada, y está disponible para cualquier tipo de sociedad y proyecto que tenga interés en reproducir esta iniciativa. Muchos proyectos se nos han acercado ya para entender mejor y adaptar nuestra metodología de trabajo a su perspectiva.
El Circo Escola Pestalozzi reprodujo la metodología del Circo Escola de Ecocidadania en abril de 2006 para 50 chicos físicamente impedidos de la ciudad de Missão Velha, Ceará, en la sede de la Asociación Pestalozzi, financiada por la Secretaría de Asistencia Social de Ceará. También Pólo de Atendimento do Horto (PAH), un barrio en el que existe mucha explotación infantil, va a reproducir nuestro proyecto, equipamiento, instalar un circo con un equipo multidisciplinar (un médico, un dentista, un psicólogo, un pedagogo, un trabajador social, un experto en fonología y un fisioterapeuta), que trabajan desde la perspectiva de que cualquier niño merece y pertenece a una sociedad justa, a la que tienen que aprender a cuidar, y no sólo a ellos o a lo que les rodea. La coordinación, los educadores de circo social y la evaluación, correrán a cargo de IEJ.
Además, 35 mujeres de la comunidad vecina de Leandro Bezerra han reproducido el Taller Solidario bajo la carpa del Circo Escola Ecocidadania.
Socio | 2002 | 2003 | 2004 | 2005 | 2006 | Total | % |
UNICEF | - | 70.000 | - | - | - | 70.000 | 24,75 |
SEMACE | 39.710 | - | - | - | - | 39.710 | 13,81 |
FASE | - | 4.000 | - | - | - | 4.000 | 1,39 |
Dreams Can Be Foundation | - | 10.000 | 20.000 | 15.000 | - | 45.000 | 15,65 |
Fundación Brasil | - | - | 26.355,31 | - | - | 26.355,31 | 9,16 |
Banco Mundial | - | - | - | 2.400 | - | 2.400 | 0,83 |
SEDH | - | - | - | 84.000 | - | 84.000 | 29,22 |
FUNARTE | - | - | - | - | 16.000 | 16.000 | 5,56 |
- | - | - | - | - | - | 287.465,31 | 100 |
(2004) «Iniciativa com o apoio do Criança Esperança ajuda jovens em Juazeiro do Norte», http://www.globo.com/jornalnacional, 27/07/2004
Francisco Demontier (2005) «Rede de ONGs muda perfil social das comunidades», Diário do Nordeste, 12 de junio de 2005
(2005) «'Amigos do Prato' doa alimentos para entidades beneficentes», Diário do Nordeste, 18de febrero de 2005
(2006) «Crianças e adolescentes criam seu fórum em Juazeiro do Norte», Setor 3, 27 de enero de 2006
Buenas Prácticas > Concurso Internacional > 2006 > http://habitat.aq.upm.es/dubai/06/bp0862.html |