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País/Estado — Brasil
Región según Naciones Unidas — América Latina
Región ecológica — árida y semiárida
Ámbito de la actuación — nacional
Agentes — gobierno central; sector privado; organización no gubernamental (ONG).Categorías — Erradicación de la pobreza: generación de ingresos; creación de puestos de trabajo; formación profesional; acceso a créditos. Desarrollo económico: creación de empresas (sectores formal e informal); fomento de la inversión; formación de capital; capacidad empresarial; formación; oportunidades para la cooperación; microcréditos; desarrollo económico local / metropolitano. Servicios sociales: educación; ocio.
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La principal meta de la Associação de Desenvolvimento Sustentável e Solidário da Região Sisaleira es la promoción del desarrollo socioeconómico sostenible y armónico en la región sisalera (ubicada en el sertão nordestino) junto con la población local que vive en ella. Para llegar a una meta tan ambiciosa ha sido necesario actuar en una variedad de áreas, económicas y educativas.
La asociación ha llevado a cabo las siguientes actuaciones:
Entre los resultados concretos obtenidos por este proyecto se incluyen la fábrica de mantas y alfombras que se inauguró en 1996, y que ya en 1999 había ayudado a incrementar el precio de la tonelada métrica de cultivo de sisal en la región en un 188%. Una de las cooperativas que se ha beneficiado de este proyecto es COOPERAFIS, una cooperativa de mujeres que recibió asistencia de APAEB durante sus fases iniciales. En tan sólo unos años esta cooperativa se ha convertido en la fuente de empleo e ingresos para aproximadamente un centenar de mujeres.
La agricultura familiar en la región sisalera cuenta con pocas alternativas de subsistencia. El cultivo del sisal, el principal de la región sufrió una depresión de precios del mercado. No existía ningún tipo de organización colectiva para la producción y venta de este producto, y no había alternativas que hicieran viable la mejora. Dadas estas condiciones, a la población no le quedó más elección que migrar a otras regiones en busca de mejores condiciones de vida. A pesar de todos estos problemas, la región sisalera se ha visto excluida históricamente de la agenda política del gobierno. Las políticas públicas no han sabido explotar el conocimiento y los recursos locales en sus esfuerzos por resolver los problemas planteados por la supervivencia durante los periodos de sequía.
Las lista de prioridades inciales, establecidas por los agricultores (fundadores de APAEB) y más adelante consolidadas por el equipo de directivos y expertos técnicos que asumió la responsabilidad administrativa incluyó los siguientes puntos:
Con el objetivo de crear oportunidades de empleo y de generación de ingresos en la región sisalera, el equipo directivo de APAEB, en asociación con los pequeños agricultores y trabajadores rurales formuló las siguientes estrategias:
En base a las estrategias iniciales, el equipo directivo de la asociación identificó otras necesidades, como por ejemplo:
A lo largo del proyecto, como estrategia de recaudación de fondos se utilizó la formalización de estrategias con ONG locales y extranjeras, con instituciones municipales y regionales y con organismos públicos financieros: el Banco del Nordeste, el BNDES y la CAIXA. La Cooperativa de Crédito Rural de Valente, la Fundación W.K. Kellogg y el BNDES aportaron recursos financieros en los años 2000 y 2001, principalmente a través de la concesión de créditos. Gran parte de los recursos aportados por el BNDES fueron fondos en forma de becas destinadas al desarrollo de proyectos sociales.
La mayoría de los fondos (75%) necesarios para la construcción de la fábrica de mantas y alfombras de sisal se recaudaron a través de créditos a medio plazo a ser devueltos en 10 años. Este medio de financiación no consiguió recaudar la cantidad suficiente para sufragar el capital necesario para poner en marcha una institución tan grande (sólo la fábrica cuenta con 600 trabajadores), lo que forzó a APAEB a pagar los costes de financiación con deudas altas contraídas en préstamos a corto plazo a través de la banca privada.
A pesar de las dificultades mencionadas, el éxito de las unidades productivas permitió a APAEB constituir un equipo multidisciplinar con conocimientos en una amplia variedad de campos, particularmente en educación, agronomía y cría de ganado. Los agricultores han recibido una serie de cursos de formación y han accedido a un programa de asistencia técnica permanente que les orienta en las prácticas que pueden desarrollar en sus terrenos y que les ofrece un seguimiento permanente.
Con la meta de construir una base organizativa capaz de desarrollar la región de un modo sostenible, la estrategia global de APAEB apostó por la combinación de educación y economía. Se hizo también evidente la necesidad de métodos político-pedagógicos en línea con las estrategias de fortalecimiento de lazos con la comunidad.
En un principio, se puso en marcha un comercio rural donde los trabajadores socios de APAEB podían comprar y vender sus productos. A esta iniciativa le siguió la actualización de los precios del cultivo del sisal, que habían sufrido una depresión en el mercado internacional que favorecían la concentración de los beneficios en las manos de unos pocos monopolistas. APAEB reunió a los agricultores y sugirió la venta colectiva de la caña de sisal como estrategia para sobrevenir las prácticas monopolistas. En una siguiente fase, se acometieron el procesado y exportación del sisal, así como la industrialización de la fibra. Todo este proceso tuvo que vencer la resistencia de los agricultores, cuyas condiciones de pobreza y aislamiento les privaban de perspectivas de la esperanza de mejora para su grave situación.
A lo largo del proyecto también se hizo evidente la necesidad de diversificación económica. La alternativa económica elegida fue la cría de ovejas y cabras, que son animales bien adaptados al clima semiárido de la región. Esta estrategia planteó retos culturales, ya que los agricultores no consideraban la cría de cabras como una actividad potencialmente rentable. Para hacer frente a este reto, se desarrolló un programa educativo con el que superar los prejuicios y e ideas preestablecidas y demostrar que las cabras son una cría más razonable que el vacuno para granjeros con un capital limitado.
APAEB ayudó a desarrollar un centro de productos lácteos y de curtido, permitiendo a los agricultores entrar en los mercados de los productos lácteos y del cuero.
El proceso educativo se desarrolló más allá a través de cursos de formación dirigidos a los agricultores y a través de incentivos para proyectos desarrollados por la Escuela de Agricultura Familiar donde se educan las futuras generaciones de agricultores. Un programa de televisión y una emisora de radio comunitaria complementan los esfuerzos educativos.
También se consideró que la ampliación de los créditos para inversiones en las pequeñas granjas era una necesidad principal, puesto que los agricultores locales carecían de los recursos adecuados y no podían acceder al sector de la banca privada. Esto llevó a la idea de la creación de cooperativas de crédito con especial atención a los pequeños agricultores.
Hasta hoy el proyecto ha alcanzado los siguientes resultados:
Esta práctica, desarrollada por APAEB se puede considerar sostenible desde diversos puntos de vista: la fábrica de mantas y alfombras, a través de su participación en los mercados local y extranjero es responsable del 75% de los ingresos de la asociación y tiene capacidad para financiar nuevos proyectos. Entre estas nuevas iniciativas se incluyen proyectos económicos todavía en fase de desarrollo o consolidación, así como programas educativos, culturales o de ocio. Aparte de consolidar la autonomía financiera, la fábrica también tiene un efecto multiplicador en el empleo. Como principal comprador de la producción local y regional de sisal, ejerce una fuerte influencia sobre los precios de mercado del material bruto. Por otra parte, además, la fábrica fortalece la habilidad de la asociación para conseguir fondos de organismos financieros nacionales e internacionales, que son necesarios, como complemento a los recursos propios para implementar los proyectos de la asociación.
Las unidades productivas emplean tecnologías limpias y cuentan con un invernadero para los semilleros de especies vegetales locales que pueden ser transplantadas y desarrollarse. La Escuela de Agricultura Familiar utiliza energía solar, una práctica cuyo uso se incentiva en las granjas locales. Se están llevando a cabo investigaciones para mejorar los equipos empleados en la producción de sisal, con el objetivo de mejorar la protección de los trabajadores y de incrementar la viabilidad financiera que pudiera tener la operación de esta maquinaria en las pequeñas plantaciones.
El cultivo del sisal no produce deshechos, ya que los materiales residuales de la extracción de la fibra se utilizan como alimento para el ganado. Por otro lado, APAEB se ha planteado la exploración de otros usos para la planta del sisal, incluido su potencial uso medicinal. A través de alianzas y asociaciones el proyecto busca nuevas tecnologías con las que alcanzar este objetivo. La influencia de APAEB en la economía regional produce numerosos beneficios en la población, fortaleciendo el lazo entre los residentes locales, su tierra y sus orígenes y ofreciéndoles alternativas a la migración a las grandes ciudades, lo que contribuye al crecimiento sostenible de la región sisalera.
Una de las principales lecciones aprendidas en esta iniciativa es el poder que tienen los incentivos y la organización comunitaria, sin la pérdida de la identidad cultural, de ser la chispa desencadenante de amplias transformaciones. La zona interior de Bahía se ha caracterizado históricamente por el éxodo de su población, los sertanejos. La mejora de las condiciones materiales llevada a cabo por este proyecto ha permitido la permanencia de los sertanejos y ha transformado la región interior en un lugar al que pueden pertenecer sus pobladores. Otra importante lección aprendida es la necesidad de concienciar a los jóvenes locales como modo de dar continuidad al proceso y fortalecer sus lazos sociales y culturales con la región. La formación de los jóvenes puede contribuir de modo significativo al desarrollo económico regional, puesto que numerosos sectores de la economía local carecen de trabajadores cualificados.
Si se respetan las características locales, se pueden replicar iniciativas similares en cualquier lugar. Asociaciones procedentes de otras ciudades y regiones del Nordeste brasileño han visitado APAEB para conocer su forma de trabajo. La característica más destacable es que la experiencia se ha desarrollado de forma gradual, respetando los periodos de maduración necesarios en procesos participativos. APAEB también enfatiza a sus visitantes la cría de ovejas y cabras, puesto que estos animales pueden adaptarse a las condiciones semiáridas en otras ciudades y regiones. Diversos proyectos de la misma escala en la región han utilizado métodos semejantes a los de APAEB. Ésta es una experiencia inspiradora con un gran potencial de replicación.
En base a los resultados alcanzados, la CAIXA incluyó en el año 2005 a esta práctica entre las 10 mejores prácticas y la consideró como candidata al Premio Caixa para Mejores Prácticas de Gestión Local. A través de este premio, la CAIXA publicitó esta práctica de desarrollo local sostenible, poniéndola a disposición de los administradores públicos potencialmente interesados en transferir esta experiencia a otras ciudades.
El trabajo conjunto de APAEB y otras agencias locales ha influido fuertemente el esfuerzo por desarrollar en Brasil un programa de erradicación del trabajo infantil, lo que ha permitido que APAEB obtenga el sello de Empresa Respetuosa con la Infancia otorgado por la Fundación Brasileña por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (ABRINQ).
| Socio | 1994 | 2002 | 2003 | 2004 | Total |
| Caja Federal de Ahorros | 276.250,54 | - | - | - | 276.250,54 |
| Volens/Itinerans | - | 56.657,22 | 65.743,94 | 67.924,52 | 190.325,68 |
| Banco do Nordeste | - | - | - | 14.716,99 | 14.716,99 |
| Insitituo de Desarrollo Social y Cooperación Belga-Brasileño (DISOP) | - | - | - | 75.471,69 | 75.471,69 |
| Ministerio de Deportes | - | - | - | 59.622,64 | 59.622,64 |
| SICOOP | - | - | - | 566.037,73 | 566.037,73 |
| Total Budget | 276.250,54 | 56.657,22 | 65.743,94 | 783.773,57 | 1.188.425,27 |
Las cifras se expresan en dólares EEUU, las tasas de cambio empleadas son las siguientes:
Humberto Miranda do Nascimento (2003) Origen y evolución del capital social en Valente [Origem e Evolução do Capital Social em Valente/BA] Editora Annablume, 1a Edición, 125 pages
Mônica Bichara (2003) «Hambre Cero: los productores de Valente y Conab se alían [Fome Zero: produtores de Valente e Conab fazem parceria]», Correio da Bahia, primero de mayo
Vicente Nunes (2002) «El Brasil que triunfa globalmente [O Brasil que faz sucesso lá fora]», Correio Brasiliense, 3 de febrero
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