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País/Estado — Bahrein
Región según Naciones Unidas — Estados Árabes
Región ecológica — isleña
Ámbito de la actuación — nacional
Agentes — sector privadoCategorías — Servicios sociales: educación; salud y bienestar; seguridad ciudadana; grupos vulnerables (incluyendo a las mujeres). Gestión ambiental: reducción de la contaminación; tecnología ambientalmente responsable; sostenibilidad ecológica; contabilidad ecológica; incentivos para una gestión responsable; gestión de recursos. Modelos de producción y consumo: conservación de recursos, ahorro de recursos; responsabilidad de los productores; producción de energías limpias.
GPIC P.O. Box: 26730 1 Road 1401 Um Al-Baid 614 Sitra Reino de Bahrain Tel: (+973) 17 731777 Fax: (+973) 17 731047E-mail: falansari@gpic.net
A pocas organizaciones industriales les interesa armonizar sus actividades con el medio ambiente, y menos aún toman medidas serias para ello. Además, tampoco hacen mucho por su contribución social.
La GPIC decidió voluntariamente llevar la iniciativa de una manera sin precedentes a la hora de poner en marcha varios proyectos y programas.
En 1990, la compañía inició un programa de ayuda financiera para entidades caritativas, grupos desfavorecidos, eventos y otras causas valiosas. Sólo en los últimos seis años, la GPIC ha dedicado unos 2,3 millones de dólares estadounidenses a promover por primera vez la responsabilidad social y medioambiental según su propio modelo.
En 1992 se fundó un huerto benéfico que produjo más de 14 toneladas de verduras para ayudar a las familias con menos recursos y a los ancianos. Junto a la salida de aguas de las plantas procesadoras se creó una piscifactoría que demuestra la compatibilidad de las actividades de la GPIC con la vida marina, y repobló los bancos de peces con más de 280.000 ejemplares. También se creó un santuario para aves, asegurando unos cielos seguros a las aves migratorias, zancudas y otras especies locales. Se han registrado 104 especies visitándolo, de las cuales gran cantidad habitan en la isla. Y la última ampliación del jardín de hierbas medicinales contribuye a la conservación y promoción de las especies indígenas usadas con fines terapeuticos. También permitió que el número de árboles plantados en el complejo se elevara hasta los 4.700.
El público general estaba muy poco concienciado y preocupado por los problemas ambientales. Se explotan los bancos de peces a mas velocidad de lo que la naturaleza puede regenerar. Se hace muy necesaria la contribución especializada que incida en las vidas diarias de la gente. No se procuraba la atención deseable a los ancianos, los inválidos, los huérfanos, los desempleados y las mujeres.
Tras conseguir mejorar la seguridad y fiabilidad de los procedimientos que se llevan a cabo en las plantas deproducción de amoniaco, metanol y urea, la GPIC se embarcó en la promoción de la responsabilidad ambiental y social de la industria. Se identificaron las siguientes prioridades:
Para dar ejemplo, el director ejecutivo decidió liderar la iniciativa. Para contactar más fácilmente con los más desfavorecidos, particularmente con las mujeres, se recurrió a personal femenino.
El director ejecutivo identificó los siguientes objetivos:
Las principales estrategias que se adoptaron fueron la contribución social, la educación, las campañas de concienciación, la colaboración con otras organizaciones nacionales e internacionales y la atención de los medios.
La GPIC financia todos los proyectos sociales, ambientales, sanitarios y de seguridad mediante unos presupuestos anuales. Para mantener la iniciativa en marcha, se contó con los propios recursos humanos de la compañía, desde el Director General hasta los trabajadores manuales. Los departamentos técnicos se ocuparon de los problemas técnicos correspondientes. Cuando no se contó con los conocimientos y experiencia necesarios, se buscó la colaboración de expertos de las organizaciones locales.
Se consultó a la Comisión Pública para la Protección de los Recursos Marinos, el Medio Ambiente y la Vida Salvaje, Directorio de Pesca [Public Commission for the Protection of Marine Resources, Environment and Wildlife, Directorate of Fisheries] y la Universidad de Bahrein a la hora de poner en marcha la piscifactoría. Para la creación del santuario para aves se pidió asesoramiento a una compañía local, Al-Reem Environmental Consultants, y se encargó al Centro de estudios e Investigación de Bahrain [Bahrain Research and Studies Centre (BSRC)] un análisis de la viabilidad del jardín de hierbas medicinales. Los representantes de la compañía y del Ministerio de Educación gestionan conjuntamente la GPIC así como el Programa de Investigación Ambiental de dicho Ministerio.
Las empleadas contactaron con otras organizaciones locales de mujeres, de ancianos y de chicas estudiantes con pocos recursos, lo que resultó crucial. La compañía también unió sus fuerzas a la Asociación de Salud y Seguridad local, la Media Luna Roja de Bahrein, Defensa Civil y otras organizaciones diversas, tanto locales como extranjeras (por ejemplo, The Royal Society for the Prevention of Accidents, de Reino Unido), para mejorar la seguridad y la salud y para promover la concienciación de la opinión pública.
La escasez de proyectos similares en la región hizo más complicado que la GPIC logre la viabilidad de sus proyectos, y que estos se adecúen al medio ambiente local y estén dirigidos hacia las necesidades de la comunidad. En 1992, el primer proyecto, un huerto benéfico de 1.500 metros cuadrados, requería pocos recursos y experiencia; bastó con los recursos locales para ponerlo en marcha. Sin embargo, la creación de una piscifactoría implicaba seleccionar la localización más apropiada y garantizar las condiciones adecuadas indispensables para la supervivencia de los peces. Gracias a la colaboración con el Directorio de Pesca hizo posible identificar el tipo de especie y asegurar su continua dispobilidad.
Se declaró santuario para aves una banda costera de 600.000 metros cuadrados aproximadamente, al suroeste del complejo de la GPIC. Dentro de esta zona, se estableció una isla artificial de 3.800 metros cuadrados conectada a éste. El santuario se asemeja fielmente al hábitat natural. La empresa especializada Al-Reem Environmental Consultants se encargó del asesoramiento en su diseño y su puesta en marcha. Se hizo un estanque artificial para que las aves dispusiesen de animales marinos de los que alimentarse, y se plantaron alrededor de 2.000 mangles en el entorno del santuario para aves.
El jardín de hierbas medicinales, con un área de 1.200 metros cuadrados, es el fruto de la cooperación entre la GPIC y el BSRC. Éste último asesora sobre las plantas y arbustos, la preparación de la tierra, el riego y la temporada para cultivar, mientras que los trabajos se llevan a cabo mediante los recursos de la compañía. El Oasis Verde es un proyecto de invernadero de 16.000 metros cuadrados en conmemoración de la visita de las autoridades y refuerza los vínculos entre los empleados y el medio ambiente. La mayor parte de los árboles han sido donados por los empleados, como gesto de buena voluntad hacia el medio ambiente y la compañía. El objetivo de la contribución social de la GPIC se basa en el apoyo a las obras benéficas y a aquellos que cuentan con menos recursos, así como en la promoción de una cultura de la Seguridad, la Salud y el Medio Ambiente [Safety, Health and Environmental (SHE)] en la comunidad local. Los estudiantes constituyeron el primer objetivo; desde 1998, el personal de la GPIC ha dado charlas sobre SHE en varias escuelas. También se les invita a visitar los proyectos ambientales de la GPIC para reafirmar la concienciación en este aspecto.
El Proyecto de Investigación Ambiental, financiado en su totalidad por la GPIC y por el Ministerio de Educación permitió por primera vez a los estudiantes del reino de Bahrein que participasen en el debate ambiental. Se propone a todos los estudiantes que lleven a cabo una investigación ambiental, y el proyecto vencedor recibe un premio. Desde 1990, se reparten una vez al año mochilas con material de estudio para los estudiantes con pocos recursos y los hijos de los empleados. Las familias de los empleados y el público en general recibieron fuera del ámbito de la compañía la educación en seguridad y salud, mediante programas educativos y con el apoyo de los medios. 500 familias de empleados, mujeres y niños incluidos, participan en el concurso anual de SHE. A los ganadores se les premia en las celebraciones del Día Anual de la Seguridad. Además, los empleados, en el Centro de Salud de la GPIC, donan una vez al año al Banco Central de Sangre del Ministerio de Salud.
De media, la GPIC ha dedicado anualmente 380.000 dólares estadounidenses durantes los pasados seis años en concepto de contribución social. Además, se ha aprobado otra partida de 900.000 dólares para 2006. Con un futuro próspero, existe un gran compromiso al más alto nivel de la organización para continuar esta tendencia en el futuro. Nunca se ha recurrido a préstamos para estos fines.
La iniciativa de la GPIC ha beneficiado a todos los sectores sociales, especialmente las entidades caritativas, los minusválidos, los ancianos, aquellos con menos recursos y las mujeres. El 36% de los recursos se dedicaron a estos grupos. El 18% a educación, el 14% a Deportes, el 13% a Salud, el 12% a conferencias, el 5% al Programa de Protección Ambiental, exterior a la Compañía, y el 2% restante a otras causas valiosas. Así, el impacto social y económico perdurará para las generaciones venideras.
Alcanzar a varios sectores de la sociedad, en particular a los estudiantes, tendrá un impacto positivo a largo plazo en las actitudes y comportamientos relativos a la salud, la seguridad y el medio ambiente. Las distintas publicaciones de la GPIC, la cobertura mediática, la ayuda financiera y la implicación de las familias de los empleados en las actividades de SHE reforzarán sin duda la sostenibilidad cultural de las iniciativas.
Las cantidad y diversidad de proyectos ambientales puestos en marcha tienen un impacto directo en el medio ambiente local, las reservas piscícolas, la vida salvaje y las tradiciones. El santuario marino de 1,22 kilómetros cuadrados cuya ejecución está planeada para los próximos años será el más grande de Bahrein. En 2004 y 2005, la GPIC ganó el trofeo al mejor jardín del Reino en un recinto industrial.
La GPIC ha conseguido influir en la legislación local a través de su participación en varias instituciones profesionales nacionales e internacionales. La concesión del trofeo Sir George Earle, el galardón más prestigioso en Salud y Seguridad de la Royal Society for the Prevention of Accidents (RoSPA), por primera vez a una compañía no europea ni estadounidense, es la evidencia tangible de que el nivel alcanzado es comparable al de otras instituciones mundiales en la gestión de la SHE.
Como reconocimiento de la contribución de la GPIC en el campo de la SHE, la RoSPA lanzará en coordinación con ella, un premio a la salud, seguridad y medio ambiente que llevará el nombre histórico de Bahrain: el Trofeo Delmon. Esta iniciativa ha sido aprobada al más alto nivel en Bahrain. La GPIC patrocinará anualmente el premio, que deberá tener un perfil más alto que el Sir George Earle.
Las lecciones aprendidas más importantes son:
Las iniciativas y acciones de la GPIC prueban que la industria puede integrarse en armonía con el medio ambiente y la sociedad, respecto de las que es responsable. El negocio no es sólo generar beneficios; la inversión en la mejora del entorno en el que vive la sociedad y su bienestar revierte positivamente en la organización.
Las empresas rentables deben ser líderes a la hora de conservar el medio ambiente y elevar el nivel de vida a través de proyectos tangibles que afecten directamente a la vida de las personas. La GPIC ha señalado el camino para que otros lo sigan.
Debe haber un compromiso completo y sincero desde el nivel más alto de la compañía para conservar el medio ambiente en el que vivimos para las generaciones futuras. Las acciones de hoy no deben comprometer de ninguna manera las oportunidades de supervivencia de las generaciones venideras.
Una sola organización no puede hacerlo sola; aunque no hay protocolos oficiales para esta iniciativa, la colaboración de la GPIC con instituciones nacionales e internacionales produjo muchos más beneficios que si la hubiese llevado a cabo a solas. La utilización de recursos comunes en una situación beneficiosa para todos intensificó el proceso de aprendizaje de todos los implicados.
Aunque algunas organizaciones desarrollan algún tipo de programa socio-ambiental, la profundidad y dimensión del programa de la GPIC lo hacen único. En su justificación de la concesión del trofeo Sir George Earle a la GPIC, la RoSPA declaró que la Compañía de Bahrein de Industrias Petroquímicas del Golfo había resultado seleccionada como vencedora del trofeo Sir George Earle 2005 de la RoSPA en reconocimiento del nivel sobresaliente de compromiso y profesionalidad en la gestión de la salud y la seguridad en el trabajo.
Para reproducir la iniciativa de la GPIC, las organizaciones tienen que percibir el valor añadido que la inversión en el medio ambiente y en la sociedad implica para su negocio. Esta apreciación debe acompañarse de un alto nivel de compromiso sustentado con planes de acción que tengan en cuenta las necesidades ambientales y sociales. Los beneficios para el medio ambiente, la comunidad local y la propia organización son enormes.
Legislación y políticas relacionadas:
La buena prácica de la GPIC se ha apoyado en una ley aprobada en 2002 por la Comisión Pública para la Protección de los Recursos Marinos, el Medio Ambiente y la Vida Salvaje, que declaraba la franja costera al sureste del complejo de la GPIC como un Santuario Nacional para las Aves.
Adicionalmente, se han aprobado varias leyes sobre Seguridad, Salud y Medio Ambiente con la participación activa de la GPIC. Éstas son algunas:
Orden Ministerial número 10/1999 relativa a estándares ambientales para la calidad del agua y del aire, y sus consecuentes rectificaciones.
Orden Ministeria número 10/1999 relativa al control, importación y utilización de substancias químicas prohibidas y restringidas.
Borrador de ley sobre la gestión de aceites usados.
Borrador de ley sobre gestión de residuos tóxicos.
Como parte de su presupuesto anual, la GPIC destina fondos para los proyectos aquí descritos bajo los epígrafes Proyectos Ambientales y Contribución Social. La siguiente tabla ilustra las cantidades dedicadas a cada uno de estos dos campos. Las cantidades están en dólares estadounidenses.
Año | 2001 | 2002 | 2003 | 2004 | 2005 | Total |
Proyectos Ambientales | 720.045 | 36.775 | 307.201 | 357.817 | 185.460 | 1.607.298 |
Contribución Social | 162.700 | 409.000 | 200.530 | 507.711 | 1.025.931 | 1.792.595 |
Total | 882.745 | 445.775 | 507.731 | 537.711 | 1.025.931 | 3.399.893 |
Para 2006, el presupuesto aprobado para Proyectos Ambientales y para Contribución Social, es de 172.000 y de 900.000 dólares estadounidenses respectivamente.
1. Perfil del Ganador del Trofeo Sir George Earle 2005 - La GPIC de Bahrein. Fuente: RoSPA, reino Unido. Página Web: http://www.rospa.com/awards/winners2005/ultimate.htm
2. El Desarrollo de una Cultura Ambiental Sostenible a desde una Perspectiva Integrada de la Seguridad, la Salud y el Medio Ambiente - SHE -, el Caso de la GPIC. Autor: Maitham Al-Oraibi, The Arab Fertilizers Association Conference, Bahrain, 20 Abril 2005.
3. La Actitud de la Industria hacia la Contención del Avance de la Desertificación - La Contribución de la GPIC. Autor: Dr. Mustafa Al-Sayed, Primer Simposio Japón - Golfo sobre los Recursos Hídricos y la Desertificación, Bahrain, 18 Enero 2004.
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