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País/Estado -- Austria
Región según Naciones Unidas -- Europa
Región ecológica -- continental
Ámbito de la actuación -- metropolitana
Agentes -- sector privado (incluidas instituciones financieras, bancos, empresas de producción, comerciales y de información); organización no gubernamental (ONG); gobierno local; asociación de profesionales; institución académica o de investigación.Categorías -- Erradicación de la pobreza: generación de ingresos; creación de puestos de trabajo; formación profesional. Personas mayores: empleo. Equidad de género e inclusión social: necesidades por razón del género; características étnicas; integración.
Luetzowgasse 12-14 Vienna A-1140 Austria Tel: +43 1 982 16 47 Fax: +43 1 982 16 48E-mail: office@rusz.at
Einsiedlergasse 2 Vienna A-1050 Austria Tel: +43 1 588 17-9611 Fax: +43 1 588 17-9996128
Hollergasse 21 Vienna A-1150 Austria Tel: +43 1 89 174 14 Fax: +43 1 89 174 209Colaboración administrativa.
Weihburggasse 30 Vienna A-1010 Austria Tel: +43 1 51 525 311 Fax: +43 1 51 525 216Colaboración financiera.
Breughelstraat 31 Antwerp B-2018 Bélgica Tel: +32 32 810330 Fax: +32 32 8177330Colaboración técnica.
Deutschmeisterplatz 2 Viena A-1130 Austria Tel: +43 1 31393 Fax: +43 1 31393488Colaboración política.
Reichpietschufer 50 Berlin D-10785 Alemania Tel: +49 30 25491279 Fax: +49 30 25491299Colaboración técnica.
18, chemin Rieu Ginebra CH-1208 Suiza Tel: +41 22 3463932 Fax: +41 22 3472078Colaboración técnica.
Rottstrasse 3 Viena A-1140 Austria Tel: +43 1 9113552 Fax: +43 1 911355222Colaboración técnica.
Speisingerstrasse 19 Viena A-1130 Austria Tel: +43 1 8048467 Fax: +43 1 803323232Colaboración técnica.
Speisingerstrasse 19 Viena A-1130 Austria Tel: +43 1 804 846722 Fax: +43 1 803 323232Colaboración técnica.
Kinkgasse 7 Graz A-8020 Austria Tel: +43 316 712309 Fax: +43 316 7123099Participación en el desarrollo
El Servicio de Asistencia Técnica y Reparación RUSZ de Viena es un empresa de economía social que combina la reinserción de desempleados de larga duración mayores de 45 años (uno de las cuestiones más complicadas del mercado laboral), con los beneficios ecológicos de la reutilización y el reciclaje de equipos eléctricos y electrónicos de desecho que, de otra forma, acabarían en vertederos o en plantas incineradoras. De esta forma, se ha logrado una reducción de alrededor de 2.000 toneladas de nuevos residuos (de las 100.000 toneladas anuales que genera Austria en la actualidad, sólo de residuos eléctricos y electrónicos), al tiempo que el 71% de las personas que han recibido la formación inicial ofrecida por el programa se han integrado con éxito en el mercado de trabajo.
RUSZ ha despertado una demanda masiva de servicios de reparación, lo que ha supuesto un vertiginoso aumento de las empresas de este tipo existentes en la ciudad. Por otra parte, la comercialización de los productos reparados supone ya el 27% de sus ingresos.
En 2002, un equipo internacional de expertos, llegado a Viena para evaluar los logros de la ciudad en el marco del programa de Desarrollo Urbano Sostenible Europeo [European Sustainable Urban Development], describió RUSZ como:
«Un ejemplo de los beneficios al medio ambiente y a la economía que se puede lograr. Oportunidades como ésta deben ser explotadas más intensamente y extenderse. RUSZ proporciona un magnífico ejemplo válido a nivel internacional de cómo un proyecto económico puede tener beneficios ambientales y también sociales.»
Así pues, RUSZ combina objetivos sociales, económicos y ambientales, obteniendo hasta el momento unos resultados muy satisfactorios.
La experiencia se puso en marcha en 1998, desmantelando electrodomésticos usados en los Centros de Clasificación de Residuos de Viena y pronto amplió sus actividades convirtiéndose en la primera parada para la reparación de lavadoras y lavavajillas.
El proyecto trabaja con desempleados de larga duración y mayores de 45 años, una actividad que el mercado laboral necesita con urgencia. Los participantes reciben formación sobre reparación de aparatos eléctricos, de forma que, después de un año, obtienen una cualificación que les permite reincorporarse al mercado laboral. En 1998 había doce centros de formación y se reparaban o desmantelaban lavadoras, lavavajillas, secadoras y hornos. RUSZ ha despertado una demanda masiva por los servicios de reparación desde entonces y su oferta ha cambiado considerablemente.
RUSZ ha logrado recolocar al 71% de los desempleados que han pasado por sus programas de formación. Recibe fondos económicos del Servicio de Empleo Público de Viena, del Fondo Social Europeo y del Ayuntamiento de Viena.
El centro también trabaja en colaboración con diversos centros de enseñanaza para adultos de Viena, ofertando cursos de reparación de electrodomésticos. Estos cursos enseñan a los alumnos a realizar sus propias reparaciones caseras. La oferta de cursos se amplía en la misma medida que lo hacen las propias actividades de RUSZ, por ejemplo, a la reparación de equipos informáticos.
Los aparatos reparados se venden al público en general, aunque en primer lugar los destinatarios son familias con pocos recursos, que los adquieren a tarifas reducidas. Según se han ido ampliando las actividades de RUSZ, se han incluido reparaciones y contratos de servicios dirigidos al público general y a diversas organizaciones.
En 1998 la tasa de desempleo de personas mayores de cincuenta años era del 12,9% y las personas con menor formación se veían particularmente afectados, de manera que uno de cada cinco estaba desempleado. La tasa global de desempleo era del 8,7%, de los cuales casi la mitad se encontraban en una situación de desempleo de larga duración (por un período continuado superior a seis meses). Numerosos estudios sobre la situación laboral en Viena habían demostrado que el desempleo de larga duración comienza a aparecer una vez que se alcanza el grupo de edades entre 30 y 39 años y que es una amenaza importante a partir de los 50 años. Casi dos tercios de los desempleados registrados se encuentran en este rango de edades, según datos del Instituto de Estudios Avanzados de Viena Institut für Höhere Studien (IHS).
Con esta situación de inestabilidad laboral y dado que existía la posibilidad de acceder a las subvenciones ofrecidas por el Proyecto de Iniciativa Comunitaria de la Unión Europea, URBAN-Wien y Guertel Plus, era un momento propicio para crear una empresa de reparación. El concepto había sido desarrollado poco tiempo antes por el sindicato de trabajadores de empresas privadas y estaba basado en las recomendaciones extraídas del debate sobre la sostenibilidad. La estructura elegida para sostener el proyecto se basa en una empresa que fomente las iniciativas económicas de carácter social. En la actualidad esta empresa recibe subvenciones de la administración, de manera que financia la reincorporación de trabajadores temporales, su formación y la reinserción de un mayor porcentaje de trabajadores en el mercado laboral. En principio se espera que los trabajadores temporales no estén en esa situación más de un año. Los detalles organizativos están contenidos en un plan empresarial basado en los estudios del mercado laboral en Viena y en proyectos similares desarrollados en otros lugares fuera de Viena. El proyecto ha obtenido la aprobación del Comité para la educación y el desarrollo de la organización austriaca Arbeitsmarktservice (AMS) / Servicio de Mercado de Trabajo.
Teniendo en cuenta la naturaleza del problema y basándose en los estudios de mercado que se habían realizado, el director del RUSZ ha ideado una estrategia de «prolongación de la vida de los electrodomésticos». Gracias al nuevo sistema, consistente en alargar la vida de los electrodomésticos, las personas desempleadas mayores de 45 años han obtenido la oportunidad de trabajar con jornada intensiva en el sector de servicios y tienen acceso a un futuro prometedor. Este sistema no sólo previene el problema de la eliminación de residuos, sino que además cuida de recursos muy valiosos y genera puestos de trabajo para los grupos de edad más frágiles. Éste es un proyecto que genera un beneficio triple y que respeta los criterios de sostenibilidad ambiental.
El equipo directivo está formado por un director de gestión, un gestor comercial, un gestor técnico y un educador social. El año pasado, se unieron al equipo cuatro técnicos adicionales y un director de marketing. Inicialmente, los puestos de trabajo temporales de RUSZ iban a ser asignados directamente por AMS, desde donde se entrevistaría y seleccionaría a los candidatos. En la práctica, la mayoría de los trabajadores han solicitado el trabajo a RUSZ directamente. Esto se debe a la buena imagen del centro.
Dedicado en sus inicios al desmantelamiento de electrodomésticos usados en los Centros de Clasificación de Residuos de Viena, RUSZ pronto se convirtió en el centro de referencia para su reparación.
En los últimos tres años dos nuevos grupos de aparatos se han incorporado a la oferta de servicios del centro. Hace tres años se incorporaron los equipos de televisión, vídeo y música; hace un año, los equipos informáticos y sus periféricos, con el objetivo de cerrar la brecha digital y combatir el analfabetismo electrónico. La oferta de servicios incluye tanto la reparación de electrodomésticos traídos por los clientes como la recuperación de electrodomésticos viejos para su posterior venta a precios razonables. Los equipos informáticos de segunda mano van dirigidos principalmente a las personas con menos recursos, así como a proyectos sociales; todos ellos son compatibles con internet y se ofrecen en condiciones muy favorables.
Una vez que los instrumentos y los aparatos son reparados y funcionan adecuadamente se ponen en el mercado a precios asequibles, con mantenimiento a cargo del centro durante el periodo de garantía previamente acordado.
Por otra parte, RUSZ mantiene contratos de servicio de lavadoras y lavavajillas, especialmente con entidades públicas y semipúblicas. Al igual que los contratos de servicio de fotocopiadoras, estos contratos no cubren los aparatos en sí mismos, sino la continuidad del servicio; en caso de avería, el centro se compromete a reparar o sustituir el aparato en el plazo de dos días.
Los cursos de reparación de electrodomésticos (por ejemplo, lavadoras y lavavajillas) se ofrecen en colaboración con los centros de educación para adultos de la ciudad. Este año también se impartirán cursos sobre hardware para usuarios informáticos como respuesta a la demanda existente de formación para realizar reparaciones caseras.
Como empresa de economía social, RUSZ ha encontrado una estrategia que ofrece buenos resultados en la combinación de las necesidades más urgentes del mercado de trabajo (por ejemplo, la reinserción de los desempleados mayores de 45 años) con las actuales exigencias ambientales (sólo en Viena, 100.000 toneladas de residuos eléctricos y electrónicos, la mayoría sin someterse a ningún tratamiento, son incineradas o depositadas en vertederos cada día).
RUSZ se ha convertido en una empresa que centra su apuesta en desarrollar una economía social, que empezó con una oferta de 12 puestos de trabajo temporales y 3 indefinidos y que en la actualidad cuenta con 50 empleados con contrato indefinido. De hecho, el patrocinador de este centro es el Centro Vienés de Formación Continua, la institución municipal encargada de los centros de enseñanza para adultos.
En seis años de existencia, RUSZ ha recibido numerosos premios:
El RUSZ no promete la reinserción en el mercado laboral, pero lo ha convertido en uno de sus principales objetivos. Cada día varias personas procedentes de una media de seis países se reúnen para compartir sus experiencias de trabajo.
El RUSZ quiere demostrar que, incluso con las condiciones económicas actuales, la economía puede mejorar y moverse dentro de unos parámetros más ecológicos. Los contratos para el servicio de mantenimiento de lavandería y lavavajillas atraen a los propietarios de locales de servicio al público, que están más interesados en electrodomésticos que funcionen sin ningún error que en ser propietarios de uno. Mediante la utilización de piezas de recambio usadas, la tasa de reutilización de electrodomésticos ha aumentado enormemente. Instalar piezas nuevas con una esperanza de vida de doce años en aparatos que a lo sumo funcionaran tres años más es un derroche de recursos.
La meta última del proyecto es que los fabricantes continuasen siendo los dueños de sus electrodomésticos y que ganasen dinero a través de fórmulas de alquiler o contratos de arrendamiento, en lugar de hacerlo de la venta de productos de usar y tirar. Este objetivo no se ha alcanzado en absoluto, pero el desarrollo de una «sociedad de uso y reparación» ya es un paso en la dirección adecuada. El resultado final serán productos diseñados en función de parámetros ecológicos para que duren, se puedan reparar y tengan un mantenimiento sencillo.
Por otro lado, algunas plantas de recogida de basuras y algunas capitales de provincia han mostrado mucho interés en establecer un Centro de Reparación en su propia comunidad. En el sur de Austria se han establecido dos centros similares. El Ayuntamiento de Salzburgo está negociando actualmente con el director ejecutivo a este respecto.
El tamaño del área de acción del proyecto es un tema importante. No todas las pequeñas comunidades están en condiciones de crear una planta de recogida y un centro de reparación con la contratación de quince trabajadores temporales. Sin embargo la experiencia ha mostrado que un área de actuación de unos 50.000 habitantes es suficiente para que la iniciativa pueda realizarse.
No es necesario que el taller esté ubicado en una zona central. Sin embargo, es importante que las áreas públicas, como las salas de exposición y venta, estén bien situadas, principalmente porque también ejercen la función de recepción. El abastecimiento de materias primas, sobre todo de electrodomésticos procedentes de los vertederos es imprescindible. Antes de establecer un centro, es necesario negociar con estos depósitos con el fin de asegurar un abastecimiento permanente.
Finalmente, la cooperación con la industria eléctrica tiene sentido con el fin de garantizar que los electrodomésticos que han sido enviados al vertedero no van a sufrir ninguna avería innecesaria posteriormente.
Año | Presupuesto (Dólares EEUU) | VWV | WAF | AMW |
1998 | 450.000 | 10% | 40% | 40% |
1999 | 550.000 | 10% | 37% | 37% |
2000 | 700.000 | 10% | 37% | 37% |
2001 | 755.000 | 10% | 18% | 54% |
2002 | 1.300.000 | 8% | 0% | 70% |
2003 | 1.600.000 | 6% | - | 69% |
2004 | 1.900.000 | 5% | - | 70% |
VWV: Verband Wiener Volksbildung (Asociación Vienesa para la Educación)
WAF: Wiener ArbeitnehmerInnen Foerderungsfond (Fondo para la Promoción del Empleo en Viena)
AMW: Arbeitsmarktservice Wien (Servicio de Mercado Laboral de Viena)
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