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Buenas Prácticas > América Latina y el Caribe > Concurso Internacional 2000 > http://habitat.aq.upm.es/bpal/onu00/bp589.html

Proyecto "Los abuelos saben de todo" en Santos, Brasil

Fecha de referencia: 05-07-2000

Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 2000, y catalogada como GOOD. ( Best Practices Database.)
País/Country: Brasil
Región según Naciones Unidas: América Latina
Región ecológica: tropical y subtropical
Ámbito de la actuación: ciudad
Instituciones: gobierno central, gobierno local
Categorías = Servicios sociales: educación; salud y bienestar

Contacto principal:
Anamara Simoes Martins
Santos City Hall (Gobierno local)
Praça Mauá s/n - Centro - Santos - SP - Brasil
tel:(013) 210-5000
fax:(013) 219-1434

Organización nominadora

Socio:
Departamento de Ciudadanía y Acción Comunitaria
Prefectura de Santos (Gobierno local)
tel/fax: (013) 219-6769

Socio:
Departamento de Salud Urbana
Casa de la Mujer Embarazada
Maria Albertina Marques do Amaral Gonçalves
Av. Senador Dantas, 123
tel: (013) 235-1802
Colaboración técnica y administrativa


R E S U M E N

El proyecto "Los abuelos saben de todo" tiene como objetivo el que los niños y adolescentes aprendan a apreciar la experiencia que las personas mayores han adquirido a lo largo de sus vidas, fomentando así la transmisión de conocimientos y de habilidades, en un proceso de fortalecimiento cultural e intercambio intergeneracional. Además de permitir a las personas mayores la recuperación de su identidad social, se les proporciona un salario mínimo por las actividades realizadas; a los niños y adolescentes se les facilita un contacto más cercano con los mayores, dirigido al intercambio de experiencias vitales y al aprendizaje de habilidades.

A lo largo del proyecto ha sido necesario superar numerosas dificultades, tanto por parte de los mayores como de los niños y adolescentes: los abuelos que han colaborado han tenido la oportunidad de conocer de cerca la realidad de los niños a los que han ayudado en los Centros de Relaciones, niños que provienen de familias desestructuradas, con un bajo nivel social y cultural que, en algunos casos, se encuentran en situaciones de riesgo social y personal. Muchos de los ancianos, por su parte, han descubierto que son capaces de nuevas fuerzas a través de la transmisión de sus experiencias y conocimientos, y han podido recuperar su identidad social, perdida tras la jubilación. La formación y el fortalecimiento de vínculos afectivos entre los niños y el equipo de trabajo, así como el contacto entre generaciones, ha resultado muy productivo.

Los abuelos estimulan a los niños no sólo en cuanto al aprendizaje de habilidades: la mayoría ha conseguido buenos resultados en la transmisión de aprendizajes vitales y de respeto mutuo; la relación de los abuelos con los niños se ha producido en un clima de afecto, con lo que en muchos casos se ha recuperado el papel de los mayores en las familias. Los abuelos han detectado problemas visuales y neurológicos en algunos niños, que de esta manera han podido recibir tratamiento inmediato en los centros comunitarios. Además, se ha mejorado el nivel de ingresos de los abuelos, cuya pensión de jubilación media es de 78,02 dólares estadounidenses. También se ha observado entre los trabajadores del grupo una mayor solidaridad y compañerismo. Se preocupan los unos de los otros fuera del horario de trabajo, salen juntos y están muy unidos.



Fechas clave

11 de marzo de 1998: Se promulga la Ley 1663, con la puesta en marcha del Programa de Mayores y del Proyecto "Los abuelos saben de todo".
Agosto de 1998: inicio de los talleres.
Diciembre 1998: Evaluación del Grupo Piloto de Trabajadores.
Agosto de 1999: el proyecto resulta premiado en el Concurso Gestión Pública y Ciudadana de la Fundación Geté Vargas y Ford, con el apoyo del Banco Nacional de Desarrollo Económico Sostenible (BNDES).
6 de octubre de 1999: participación del grupo de abuelos en el V Encuentro de Ciudadanos Mayores de Santos.



D E S C R I P C I Ó N

Situación previa a la iniciativa

Con sus 412.241 habitantes, la ciudad de Santos es considerada por la ONU la ciudad de los jubilados y la número uno en calidad de vida de Brasil. El 14,5% de su población es mayor de 60 años, 59.775 personas en total, lo que representa más del doble de la media de personas de esa edad en el Estado de São Paulo. De ellos, el 8,5% cuenta con ingresos inferiores al salario mínimo, y el 11,5% ingresa entre la mitad y 1,5 veces el salario mínimo. La pensión de jubilación, un derecho garantizado a los trabajadores tras muchos años (de 30 a 35) de vida profesional, no siempre les tiene reservado una vida más fácil. Los jubilados y jubiladas cuentan con la ventaja de disponer de más tiempo para dedicarlo a sus intereses y capacidades, además de no tener que cumplir con horarios rígidos. Sin embargo, paralelamente a estas ventajas, la jubilación está asociada a una mayor precariedad de todo tipo: física, intelectual, social y económica. En esta situación, lo que más suele preocupar a los trabajadores es la disminución de los ingresos y la pérdida del status, del prestigio con que contaban entre las personas con quienes se relacionaban cuando trabajaban, lo que les supone una importante pérdida en su identidad social.

Establecimiento de prioridades

Debido a la gran cantidad de personas mayores residentes en la ciudad (14,5%) se ha elegido a aquellas personas de sesenta o más años, con ingresos inferiores a cinco veces el salario mínimo, dando prioridad a los que contaban con menos ingresos, a los que vivían en la ciudad y a los que tenían algún conocimiento específico que desearan transmitir. La selección de los inscritos se hizo después de una evaluación psicológica, para establecer el perfil del candidato o candidata y su adecuación al proyecto de trabajo y a sus requisitos.

Las personas mayores que se incribieron como voluntarios participaron también en todo el proceso, incluyendo la selección por edad e ingresos. El abuelo-colaborador recibe cierta preparación, coordinada por el equipo técnico, en la que se tratan los siguientes temas: el perfil de los niños, los adolescentes y los adultos implicados en el programa; la relación entre el educador y el alumno; el establecimienro de un acuerdo de relación con el grupo; la planificación del trabajo y la evaluación de los resultados.

Al principio, se estableció el objetivo de atender a sesenta abuelos, formados por etapas, de diez a veinte miembros cada vez, para disponer del tiempo suficiente para preparar la evaluación y la planificación de los grupos. El equipo técnico responsable del funcionamiento del proyecto (compuesto por un trabajador social, un pedagogo, un psicólogo y un mediador social) se encargó de establecer las prioridades.

Formulación de objetivos y estrategias

Debido al número particularmente alto de personas mayores que viven en Santos, y especialmente desde la creación del Departamento de Acción Comunitaria (hace diez años), la Prefectura de la ciudad se ha venido preocupando por la calidad de vida de los mayores, con programas en los que las propias personas mayores son los principales actores. Los proyectos y servicios implantados lo han sido a petición de los mayores y contando con su participación efectiva. Por tanto, los objetivos del programa "Los abuelos saben de todo", ideados por el alcalde y llevados a cabo por el equipo técnico, se han ido consiguiendo a lo largo de diez años de trabajo con las personas mayores, siempre con la participación efectiva de las mismas, y en constante re-evaluación.

Entre nuestros objetivos está la revalorización de las personas mayores mediante su contacto con niños y adolescentes, a quienes transmiten sus conocimientos en un proceso de fortalecimiento cultural e intercambio intergeneracional. De esta manera, los ancianos recuperan la identidad social perdida con la jubilación y se sienten valorados, tanto por sus conocimientos profesionales y artísticos, como por su experiencia vital.

Para los niños, los jóvenes y los adultos que participan en el programa, el objetivo es mantener un contacto más cercano con los ancianos, contacto que se ha ido perdiendo por el tipo de vida de la mayoría de las familias actuales, que bastante tienen con sus preocupaciones y cuyas viviendas, por lo general pequeñas, no les permiten tener con ellos a los abuelos. De este acercamiento resultarán, entre otras cosas, un intercambio de conocimientos, el establecimiento de un espacio para la educación y la creación de grupos donde se generen ingresos.

Movilización de recursos

Cuando se creó el programa de revalorización de los mayores "Los abuelos saben de todo", se destinaron 11.474,46 dólares estadounidenses para subvencionar el salario mínimo de doce abuelos-colaboradores durante un año. En lo que respecta al equipo técnico necesario para la implantación del proyecto, se pudo contar con el Departamento de Atención a los Mayores: un trabajador social y pedagogo, un psicólogo, un mediador social y un educador, con un coste anual de 37.251,86 dólares. El gasto destinado a los talleres se planificó en función de los recursos originados mediante un convenio con el gobierno estatal, unos 114,74 dólares mensuales; en suma, otros 13.769,36 dólares.

El local y el equipamiento, a excepción del ordenador, la impresora, la línea de teléfono y el material publicitario, con un valor de 13.769,36 dólares, fueron donados por el ayuntamiento de Santos. El coste total del proyecto ha sido de unos 59.093,51 dólares. La implantación de los talleres dependió de las asociaciones. Actualmente existen 49 talleres, repartidos entre los Centros Sociales de Mayores (5); los Centros Sociales de Juventud (16); las Brinquedotecas (Ludotecas) (2), el proyecto Nacer y Vivir (6); el Espacio para Chicas (3); la Compañía de Ingeniería de Tráfico (4); el Centro Comunitario de Vila Gilda (6); el proyecto Bienvenido a Santos (1); la Unidad de Producción Regional (3); el Centro de Mayores de Nova Esperança (2); y la Casa Abierta (1).

Los talleres funcionan mañana y tarde, de lunes a jueves, y los viernes hay reunión de seguimiento y evaluación con los coordinadores de proyecto. Este equipo es responsable del espacio físico y del material para la realización de los productos de los talleres y anticipan el dinero necesario, con cargo a los presupuestos de los departamentos responsables (de Ciudadanía y Acción Comunitaria, de Salud Urbana, de Tráfico, de Deporte y Turismo y de Educación). Estos departamentos han solicitado la incorporación de cuatro colaboradores del programa para que trabajen en las escuelas infantiles municipales.

Proceso

El proyecto "Los abuelos saben de todo" fue una idea original del actual Alcalde de Santos Beto Mansur, cuando aún era candidato a las elecciones municipales. La idea se presentó como una propuesta en el programa electoral y se hizo realidad en agosto de 1997, con la redacción del proyecto por parte de los técnicos del Departamento de Acción Comunitaria que trabajaban con personas mayores, y gracias a la promulgación de la Ley 1663 del 11 de marzo de 1998. Las fases clave de la implantación han sido: la inscripción de los abuelos que respondieron a la publicación del Proyecto en el periódico local y en el Boletín Oficial Municipal; se ofrecieron 109 candidatos con diversos conocimientos; de entre ellos, se seleccionó a 77 que cumplían los requisitos de admisión; al resto de candidatos se les animó a tomar parte en otros proyectos del departamento de Acción Comunitaria: el Centro Social, los grupos de creación de empleo, etc.

Simultáneamente se realizaron encuestas sobre los intereses de los niños y adolescentes de los colegios y los centros de juventud, tomando una muestra de 257 niños y adolescentes. Después se realizó una selección mediante una demostración práctica de los abuelos candidatos. Se organizó un grupo de evaluadores formado por personas con conocimientos sobre las habilidades a evaluar. Del primer grupo aprobaron 38 abuelos. De entre ellos, y en función de los intereses expresados por los niños y los adolescentes, se requirió a nueve que empezaran la preparación de los talleres, que consistía, además del conocimiento de la materia, en la planificación de los talleres, con la previsión de materiales, los costes y los instrumentos utilizados para el seguimiento y la evaluación. El rendimiento del primer grupo de colaboradores se consideró como referencia para futuras comparaciones, ya que no se contaba con ninguna experiencia anterior.

El primer grupo inició su actividad en un equipamiento municipal ya mencionado, el Centro Social, con el apoyo de una ONG, la Cruzada de Damas Católicas, debido a la peculiaridad del taller: elaboración de bocadillos a base de ingredientes naturales.

Todos los colaboradores trabajaban 20 horas diarias, repartidas entre 16 horas de talleres y cuatro horas de reuniones de seguimiento y evaluación por parte del grupo coordinador. Se realizaron 16 talleres a los que asistieron un total de 362 niños y adolescentes.

Evaluación del proyecto (Grupo piloto)
Durante cinco meses se evaluó el proyecto con los grupos de abuelos, niños y adolescentes, con los responsables de los locales donde tenían lugar los talleres y con los coordinadores. Mediante estas evaluaciones, se señalaron algunos aspectos que era necesario ajustar para una mejor realización del proyecto: los talleres con fines profesionales se dieron por imposibles, debido a la corta edad de los asistentes; se detectó la escasez de equipamientos, de lugares con una infraestructura adecuada para los talleres; se comprobó que la mayoría de las habilidades de los abuelos tenían relación con las manualidades (el 99% de los participantes eran mujeres); en las primeras encuestas, tanto los mayores como los niños se decidieron por una dedicación de 20 horas semanales, que posteriormente resultó ser demasiado para unos y otros. También se reveló poco factible la posibilidad de que los abuelos colaboradores trabajasen en más de un solo sitio, por problemas de transporte y de resistencia física. Finalmente, está el hecho de que el Departamento de Atención a los Mayores que coordina el proyecto, centraliza la compra y distribución del material utilizado en los proyectos; la dificultad que conlleva la planificación temporal del reparto con una furgoneta y la monitorización de los talleres, así como la falta de un ordenador donde almacenar y analizar los datos; la preparación de material de reciclaje para los talleres y la necesidad de un técnico más y de un mediador social más.

Entre los obstáculos que se encontraron, se pudieron superar los siguientes:


Aún no se han superado los obstáculos relacionados con la infraestructura: la falta de un ordenador con impresora, de material para publicidad y de disponibilidad de un vehículo, que deben solucionarse este año con la donación de un ordenador por parte de SEAC (el ayuntamiento de Santos), una oferta de contratación de empleados y la compra o alquiler de un vehículo, con el objetivo de ofrecer otros servicios a los ancianos.

El proyecto ha contado con una buena aceptación por parte de las personas mayores, que han mostrado su aprobación en los medios de comunicación y en los seminarios y encuentros llevados a cabo por las organizaciones, tanto gubernamentales como no gubernamentales (SESC, SESI, grupos sociales) que se dedican a ayudar a los mayores. Los talleres gratuitos llevados a cabo en eventos como la Semana de la Mujer, la Acción en Servicio, el Año Internacional de los Mayores, etc, son siempre bien recibidos por la comunidad, que participa en buen número. Los asociados han ido aumentando día a día, debido principalmente al buen trabajo de los abuelos en los talleres existentes y al esfuerzo del equipo de coordinación, que ha intensificado su actuación en el debate con los abuelos sobre la educación en valores, además de supervisar el funcionamiento de los talleres y de ofrecer orientación grupal e individual.

Resultados obtenidos

Los objetivos propuestos se han ido alcanzando de forma gradual; las evaluaciones se realizan a lo largo del proceso con la participación de todos los implicados: niños y adolescentes, administradores de servicios, y equipo de coordinación, utilizando para ello instrumentos que miden la asistencia, el interés motivado y los cambios en el comportamiento de los participantes y los colaboradores. En las reuniones de los viernes, los mayores relatan mediante dinámicas diversas el día a día de los talleres, valorando el comportamiento de los niños y el suyo propio. Se han formado grupos de debate y reflexión entre los abuelos, y la coordinadora elabora un documento en el que se valora el rendimiento de los abuelos-colaboradores y de los niños participantes en los talleres. La evaluación anual consiste en una síntesis de las realizadas a lo largo de todo el año.

La evaluación es una de las fases más importantes del proceso, pues establece los fundamentos para la colaboración entre los abuelos y la organización, así como la posible re-orientación del proyecto, y el funcionamiento con los demás socios. En términos cuantitativos, los resultados se miden según los siguientes indicadores:

En el caso de los niños, adolescentes o adultos:


Respecto a los abuelos-colaboradores, los indicadores son:


El Departamento de Atención a los Mayores es el encargado de recoger los datos, elaborarlos y evaluar el trabajo. En 1999, 16 abuelos colaboraron con el programa, por lo que obtuvieron un sueldo de 78 dólares estadounidenses; hasta 720 niños, adolescentes y adultos recibieron orientación y formación en los diversos talleres de jardinería, ikebana, carpintería, tapicería, cuenta cuentos, manualidades con papel de periódico, corte y confección, pintura sobre tela, bordado vagonite, punto de cruz, krill screen, bordado de Madeira, punto de media, manualidades y turismo. Los talleres con más éxito entre los niños han sido:

Para los niños y adolescentes necesitados, la importancia de aprender que el trabajo es un valor humano fundamental, más allá de una forma de afrontar la pobreza, les abre una nueva perspectiva en la construcción de nuevas relaciones. El trabajo como valor es independiente de la edad considerada "económicamente activa" y puede dar lugar a nuevas tendencias sociales, menos discriminatorias y más igualitarias. Por tanto, el fomento de la co-educación intergeneracional se ha tenido por uno de los mayores progresos o conquistas del proyecto.

Basada en el afecto, la relación entre los niños y los abuelos se va estrechando; hablan con gestos y palabras en un lenguaje dirigido al corazón. Los espacios para charlar previstos en los talleres son de gran importancia, pues en ellos se mantiene y se renueva la comunicación, estrechando los lazos afectivos entre los participantes.

Los abuelos y los niños ocupan y viven estos espacios de manera que las diferencias convergen hacia la posibilidad de convertirse en influencias recíprocas. A los mayores les confiere la condición de representantes del pasado en el presente, y gracias a su memoria pueden ofrecer a los jóvenes, de forma oral o a través de los talleres, una cultura de valores. Actualmente se desarrollam 58 talleres en los que participan 720 personas. Además de los talleres ya mencionados, se han iniciado talleres para la fabricación de muñecas de punto y de plástico, confección de monederos, así como el taller dirigido por dos abuelas que trabajan con niños y adolescentes en las clases de educación vial. Cabe mencionar también a los voluntarios, seis deportistas veteranos, algunos de ellos de prestigio, que imparten su experiencia en las Pequeñas Escuelas de Deporte.

El Proyecto "Los abuelos saben de todo" está colaborando en la mejora de la calidad de vida de los abuelos participantes, no sólo en cuanto al aumento de sus ingresos en un salario mínimo, sino en lo referente al aumento de su autoestima; la recuperación de su papel en la sociedad; la sensación de sentirse útil; la vivencia de nuevas prácticas; la integración de su historia vital; en resumen: la capacidad de retomar su vida, dejando atrás la condición de seres relegados, mediante la construcción de nuevas relaciones afectivas y de igualdad. Gracias a este proyecto, el número de los asociados ha aumentado y se ha establecido una mejor coordinación entre los diversos departamentos municipales. Por otro lado, la comunidad empieza a modificar su comportamiento, a ver a los ancianos con otros ojos, valorando su experiencia vital y la contribución que han realizado a su sociedad. Los abuelos colaboradores han participado en los debates llevados a cabo sobre el papel de los ancianos en la sociedad actual, tomando parte en las pre-conferencias y conferencias dedicadas a cuestiones sociales.

Sostenibilidad

La integración de los recursos para el mantenimiento del proyecto se realiza día a día, como parte del proceso operativo: reuniones de debate sobre el proyecto; evaluación del trabajo de los abuelos colaboradores; receptividad por parte de los niños, adolescentes y adultos en los talleres; modificaciones de acuerdo con las evaluaciones, y monitorización de los espacios donde se realizan los talleres. Todo contribuye a la integración entre los miembros.

En cuanto a los recursos financieros, la ley que dió cobertura legal al programa sólo ha previsto recursos económicos para el pago a los abuelos colaboradores. En el desarrollo del proyecto durante el presente año, se cuenta con la instalación del "Taller de abuelos" dentro de la "República del Buen Vivir", un proyecto de alojamiento para ancianos en el que se pretende desarrollar talleres de música, manicura y pintura en vidrio, con el fin de hacerse visible para la comunidad en la que se sitúa. Además se ha previsto la adquisición de una televisión, un vídeo, una video-cámara, un equipo de sonido y un casette para grabar el desarrollo del proyecto, de modo que hace falta recursos para comprar el equipo y el material de trabajo.

También se ha anunciado el establecimiento de nuevos talleres de jardinería, costura y otros temas de interés para el público del programa. La inclusión social de los abuelos colaboradores y de los niños a los que el programa ofrece su ayuda, resulta revalorizada por el trabajo que se realiza. Los Centros de Relaciones son un lugar para la venta de lo producido en los talleres; uno de los objetivos del proyecto para el año 2000 es la construcción de un lugar para la comercialización de los productos manufacturados en los talleres, y cuyos beneficios irán a los propios niños. Desde el punto de vista cultural, se observa un cambio en la actitud de los pequeños en lo que se refiere al respeto y la consideración que muestran hacia los ancianos, influidos por el trato que mantienen con los abuelos colaboradores.

Lecciones aprendidas
Después de un año y medio de desarrollo del proyecto, se han aprendido tres lecciones:

  1. Que la co-educación entre personas mayores, niños y adolescentes es posible en un espacio informal. Se aprende conociendo a otras personas y de la experiencia de los demás.
    Los menores desarrollan habilidades y aprenden técnicas, mientras que los mayores establecen relaciones de afecto e igualdad, en una nueva fase de su vida.
  2. Que es necesario invertir en proyectos intergeneracionales, promovidos desde políticas públicas, en los que las personas sean consideradas en un contexto familiar, y no aisladamente, agrupándolas por edad, sexo o por grupos conflictivos.
    Los ancianos de la ciudad que tomaron parte en la 2. Conferencia Municipal sobre Personas Mayores decidieron la aprobación, entre otras medidas, de la Política Municipal para Personas Mayores y el establecimiento de otros proyectos intergeneracionales, que reforzaran la posición conseguida por los mayores en la ciudad.
  3. Que la Educación en Valores puede ser una salida a la crisis que está atravesando el mundo, caracterizada por la inquietud, la incertidumbre y la falta de paz. En la mayoría de los países predomina la ideología materialista, que produce ciudadanos obsesionados por la acumulación, la propiedad, el egoísmo y la avaricia. Los valores auténticos pierden el brillo de la verdad y la fuerza para conservar una cultura digna del ser humano.
Las actitudes negativas y la violencia que estimulan los medios, la desintegración familiar, las diferencias sociales... son algunos de los resultados visibles de una época contaminada por la inversión de los valores. Todos estos indicios apuntan a que tenemos que cambiar nuestra actitud, recuperando los valores auténticos. La familia, los amigos, los medios de comunicación, etc. proporcionan a los niños y adolescentes informaciones contradictorias, presentando una imagen de la juventud fragmentada y desoladora. Por otro lado, las instituciones encuentran dificultades a la hora de orientar a los ciudadanos, en su tarea de reordenar todas las piezas de este gigantesco rompecabezas. Es necesario encontrar elementos unificadores.

Tanto el niño como el adolescente se encuentran en un proceso de transformación gradual durante su periodo de crecimiento. Es un momento en el que el contacto diario con valores positivos resulta esencial. Es importante que se les oriente para que sean capaces de evaluar sus deseos y dudas. Con la incorporación de los valores de un modo informal, en los talleres del proyecto, se contribuye al autoconocimiento de los niños y adolescentes y al cambio en sus relaciones, con vistas a una sociedad más unificada, capaz de conservar los valores auténticos.

El Proyecto de Valoración de las Personas Mayores o Proyecto "Los abuelos saben de todo" inició su actividad en agosto de 1998, con un grupo piloto de abuelos colaboradores. Se trata de una experiencia sin precedentes, pues no se ha encontrado ninguna referencia teórica ni ninguna experiencia similar con un trabajo sistemático y una evaluación eficaz como en este caso. Los participantes que se han beneficiado del programa, aprendiendo con la experiencia, han sido los abuelos colaboradores, los niños, adolescentes y adultos asistentes a los talleres, así como los socios y el propio equipo de coordinación. El proyecto ha fomentado la asociación entre generaciones, favoreciendo el intercambio efectivo de experiencia, valorando el conocimiento y la importancia de las personas de edad, y promoviendo el aprendizaje tanto de técnicas como de valores.

El comportamiento de los abuelos colaboradores ha ido evolucionando positivamente, y se ha podido observar una mayor solidaridad entre los miembros del grupo, la ayuda mutua en caso de enfermedad u otros problemas entre los abuelos, el aumento de la autoestima y la mejora en los ingresos personales y/o familiares. Igualmente, se ha observado una mejora en el comportamiento de los niños y adolescentes. El Proyecto cuenta aún solamente con un año y siete meses de vida, y aunque ha salido en los medios, su repercusión es aún muy pequeña. Hemos recibido peticiones por parte de los gobiernos locales de Florianais, en el estado de Santa Catarina, y del municipio de Catanduva, en el estado de São Paulo, para que se envíen copias del proyecto, así como otros documentos que puedan ayudarles en la implantación del proyecto en sus ciudades. Sin embargo, aún no se han recibido noticias sobre la aplicación del proyecto.

Transferibilidad

En caso de implantar el proyecto "Los abuelos saben de todo" en otras ciudades, o si se tuviera la oportunidad de colaborar con otros ayuntamientos en su implantación, se seguiría el mismo proceso desarrollado en Santos. Como primer paso, se procedería a la realización de un estudio sobre la situación de las personas mayores en la ciudad, así como sobre la relación existente entre los abuelos y las familias, y los abuelos con los niños y los adolescentes. En este proceso se incluiría a todas las instituciones gubernamentales y organizaciones no gubernamentales que trabajan con mayores, incorporando a niños y adolescentes en el desarrollo del proyecto, y con ellas se estudiaría la posible aplicación del programa en la ciudad.

Como parte de este debate con las organizaciones, se establecerían los objetivos a alcanzar con respecto a las personas mayores, los niños y los adolescentes; las actividades a realizar; las características que han de tener los abuelos colaboradores; las características de los niños y adolescentes a quienes se dirigen los talleres; el tipo de actividades que interesan a los niños; el sistema de inscripción y selección de los abuelos; la formación que necesitan los abuelos para poner en marcha los talleres; la planificación de los talleres (objetivos, actividades y material de trabajo), así como el personal necesario para la coordinación, el seguimiento y la creación de asociaciones. Una vez iniciados los talleres, se estudiaría el sistema de evaluación, control y monitorización de los mismos, así como la formación continuada de los abuelos, el debate y reflexión permanente acerca de las dificultades encontradas en la relación con los niños; la introducción de la educación en valores de manera informal, con el objetivo de afianzar, tanto en los abuelos como el los niños, los valores universales de la paz, el respeto por la vida, la solidaridad, la dignidad, el amor, la responsabilidad, la cooperación y la alegría, entre otros.

El éxito del proyecto se basa en las siguientes premisas:

Perfil financiero
Año Presupuesto total (Dólares EEUU) Socio A Socio B Socio C Socio D
1998 59.627.- - - - -
1999 79.771.- 8,3% 8,3% 8,3% 8,3%
2000 108.967.- 6.3% 6,3% 6,3% 6,3%


Este documento se ha editado a partir de una versión inglés.

Traducido por María Cifuentes.

Revisado por Carlos Verdaguer.

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