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Fecha de referencia: 05-07-2000
Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 2000, y catalogada como GOOD.
(
Best Practices Database.)
País/Country: Brasil
Región según Naciones Unidas: América Latina
Región ecológica: tropical y subtropical
Ámbito de la actuación: nacional
Instituciones: paraestatal, gobierno local, organización no
gubernamental (ONG)
Categorías = Modelos de producción y consumo: concienciación del
consumidor; eficiencia en el uso de la energía, eficiencia
energética; responsabilidad de los productores; ciclos de
producción y consumo, reciclaje y reutilización de recursos.
Gestión ambiental: sostenibilidad ecológica; higiene ambiental;
reducción de la contaminación; gestión de recursos; creación de
zonas verdes en la ciudad, introducción de criterios ecológicos
en el entorno urbano. Vivienda: acceso a la financiación de la
vivienda; vivienda asequible; industria de la construcción;
diseño eco-lógico; carencia de hogar, personas sin hogar.
Contacto principal:
Leandro Agostinho Kroth
Prefeitura Municipal de Santa Cruz do Sul (órgano
paraestatal)
Borges de Medeiros, 650
Santa Cruz do Sul
Rio Grande do Sul - 96810-130
Brasil
Teléfono: 051-7152422 / 051-7131859
E-mail: cpd@pmscs.rs.gov.br
Organización nominadora:
Secretaria de Habitação, conservação e Segurança do Municipio
de Santa Cruz do Sul
Socio:
Poder Judiciáro
Julio Cesar Medina
Borges de Medeiros, 872
Santa Cruz do Sul
Rio Grande do Sul - 96810-130
Brasil
Colaboración administrativa.
Socio:
Superintendência de Serviços Peninteciários (SUSEPE)
Joel Lopes de Oliveira
8a. Oficina Penintenciaria Regional
Galvão Costa, 128
Santa Cruz do Sul
Rio Grande do Sul - 96810-170
Brasil
Colaboración administrativa.
Socio:
Instituto Humanitas (organización no gubernamental)
Cizo de Lima
BR 471
Vale do Nazaré
Santa Cruz do Sul
Rio Grande do Sul - 96800
Brasil
http://www.ifab.org.br
Colaboración técnica.
El proyecto João-de-Barro - "Bom-Plac" consiste en un sistema
ecológico de viviendas construidas en el marco de una
cooperativa, a través del cual la gente tiene la posibilidad de
acceder a una vivienda alternativa y apropiada. El producto final
es una vivienda construida con una mezcla de los materiales
disponibles y goma reciclada a partir de neumáticos usados. Todo
ello contribuye a la reducción de la contaminación ambiental, la
mejora de la salud pública y el aprovechamiento de los recursos
naturales.
Reclusos condenados por delitos menores proporcionan la mano de
obra necesaria para la construcción de soportes y paneles. Este
sistema permite a los presos realizar una contribución positiva
a la sociedad, tener la posibilidad de obtener unos ingresos y
reducir al mismo tiempo su condena. El objetivo es lograr la
rehabilitación de los reclusos y su posterior reintegración a la
comunidad. En paralelo, el proyecto también integra a
instituciones educativas que rehabilitan a jóvenes de la calle.
El principal beneficio para el medio ambiente se consigue por
medio de la utilización exclusiva de materiales naturales y goma
reciclada a partir de neumáticos usados.
Situación previa a la iniciativa
La región donde se ha puesto en marcha el programa "Bom-Plac"
sufre un importante déficit de viviendas. Los materiales de
construcción convencionales resultaban demasiado caros para que
las familias de rentas más humildes pudieran optar a una vivienda
digna.
Establecimiento de prioridades
Era necesario un proyecto innovador, con una búsqueda de
alternativas que permitieran superar los límites que planteaba
la construcción convecional. Cualquier propuesta debía contar con
la implicación de las familias interesadas y buscar una fórmula
que permitiera reducir el precio de la mano de obra; el sistema
de cooperativas resultó el más adecuado para responder a estos
retos. En paralelo a esta reducción de los costes, se planteó la
utilización de materiales alternativos a los convencionales y que
pudieran integrarse con la goma reciclada. El resultado fue la
introducción en el mercado de un nuevo material de construcción,
operación que requirió la participación de socios industriales
para su fabricación. Miembros del Consejo Habitacional del
Condado, líderes religiosos y profesionales del sector
colaboraron en el proyecto.
El proyecto "Bom-Plac" supone una alternativa desarrollada a
partir de un enfoque global del proceso de construcción de
viviendas. El objetivo es entregar viviendas de bajo coste, sin
ninguna condición añadida, a familias que no disponen de un
cobijo digno. Por otro lado, el Programa de Educación Social
busca promover la concienciación ciudadana a través de la
integración y el abandono de la marginalidad: la conciencia
ciudadana proporciona dignidad.
Todo este programa nace de los intentos de la administración
local de resolver el problema de la vivienda a través de
alternativas viables. La secretaria municipal de vivienda y sus
técnicos son los responsables últimos de este proyecto. Después
del proyecto inicial se estableció un marco de colaboración para
continuar con el programa. Se diseñaron varios prototipos antes
de decidir el modelo definitivo. Gracias al establecimiento de
cooperativas con la colaboración de las familias beneficiadas,
los costes de producción se redujeron notablemente. Dentro de
este enfoque global también se integró en el proyecto la
protección del medio ambiente, en cuanto que se decidió utilizar
productos y materiales reciclados, concretamente goma reciclada
a partir de neumáticos usados, evitando la acumulación
incontrolada de residuos.
Una vez seleccionada la zona donde se iban a implantar las
viviendas y desarrollado el prototipo, era necesario encontrar
socios que colaboraran en la construcción. El Departamento de
Justicia pidió permiso para que los reclusos trabajaran en la
fabricación de los paneles y soportes de las viviendas; esta
estrategia permitió una reducción del coste de la mano de obra,
lo que, unido al coste nulo de los neumáticos y al trabajo
cooperativo de las familias, permitió la viabilidad económica del
proyecto. Otra de las medidas adoptadas fue dedicar un porcentaje
de los recursos financieros del municipio al Fondo Municipal para
la Vivienda con el fin de financiar la construcción de viviendas.
También se pidieron créditos a entidades bancarias de ámbito
nacional.
Los profesionales del Departamento Municipal de Planificación y
Coordinación se hicieron cargo de los aspectos técnicos del
proyecto; para lograrlo, recurrieron a la colaboración de
diversos Institutos Técnicos.
Para poder llevar a cabo el proyecto se tuvo que crear un marco
legal apropiado y recurrir a mano de obra compuesta por reclusos,
adolescentes de la calle y familias en régimen de cooperativa.
A lo largo del desarrollo del proyecto surgieron varios
obstáculos para los que se estudiaron diversas alternativas.
Encontrar la composición exacta de los paneles fue un largo
proceso en el que se probaron numerosas combinaciones hasta
decidirse por los desechos de goma. Otro problema técnico
consistió en el diseño de una junta estanca entre los paneles.
Los soportes de madera previstos inicialmente fueron sustituidos
por otros de hormigón a causa de su importancia estructural. La
sustitución de las paretes metálicas del tejado por entramados
de madera permitió reducir el coste y aumentar la vida útil,
limitada por la corrosión de los elementos metálicos; en
cualquier caso, éste era un elemento de alto coste y difícil de
sustituir en la vivienda. Los bloques de hormigón previstos
fueron sustituidos por vigas prefabricadas de hormigón para dotar
de mayor seguridad y estabilidad. Todo esto permitió un montaje
más rápido y sencillo. La construcción a base de pernos de los
soportes premitió conseguir una mayor resistencia y un
significativo ahorro en mano de obra.
El proyecto recibió la aprobación de la comunidad, bien porque
los interesados habían obtenido información sobre el programa o
bien porque no preveían ninguna otra alternativa para conseguir
una vivienda. Diversas instituciones y organizaciones se
incorporaron al Consejo Habitacional (COMHAB), que
reúne a representantes de diferentes barrios del municipio, de
los profesionales del sector y del gobierno y de las autoridades
judiciales; por otra parte, los criterios, reglas y normas que
debían cumplir los proyectos de viviendas estaban regulados por
la legislación local. Todos estos elementos permitían ampliar el
campo de actuación del programa más allá del problema de la
vivienda, enfrentándose a cuestiones sociales.
Las familias beneficiadas por el programa de viviendas procedían
de zonas del municipio donde no estaba permitida la construcción
de viviendas por carecer de las infraestructuras necesarias, como
el tratamiento de aguas residuales, y donde no existían las
mínimas condiciones de vida. Con la mejora en las condiciones
ambientales, y especialmente del sistema de tratamiento de aguas
residuales, se pudo crear un entorno urbano más limpio, con más
zonas verdes y recogida selectiva de basuras. El índice de
mortalidad infantil descendió en apenas un año desde el 22 al 11
por mil. El nuevo entorno facilitó una mejor convivencia
comunitaria proporcionando un mayor nivel de seguridad ciudadana.
Gracias a su calidad constructiva, la gente comenzó a mostrarse
orgullosa de su vivienda y a mejorar su imagen frente a la
comunidad; fue una forma de despertar el sentido de ciudadanía.
La propia viabilidad del proyecto permitió una integración activa
de todos los implicados en las diferentes fases del proyecto: los
responsables municipales de la legislación, los organismos
encargados de recaudar recursos financieros y los responsables
de la coordinación de las diferentes fases.
El proyecto se presentó en el congreso estatal sobre la vivienda,
donde estaban presentes representantes de numerosos municipios.
Esta presentación propició la discusión de otras alternativas
para resolver el problema de la vivienda. De esta forma se pudo
ver que es posible encontrar soluciones respetuosas con el medio
ambiente; hay proyectos alternativos y sostenibles, sólo son
necesarios interés y creatividad.
Con la difusión del programa en los medios de comunicación,
numerosas instituciones públicas y privadas, del mismo estado y
de otras zonas del país y del extranjero, mostraron su interés.
La utilización de goma procedente de neumáticos usados en la
fabricación de paneles de construcción les pareció muy
interesante de cara al desarrollo de proyectos similares en
diversas localidades.
El sistema original no implicaba la participación del propietario
en el montaje de la vivienda; sin embargo el programa "Bom-Plac"
supone un importante ahorro en mano de obra gracias a que las
partes prefabricadas son elaboradas por reclusos mientras que el
montaje lo realizan los propietarios de las viviendas. Este
proceso presentaba dos nuevas facetas: por un lado cambiaba la
relación entre el propietario y su vivienda; por otra parte, el
trabajo de los reclusos en favor de la comunidad facilitaba su
reintegración social. Sin embargo, existían barreras legales que
requerían cambios en la legislación para afrontar la expansión
del programa a nivel estatal o incluso nacional; por otro lado,
al tratarse de una técnica novedosa, los bancos exigían ciertas
restricciones y garantías antes de aprobar cualquier préstamo.
Uno de los efectos reseñables que ha tenido esta nueva tecnología
es la concienciación sobre los recursos naturales no renovables:
la reducción del consumo como medio para reducir los residuos y
el reciclaje como forma de reducir la contaminación ambiental y
como alternativa rentable socialmente. Las nuevas tecnologías son
más fácilmente aceptadas con este nuevo punto de vista.
Sostenibilidad
Desde el punto de vista financiero, el Fondo Municipal garantiza
el desarrollo del programa "Bom-Plac". Tanto las garantías que
puede ofrecer la Caixa Econômica Federal, socio del
programa, como la donación de la goma usada por parte de las
industrias que trabajan con neumáticos también contribuyen a su
viabilidad económica. Los gastos de adquisición de suelo y
urbanización se reparten entre la Caixa Econômica Federal y las
autoridades municipales; el adjudicatario de la vivienda debe
hacerse cargo del coste de los materiales de construcción junto
a la propia Caixa Econômica Federal.
Desde el punto de vista social y económico, existen unos
criterios basados en la legislación vigente para definir los
colectivos que pueden acogerse a este programa: familias,
ancianos, personas con discapacidades psíquicas o
psicopatológicas, personas con ingresos hasta dos veces el
salario base o entre dos y cinco veces el salario base, y
personas que viven en zonas de riesgo.
Desde el punto de vista cultural, el Programa de Educación Social
pretende recuprar el potencial cultural del individuo, en la
búsqueda de un nuevo patrón de comportamiento que permita una
reintegración social de las personas y su plena incorporación a
la comunidad. En el caso de los recluso, el objetivo es recuperar
su interés por reintegrarse en la sociedad, insertándoles en un
proceso global que les permita ser útiles a la comunidad.
Desde el punto de vista ambiental, el proyecto "Bom-Plac" ha
superado los estándares convencionales de la construcción al
utilizar materiales reciclados, goma procedente de neumáticos
usados, reduciendo el consumo de recursos minerales en forma de
grava y arena. Con esta técnica, los paneles, además de resultar
menos perjudiciales para el medio ambiente, son más ligeros de
lo habitual, permitiendo un montaje más rápido, sencillo y
seguro.
Lecciones aprendidas
El modelo definitivo se obtuvo después de numerosas pruebas
experimentales. Este proceso de desarrollo del sistema estuvo
encaminado a reducir los costes de producción y el precio final
de la vivienda, buscando siempre una alternativa que permitiese
una construcción rápida. Precisamente, la utilización de un
sistema de elementos prefabricados, permitió la fabricación de
las diferentes piezas de forma paralela, reduciendo el plazo de
conclusión de la obra. Por otra parte, la utilización de
materiales reciclados, que de otra forma habrían terminado en
vertederos, garantizaba la calidad ambiental del proyecto. Esta
transformación de los residuos en materiales útiles se realizaba
a través de un sistema muy sencillo, sin necesidad de utilizar
maquinaria costosa o sofisticada, por lo que no se requerían
grandes inversiones tecnológicas.
La presentación del proyecto en el Congreso Estatal de Vivienda
y en la Comisión Legislativa Estatal, provocó una gran demanda
informativa. Aunque no existía la legislación que hubiera
permitido la aplicación del proyecto en otras localidades, las
autoridades municipales describieron por escrito, de forma clara
y concisa, todas las fases y los procedimientos que habían
llevado a cabo las instituciones participantes en el programa.
Perfil financiero
Año | Presupuesto | Socio 1 | Socio 2 | Socio 3 | Socio 4 |
1997 | 44.457 | 96,40% | - | - | 3,60% |
1998 | 79.713 | 64,52% | 31,72% | - | 3,76% |
1999 | 259.143 | 70,78% | 4,13% | 23,15% | 1,94% |
Referencias
Buenas Prácticas > América Latina y el Caribe > Concurso Internacional 2000 > http://habitat.aq.upm.es/bpal/onu00/bp478.html |