Sociedad cooperativa de productores de ladrillos de Shambob, Kassala (Sudán)

Fecha de referencia: 05-07-2000

Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 2000, y catalogada como Award. ( Best Practices Database.)
País/Country: Sudán
Región según Naciones Unidas: Estados Árabes
Región ecológica: árida y semiárida
Ámbito de la actuación: provincial/estatal
Categorías = organización de base comunitaria, organización no gubernamental, agencia internacional.

Categorías = Tecnologías, instrumentos y métodos: tecnologías apropiadas; investigación y desarrollo; soporte lógico; transferencia de tecnologías; formación y capacitación. Erradicación de la pobreza: acceso a créditos; generación de ingresos; formación profesional. Desarrollo económico: oportunidades para la cooperación; creación de empresas (sectores formal e informal); capacidad empresarial; microcréditos; formación.

Contacto principal:
Jeremiah Turic Bairiak, coordinador del programa del este de Sudán.
Intermediate Technology Development Group (ITDG)
Almarghania
Kassala
Sudán
Teléfono: 249 411 22699
Fax: 249 11 472002

Organización nominadora:
Intermediate Technology Development Group
Theo Schilderman
Schumacher Centre for Technology & Development
Bourton Hall
Bourton-on-Dunsmore
CV23 9QZ
Reino Unido
Teléfono: 44 1788 661100
Fax: 44 1788 661101
E-mail: theos@itdg.org.uk

Socio:
Shambob Brick Producers Co-operative (SBPCOOP) - organización de base comunitaria.
Jeremiah Turic Bairiak
Almarghania
Kassala
Sudán
Teléfono: 249 411 22699
Fax: 249 11 472002
Colaboración financiera.

Socio:
ITDG Sudán (ONG)
P.O.Box 4172
Khartoum Central, 1114
Sudán
Colaboración técnica.

Socio:
Intermediate Technology Development Group (agencia internacional)
Theo Schilderman
Schumacher Centre for Technology & Development
Bourton Hall
Bourton-on-Dunsmore
CV23 9QZ
Reino Unido
Teléfono: 44 1788 661100
Fax: 44 1788 661101
E-mail: theos@itdg.org.uk
Colaboración financiera

Socio:
Social and Investment Bank (Banco Social de Inversión), sucursal en Kassala del Sudan Bank.
Colaboración financiera.

GATE/GTZ (agencia de cooperación del gobierno federal alemán)
Dag Hammerskjoldweg 1-5, D
65726 Eschborn, Alemania.

Comission of the European Communities (Comisión Europea)
Rue de la Loi 200, B1049
Bruxelles, Bélgica.
Colaboración financiera.

R E S U M E N

A lo largo de los últimos tres años, 115 fabricantes artesanos de ladrillos de Shambob se han organizado en una cooperativa, debidamente registrada, que está llevando a cabo un programa de formación y capacitación profesional mientras negocia, hasta el momento satisfactoriamente, el apoyo de las autoridades y las instituciones de crédito. Por otro lado, se está desarrollando una investigación para sustituir la leña utilizada como combustible en los hornos por materiales de desecho tales como el estiercol de vaca, que no se emplea con ningún otro fin, o el bagazo; actualmente, estas alternativas han sustituido la mitad del consumo de leña y se está en proceso de alcanzar un 75%. Esto tiene beneficios tanto económicos como ambientales. Se ha introducido un horno escocés permanente para sustituir los hornos tradicionales de abrazaderas y aumentar de esta manera la eficiencia energética. Las mejoras introducidas en el proceso de preparación de la arcilla y en el moldeado han permitido fabricar ladrillos de mayor calidad, para los que existe una gran demanda. A lo largo del último año, la producción y las ventas se han triplicado respecto al año anterior.

Los ingresos medios de los miembros de la cooperativa aumentaron el último año un 60%, y un 20% el anterior. Este incremento les ha permitido mandar a sus hijos a la escuela y pagar un seguro médico. Diez mujeres del pueblo han adquirido carretas de mulos y están consiguiendo ingresos gracias al transporte y venta de agua. Se ha construido un centro comunitario utilizado, entre otras cosas, para educar a los adultos sobre temas de salud e higiene con el apoyo de numerosas instituciones públicas.

Siguiendo el ejemplo de Shambob, se han creado otras dos cooperativas de fabricantes de ladrillos en Kadugli, 105 miembros, y Waggar, 40 miembros; esta última ha conseguido dos créditos y tiene también a 75 miembros femeninos registrados y encargados de labores de machaqueo de piedra para agregados. Sus ingresos se han incrementado en un 30% el último año. Al menos otros cien fabricantes de ladrillos de la zona de Kassala se han puesto en contacto con ITDG Sudán para conseguir apoyo para nuevas cooperativas.

Fechas clave

D E S C R I P C I Ó N

Situación previa a la iniciativa.

La fabricación de ladrillos es una actividad económica muy importante en Sudán; esta actividad agrupa a 5.000 trabajadores sólo en la zona de Kassala. En su mayor parte se encuentra en manos de empresarios que poseen o arriendan la tierra; ellos se quedan con la mayor parte de los beneficios. Por otro lado, los trabajadores reciben un sueldo muy bajo en función de las piezas producidas, siendo sus condiciones de vida muy duras.

Tradicionalmente, los miembros de la tribu Beja residentes en Shambob eran pastores y granjeros, pero, tras la sequía de 1985, se vieron obligados a buscar nuevas fuentes de ingreso, en este caso, la fabricación de ladrillos.

Establecimiento de prioridades.

ITDG ya había trabajado en el este de Sudán en el desarrollo de pequeñas empresas antes de la puesta en marcha de este proyecto. Un estudio inicial señaló la producción de ladrillos como un sector que ofrecía una buena oportunidad para actuar; desde el punto de vista de la ONG, también suponía una ventaja el hecho de que esta actividad estuviera sujeta a serios condicionantes energéticos y ambientales, de una importancia vital en esta región árida. A continuación se puso en marcha un pequeño proyecto piloto con un empresario del sector. A través de esta experiencia se estableció el contacto con los trabajadores de Shambob y se definió una linea básica de trabajo. Las prioridades del proyecto se definieron con la participación de los propios interesados y fueron las siguientes:

• gestión directa de los trabajadores sobre las empresas;
  
• ahorro de costes gracias a una mayor eficiencia energética;
  
• aumento del precio y de la calidad del producto.

Formulación de objetivos y estrategias.

Los principales responsables de definir los objetivos y las estrategias del proyecto fueron los propios trabajadores de Shambob y el personal de ITDG Sudán. También se contó con la colaboración de personal de ITDG Reino Unido (ITDG UK) y hubo que negociar con las autoridades de la región para recabar su apoyo.

En esencia, el proyecto pretendía que los fabricantes artesanos de ladrillos se beneficiaran en mayor medida de su duro trabajo. Para lograrlo, debían estar organizados y gestionar su propia empresa. Por otro lado, descubrieron que podían ampliar su margen de beneficios mediante el ahorro energético y el aumento de la calidad del producto final; estas mejoras requerían un esfuerzo de investigación paralelo a las actividades de organización empresarial.

Movilización de recursos.

Un estudio de partida realizado a mediados de 1997 describió Shambob como un pueblo de escasos recursos económicos, con una población de 526 habitantes, donde dos de cada tres varones se dedicaban a la fabricación de ladrillos, un trabajo inestable y estacional. Mientras que estos trabajadores conocían perfectamente su oficio, no tenían ningún tipo de formación empresarial.

El siguiente paso fue el establecimiento de la cooperativa, registrada al año siguiente, con una contribución inicial de cada uno de los miembros de veinte dólares EEUU. Este capital inicial sirvió para adquirir una parcela de tierra para la producción de ladrillos. Por otro lado, la producción de ladrillos, que es una actividad estacional, requería una inversión de capital al comienzo de la estación, que se obtuvo a través de un crédito bancario.

Dos elementos particulares del proyecto requerían apoyo externo: los recursos humanos y los financieros. El primero implicaba una formación profesional para los socios de la cooperativa que les permitiera producir ladrillos de mayor calidad, vender su producto, gestionar la cooperativa y negociar con bancos, autoridades locales y otras instituciones la concesión de créditos y ayudas financieras; este punto fue cubierto por el personal de ITDG Sudán, el Consejo Rural de Kassala (Kassala Rural Council) y el Departamento de Cooperativas (Department of Co-operatives). También se llevó a cabo una investigación para mejorar la eficiencia de los hornos, probar combustibles alternativos, incluyendo diversos tipos de residuos, así como nuevos métodos de moldeado de la arcilla; estas actividades se desarrollaron con la participación de los propios interesados y el personal de ITDG Sudán, con aportaciones de expertos locales e internacionales, estos últimos pertenecientes al personal de ITDG. El aspecto financiero de estos proyectos se cubrió gracias a donaciones de instituciones, como EC o GTZ, y numerosos particulares, con la intermediación de ITDG.

Proceso.

El proceso de formación profesional de los responsables de la cooperativa incluía gestión empresarial, legislación sobre cooperativas, evaluación de costes, contabilidad y mercadotecnia; el resto de los socios recibía formación para mejorar su capacitación técnica. Esta actividad era relativamente sencilla y recibía ayuda útil de varias autoridades regionales.

Un gran paso para la cooperativa de Shambob fue la incorporación de las mujeres a la misma, aunque fuera en otra actividad económica.

Era importante conseguir registrar legalmente la cooperativa para recibir el reconocimiento oficial; este trámite se alargó durante un año. Otros problemas legales surgieron con la parcela de terreno alquilada por la cooperativa, que sólo admitía un uso agrícola, por lo que fue necesario alquilar una nueva parcela.

El acceso al crédito bancario tampoco fue una labor sencilla y requirió una intensa presión por parte de ITDG y, finalmente, una aval de la organización. El periodo de devolución del crédito impuesto por el banco era muy corto en comparación con la estación de producción de ladrillos; a pesar de ello, la cooperativa consiguió devolver el préstamo dentro del plazo, lo que la ha hecho merecedora de futuros créditos. Después de esta experiencia, también la organización no gubernamental ACORD se ha mostrado dispuesta a conceder préstamos a las empresas productoras de ladrillos.

Gran parte del trabajo investigador llevado a cabo junto a los socios de la cooperativa ha estado enfocado hacia el aumento de la eficiencia energética y la sustitución de la leña como combustible habitual de los hornos. En un primer intento, se probó a reemplazar los hornos tradicionales de abrazaderas por hornos abovedados alimentados por gasóleo, pero los resultados no fueron satisfactorios. Cambiar el tipo de combustible para alimentar los hornos tradicionales produjo mejores resultados; se estudió en profundidad el excremento de vaca, mezclado tradicionalmente con la arcilla de los ladrillos, pero no empleado para nada más, con el objetivo de optimizar su uso como combustible. Otro combustible analizado fue el bagazo, material de desecho de la industria local del azúcar y disponible en dos formas: suelto o en briquetas; en el primer caso, se pone junto a la arcilla de los ladrillos como el excremento de vaca, en el segundo, se quema en la cámara de combustión como la madera. El resultado de estas investigaciones ha sido la sustitución del 50% del consumo de madera, con la posibilidad de ampliar esta cifra hasta el 75%. También se ha construido hace poco un horno escocés permanente para alcanzar mayores niveles de eficiencia energética.

La calidad de los ladrillos producidos se ha visto incrementada gracias a un mejor proceso de moldeado y un secado más controlado. La producción de ladrillos de un tamaño y una forma más regulares hizo que el personal de la iniciativa se implicara en la elaboración de un nuevo estándar de ladrillos a nivel nacional, aprobado a finales de 1998. A nivel local, se han levantado un cierto número de estructuras para demostrar las ventajas del nuevo tipo de ladrillo que, gracias a su forma más regular, permite ahorrar en plazos de ejecución y cantidad de mortero empleado, lo que supone un ahorro global a pesar de que el coste del ladrillo sea superior. Consumidores importantes de la región, donde se incluyen varios departamentos gubernamentales y agencias internacionales, han aceptado el nuevo estándar desarrollado por el proyecto. El éxito ha sido tan importante que la demanda supera la producción.

Obtener los recursos financieros para mantener esta y otras cooperativas continua siendo el principal escollo. Muy pocas instituciones internacionales conceden créditos a Sudán; puede haber razones políticas para actuar así, pero esta forma de proceder ignora los importantes resultados que pueden conseguir las ONGs que trabajan directamente con los pobres, a menudo con el apoyo de las autoridades sudanesas. La consecuencia de esta situación es que la mayor parte de la financiación se ha obtenido de pequeños donantes, con el consumo de tiempo y la inseguridad que ello supone.

Resultados obtenidos.

En todos los proyectos apoyados por ITDG, se realiza un seguimiento constante y una revisión anual de cualquier progreso, con la participación de un gran número de actores implicados. Cuando se considera necesario, se introducen cambios en el desarrollo del proyecto. La última revisión anual del proyecto contó con la participación de seis socios de la cooperativa de Shambob, otros seis de la de Kadugli, cinco miembros del personal de ITDG, dos personas de otras organizaciones no gubernamentales, cuatro de las personas implicadas en los programas de formación y gestión de las cooperativas, siete responsables de las autoridades, dos propietarios de hornos, siete constructores y consumidores de ladrillos y algunas personas más.

Después de tres años, los resultados obtenidos por el proyecto son los siguientes:

• Un aumento en los ingresos de los socios de la cooperativa de Shambob: un 60% en el último año y un 20% en el año anterior. Esto ha permitido que algunos de los socios pudieran mandar a sus hijos a la escuela por primera vez, y que otros pudieran pagar un seguro médico o realizaran mejoras en sus viviendas.
  
• La mujeres están siendo aceptadas junto a los hombres en las cooperativas; en Shambob, diez de ellas se dedican a distribuir agua en el pueblo, donde no existe suministro; en Kadugli, las mujeres se dedican al machaqueo de piedra para agregados.
  
• Se ha construido un centro comunitario donde diversas instituciones proporcionan educación y formación profesional.
  
• Siguiendo el ejemplo de Shambob, se han organizado cooperativas en Kadugli, en las afueras de Kassala, con 105 socios varones implicados en la fabricación de ladrillos y socias dedicadas al machaqueo de piedra; y en Waggar, con 40 socios también dedicados a la producción de ladrillos.
  
• La cooperativa de Shambob está reconocida y tiene la capacidad de acceder a préstamos bancarios, al igual que la de Kadugli; también cuenta con un apoyo considerable por parte de las autoridades para la formación y capacitación profesional.
  
• Al menos la mitad de la leña anteriormente empleada como combustible ha sido susutituida por materiales de desecho, especialmente bagazo, y es probable un aumento de estas cifras.
  
• Los ladrillos producidos tienen una forma más regular y están mejor cocidos, por lo que encuentran una buena salida al mercado; en la última estación, la producción y las ventas prácticamente triplicaron las del año anterior. El proyecto también ha ejercido una importante imfluencia en la definición de los estándares del país.

Sostenibilidad.

En términos financieros, las inversiones dedicadas a investigación y formación profesional se consideran a fondo perdido. Por otro lado, el proyecto está intentando convencer a las entidades bancarias de la viabilidad de facilitar préstamos a las cooperativas de productores y recobrar su dinero dentro de plazo; con el tiempo, se espera que los bancos se interesen en mayor medida por los microcréditos y dejen de exigir un aval de las ONGs para garantizar el pago. Entre tanto, una ONG de carácter internacional se ha mostrado dispuesta a apoyar financieramente a estas cooperativas. La necesidades de investigación se reducirán con el tiempo, mientras que la formación tendrá que mantenerse en la medida que vayan surgiendo nuevas cooperativas, aunque las autoridades ya han ofrecido cierto apoyo a estas iniciativas. En cualquier caso, el proyecto deberá plantearse otras medidas que sustenten la iniciativa a largo plazo, como la formación por parte de los propios socios de las cooperativas, o cobrar por estos servicios.

En la sociedad islámica del este de Sudán no se acepta el hecho de que varones y mujeres trabajen juntos en cualquier actividad, como es el caso de la fabricación de ladrillos. Ya ha sido un gran paso conseguir reunir a personas de ambos sexos en una misma cooperativa. De esta manera se logra una mayor participación de la mujer en los ingresos económicos de la familia (por ejemplo, las mujeres dedicadas al machaqueo de piedra han visto incrementados sus ingresos en un 30%) y también la posibilidad de acceder a la educación para adultos; ambas actividades están contribuyendo a una mayor participación de la mujer en la sociedad.

En esta zona de Sudán, los combustibles habitualmente empleados para cocer los ladrillos son la leña, en las cámaras de combustión de los hornos, y el excremento de vaca, situado junto a la propia arcilla. En esta región, el excremento de vaca no encuentra ningún otro uso, como podría ser el de fertilizante. La leña es una mezcla de madera procedente de árboles adultos transportada desde la región del Nilo Azul y madera de un arbusto muy común en el este de Sudán, denominado miskit. Hasta elmomento, el proyecto ha demostrado que es posible reemplazar la mitad de la leña empleada y hasta un 75% de la leña empleada por bagazo, un subproducto de la industria del azúcar. Hay enormes depósitos de bagazo en esta región de Sudán, algunos de los cuales entran en combustión de forma espontánea; parte del bagazo se comprime en briquetas, generando una cierta actividad económica en torno a la industria azucarera. El transporte del bagazo desde las plantas azucareras a los hornos de cerámica supone un coste, pero éste también existe en el transporte de la madera. En cualquier caso, el cuadro completo de los aspectos ambientales de la sustitución de combustibles y el aumento de la eficiencia energética resulta muy complejo y el impacto de estas actuaciones aún no se ha analizado en profundidad.

Lecciones aprendidas.

• Los trabajadores cualificados pueden gestionar y dirigir sus propias empresas, viendo incrementarse sus ingresos de forma considerable, siempre que se cuenta con servicios de desarrollo empresarial, no hay grandes cambios en los procesos productivos y el mercado mantiene un clima favorable. Obtener el apoyo necesario es importante, y en este caso particular existían experiencias de apoyo a otros sectores económicos, entre los que se encuentran el de procesado de alimentos y el de transporte. La experiencia previa de ITDG demuestra que es más complicado lanzar nuevas empresas que fabrican productos innovadores con los que no están familiarizados los trabajadores, sin un mercado definido (como las tejas de microcemento) o con unas técnicas de producción que han cambiado drásticamente (el caso de la cal). También se encuentran problemas en los casos en los que el mercado está en recesión o los competidores muestran una actitud agresiva ante los recién llegados.
  

• Es importante implicar a los productores en el proceso de investigación para mejorar la calidad de sus productos. El conocimiento y los recursos locales son activos importantes que necesitan ser alimentados y sostenidos antes que rechazados en favor de tecnologías ajenas al lugar. Esto no significa que haya que rechazar aportaciones externas en un contexto de desarrollo técnico participativo, sino tan sólo que estas aportaciones deben adaptarse al contexto local. Por ejemplo, en este proyecto en particular, el empleo de bagazo como sustituto de la leña en las cámaras de combustión o del excremento de vaca junto a la arcilla no supone cambios fundamentales ni requiere nuevas técnicas o habilidades y puede realizarse paso a paso.
  

• Existe un gran potencial para el uso de materiales de desecho como combustible en el cocido de ladrillos, con la posibilidad de reducir la presión sobre los recursos madereros. Este proyecto concreto está aprovechando otras experiencias y también aportando nuevos datos a otros proyectos similares de investigación para la utilización como combustible de la cáscara de arroz o del serrín (proyectos desarrollados en Sri Lanka y Perú), y del polvo de carbón o las cenizas (Zimbabwe y Perú). Los materiales de desecho suelen ser combustibles mucho más baratos que la madera y este hecho, junto a la mayor eficiencia energética, permite mejorar la viabilidad económica de las empresas.

Transferibilidad.

La iniciativa de Shambob ya ha sido replicada en otras dos poblaciones del este de Sudán: en Kadugli, en las afueras de Kassala, donde se estableció una cooperativa de trabajadores apenas un año después, y en Waggar, 106 km al norte, donde una cooperativa ya existente amplió su actividad hacia este sector. Ambas cooperativas están funcionando satisfactoriamente.

Alrededor de 250 productores de ladrillos están produciendo ladrillos y gestionando su propia empresa; esto representa aproximadamente el 5% de toda la mano de obra de este sector. Otros cien trabajadores de tres poblaciones distintas se han puesto en contacto con ITDG Sudán para conseguir su apoyo y poner en marcha nuevas cooperativas. Esta es una clara oportunidad de ampliar el ámbito de actuación, no sólo dentro de la región, sino incluso en el conjunto del país. El principal escollo puede encontrarse en la financiación externa requerida, especialmente para la formación profesional. El proyecto es relativamente joven; sus resultados están dándose a conocer en otros países, en principio en el marco del programa internacional de ITDG, pero hasta el momento no se ha producido ninguna réplica en proyectos de gestión empresarial por parte de los propios trabajadores. Una de las cuestiones principales se plantea en el reparto de los beneficios económicos entre propietarios y trabajadores; este tema ha surgido en prácticamente todos los proyectos relacionados con el desarrollo empresarial que ha puesto en marcha ITDG. En la mayoría de los proyectos se asume que parte de los beneficios del desarrollo empresarial se dirigirán hacia los trabajadores, pero muy a menudo esto es difícil de conseguir. Este ejemplo de Sudán presenta un método drástico de resolver este problema. Su réplica es posible en otros contextos, pero, por otro lado, hay numerosos ejemplos conocidos, sobre todo en África, de cooperativas y otros tipos de asociaciones que han fracasado por diversos motivos. Por esto, hay que recordar la importancia de mantener abierta una línea de investigación en la búsqueda de alternativas para el reparto de los beneficios.

Perfil financiero.

Las cifras están expresadas en dólares estadounidenses y se refieren a periodos que van desde el uno de abril hasta el 31 de marzo. Debido a las fluctuaciones entre el dólar, la libra esterlina y el dinar sudanés, los valores son aproximados. Puesto que los datos definitivos de marzo de 2000 aún no están disponibles, el presupuesto del último año se ha extrapolado a partir de los datos de los once primeros meses. La contribución realizada por entidades bancarias se refiere a préstamos que ya se han devuelto.

Perio do	Presup uesto total	SBPCOOP (1)	ITDG-UK (2)	S&I Bank (3)	EC (4)	GATE/GZ (5)	Parti cular es (6)
1997-1998	54.000	0%	49,7%	0%	47,2%	0%	3,1%
1998-1999	57.400	4,5%	0%	4,9%	72,6%	0%	18,0%
1999-2000	85.000	0%	0%	0%	52,6%	8,1%	39,3%

(1) Cooperativa de productores de ladrillos de Shambob, que engloba a 115 varones, todos ellos fabricantes de ladrillos, que constituyen dos tercios de la población masculina de Shambob, y un número indeterminado de mujeres, de las cuales diez se dedican al transporte de agua. Debido a que Shambob no cuenta con suministro de electricidad, teléfono o servicio de correos, para contactar con la cooperativa hay que dirigirse a la oficina de ITDG en Kassala.

(2) Intermediate Technology Development Group - Reino Unido.

(3) Social and Investment Bank (Banco Social de Inversión), sucursal en Kassala del Sudan Bank.

(4) GATE/GTZ (agencia de cooperación del gobierno federal alemán)
Dag Hammerskjoldweg 1-5, D 65726 Eschborn, Alemania.

(5) Comission of the European Communities (Comisión Europea)
Rue de la Loi 200, B1049 Bruxelles, Bélgica.

(6) Particulares donantes de pequeñas cantidades: filántropos, pequeñas instituciones de caridad o de cooperación.

Referencias

Bairiak Jeremiah (1999) "Utilization of Cow-Dung in Brickmaking" (BASIN Wall Building Case Study, GATE, 6 pages)

Bairiak Jeremiah (1999) "Utilization of Bagasse in Brickmaking: R&D in Sudan" (BASIN Wall Building Case Study, GATE, 4 pages)

Schilderman Theo (2000) "Sustainable small scale brick production: a question of energy? - International action research experience in brick production" (ITDG leaflet, June 2000, 4pages)