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Fecha de referencia: 05-07-2000
Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas patrocinado por Dubai en 2000, y catalogada como GOOD.
(
Best Practices Database.)
País/Country: Cuba
Región según Naciones Unidas: América Latina
Región ecológica: isleña
Ámbito de la actuación: metropolitana
Instituciones: gobierno central, organización no gubernamental,
institución académica, medios de comunicación.
Categorías = Modelos de producción y consumo: responsabilidad de los
productores; ciclos de producción y consumo; reciclaje y
reutilización de residuos. Gestión ambiental: reducción de la
contaminación; creación de zonas verdes en la ciudad.
Participación ciudadana y riqueza cultural: participación
comunitaria; riqueza social y cultural.
Contacto principal:
Julio Reyes Villafruela. PMH (institución estatal)
calle 19 - 1466 e/ 28 y 30. Vedado.
Plaza de la Revolución. La Habana. Cuba
tel: +537 31-2154
fax: +537 66-2131
pmh@iip.etecsa.cu
Socio:
Instituto Urbano Canadiense - CUI
Andrew Farncombe
100 Lombard St, Suit 400
Toronto, Ontario. Canadá.
tel: (416) 365-0817
fax: (416) 365-0647
cui@interlog.com
Colaboración financiera y técnica
Socio:
OXFAM Canadá
294 Albert St, Suit 300.
Ottawa, Ontario. Canadá
Colaboración financiera y técnica
Socio:
Oxfam Bélgica
Luck Zonneceld
Raadstraat 39.1050
Brussel. Belgium.
tel: 32 (0) 2512-99-90
fax: 32 (0) 2511-89-19
Colaboración financiera.
Como proyecto ambiental, debe abordar la resolución de cuestiones
tales como la deforestación, los vertidos incontrolados
procedentes de la población y de las industrias y la falta de
mantenimiento y cuidados que ponen en peligro no solo el río
Almendares, que conforma la vertebración del parque, sino también
su flora y su fauna, parte esencial de la identidad del espacio
en su conjunto.
Por otro lado, el proyecto aborda el reto de promover el
desarrollo de un espacio de ocio destinado al conjunto de la
población. Esto sólo es posible mediante un programa de
participación efectivo que contemple el Plan del Parque como algo
concerniente a los habitantes, a través de un planeamiento
participativo y un Comité Asesor.
A lo largo de los años, el personal de PMH ha estado formando a
sus trabajadores internos y externos en técnicas de control y
evaluación de proyectos y de trabajo en equipo. Por otra parte,
se encuentra en curso un proceso de aprendizaje de control
financiero en los proyectos.
Se han formado Grupos Ambientales Comunitarios que dirigen el trabajo ambiental y participativo. Esto ha ocasionado un incremento de los fondos procedentes de otras entidades que ya han llevado a cabo proyectos piloto como CUI-PMH y otras organizaciones como OXFAM-CANADÁ, EVERGREEN (Canadá), CRIC-COSPE (Italia), OXFAM-Bélgica, HIVOS (Holanda), Junta de Andalucía (España), Fundación BOL (Alemania) y Global Exchange (USA).
Situación previa a la iniciativa
La primera acción emprendida fue el Plan Territorial.
Se establecieron los elementos principales que compondrían el
Parque: la reforestación, denominada "reparación ambiental", las
inversiones y el ocio. No obstante, en un primer momento no fue
posible materializar ningún proyecto debido a la falta de
formación en las nuevas técnicas de trabajo.
Establecimiento de prioridades
Básicamente, los objetivos son: evitar la deforestación creando
áreas de desarrollo agrícola; limpiar el territorio,
especialmente las riberas; acabar con la actual falta de
diversidad; restaurar y construir viviendas, dotaciones de ocio,
servicios y accesos rodados al parque, así como la iniciación del
proyecto de formación ambiental y participativa. Estos objetivos
fueron definidos íntegramente.
Se partió del convencimiento de la necesidad de encontrar
soluciones más eficaces mediante acciones participativas,
mecanismo a través del cual los implicados en la acción son
conscientes no sólo de los problemas específicos que les afectan
sino de la interconexión entre todos ellos.
Esta determinación de materializa en planes de subsanación de
deficiencias que tienen en cuenta las opiniones de los
profesionales y de los residentes.
Las soluciones halladas mediante este tipo de mecanismos son
aptas para ser extraídas y llevadas a cabo a nivel popular. Un
ejemplo son los programas asumidos como parte del proceso de
planeamiento en las industrias y en las comunidades. En ellos,
los miembros de cada grupo, junto con los técnicos de PMH
elaboran un diagnóstico ambiental, establecen un orden de
prioridades y a continuación planifican las acciones específicas
a emprender.
Formulación de objetivos y estrategias
Nuestros objetivos principales son: crear una zona verde
destinando el 80% del territorio a la reforestación, el
desarrollo agrícola y los jardines; llevar a cabo un proceso de
restauración ambiental, principalmente la limpieza del río
Almendares. Otros objetivos son: fomentar el desarrollo de las
infraestructuras urbanas y sociales; promover la educación
ambiental y reforzar los cuidados, el mantenimiento y la
recuperación ambiental; desarrollar hábitos saludables de ocio
y tiempo libre; promover el desarrollo económico de PMH,
asegurando su autosuficiencia, y desarrollar la infraestructura
institucional necesaria para la gestión integral del proyecto.
Se ha llevado a cabo un proceso de debate para proponer ideas y
metas, evaluar problemas, sugerir soluciones; determinar
responsabilidades y colaboraciones y conciliar todo lo necesario
para emprender los primeros pasos. En este proceso participaron
la población, los gobiernos locales, las industrias, y sus
ministerios, los especialistas en protección y planeamiento
ambiental y en desarrollo agroforestal, etc.
Movilización de recursos
En un principio, el apoyo más necesario fue el técnico, con el
fin de poner en marcha una estrategia de desarrollo viable. Sin
embargo fue necesario ante todo formar a un equipo
multidisciplinar de profesionales en cuestiones relacionadas con
el trabajo a realizar, debido a la complejidad del proyecto y de
su puesta en marcha.
El apoyo y el asesoramiento prestados por el Instituto
Urbano de Canadá (Canadian Urban Institute,
(CUI)) ha sido, y sigue siendo, esencial para la
continuidad del proceso con los nuevos planteamientos adoptados.
También hemos recibido un gran apoyo técnico por parte de muchas
otras entidades y profesionales procedentes de diversas
disciplinas que se han involucrado en el desarrollo del proyecto,
poniendo a nuestra disposición su experiencia y sus herramientas
de trabajo, las cuales fueron adaptadas a nuestra realidad y a
nuestras necesidades concretas. De este modo ya estábamos en
disposición de acometer la puesta en práctica de las primeras
soluciones de cara al desarrollo del proyecto, para lo cual fue
necesario movilizar una cantidad considerable de recursos
financieros. Fue un trabajo conjunto con las comunidades de cada
zona, organizadas en Grupos Ambientales. Estos grupos elaboraron
un diagnóstico de la situación ambiental correspondiente a sus
zonas respectivas, diagnóstico en el que se basó el primer
proyecto.
En la fase inicial todo esto fue financiado por CUI y por el
Gobierno Cubano.
Proceso
En la puesta en marcha de la iniciativa nos enfrentamos a
problemas diversos, como la falta de un equipo multidisciplinar
con formación en planeamiento estratégico y trabajo en equipo.
Tampoco había una reglamentación específica que asegurara al
proyecto el apoyo oficial ni la autoridad necesaria sobre su
territorio. Había un Plan Director que indicaba qué
hacer, pero no cómo hacerlo. Desconocíamos el procedimiento para
abordar un proceso de participación ciudadana e institucional.
No existía una estructura sólida administrativa, ni nociones
sobre el mundo de las colaboraciones internacionales.
El primer paso hacia la resolución de estos problemas fue
consolidar el equipo técnico, formular un modelo de participación
para las comunidades e implicar a las industrias. Se formuló una
estrategia de desarrollo en la que se indicaron los problemas
existentes, sus soluciones y los recursos necesarios.
En este momento estamos trabajando en la resolución de estos
problemas. Hemos firmado acuerdos de colaboración con las
industrias, los ministerios y los colegios del área y también con
las emisoras de radio con el fin de difundir la experiencia.
Tenemos vínculos con la Universidad para la
realización de trabajos de investigación. Hemos creado un grupo
de gestión de ONGs cubanas que promueve el proyecto y nos
acompaña en el proceso. Aunque ya hemos obtenido resultados
satisfactorios, seguimos trabajando con el fin de mejorarlos.
Resultados obtenidos
Ya se han producido resultados tangibles, como por ejemplo los
trabajos que se están llevando a cabo en la actualidad en la
creación de un vivero para la producción de semillas. Durante dos
años se han estado utilizando las semillas procedentes de este
vivero para la reforestación del parque. Se ha incrementado el
índice de supervivencia de las plantas, así como la actividad
agrícola, y se han llevado a cabo cuatro proyectos comunitarios
de reforestación.
Algunas industrias han reducido la contaminación del río. La
colaboración y la supervisión se están llevando a cabo de una
forma firme y seria . También ha habido buenos resultados en la
reducción del impacto social dentro de un proyecto de residuos
sólidos, que se está realizando en una de las comunidades y que
afectará a unas cien familias.
Hay dos equipos comunitarios realizando un trabajo notable en la
limpieza y mantenimiento de las riberas del río Almendares, en
el Pinar de la Habana y en el Parque Almendares, así como en la
reforestación de este último.
El proyecto de inversión se ha desarrollado a un ritmo lento
debido a la falta de fondos. Hay más de dos programas educativos
en cinco colegios y tres consejos populares. Se ha formado a los
miembros de la comunidad del parque en la protección del ambiente
urbano y las áreas verdes. Los proyectos culturales comunitarios
fomentan el deporte y la cultura, a través principalmente de las
actividades de un grupo de artistas y de varios grupos de
aficionados.
Sostenibilidad
-Sostenibilidad financiera. Estamos trabajando con fondos
procedentes de contribuciones y del Gobierno Cubano. Hemos
aprendido que también nosotros podemos aportar algo de capital
al desarrollo del proyecto generando dinero mediante la inversión
del mismo. En estos momentos, estamos inmersos en un proceso de
reestructuración con el fin de crear los mecanismos financieros
necesarios para desarrollar esta iniciativa.
-Sostenibilidad cultural. Gracias a las labores de formación y
capacitación, se han originado cambios en la actitud de la
comunidad en relación con el patrimonio y la identidad social,
lo cual les ha conferido una visión diferente de la vida.
-Sostenibilidad social. Las comunidades han aprendido a
identificar sus problemas, a establecer un orden de prioridades,
a introducir soluciones alternativas innovadoras y a hacer uso
de sus propios recursos.
-Sostenibilidad ambiental. Hemos trabajado con ahínco para
cambiar la actitud hacia el medioambiente de las comunidades
localizadas dentro del área, tratando directamente con ellas
temas tales como las formas de producir suelo, el uso de
fertilizantes, insecticidas y pesticidas biológicos y la gestión
de residuos sólidos urbanos y de suelo. En la actualidad, los
trabajadores de las industrias son capaces de identificar los
problemas existentes y de encontrar las soluciones más adecuadas.
También son capaces de adoptar formas alternativas de producción
y de uso de residuos con el fin de reducir el impacto ambiental.
Lecciones aprendidas
Todo proceso de transformación urbana requiere un proyecto
estratégico para trazar el camino a seguir e identificar medios
para alcanzar las metas, los objetivos y las acciones que definen
su esencia.
La estrategia adoptada también facilita las comprobaciones
necesarias para reajustar la ruta a las nuevas realidades,
evitando las improvisaciones y el fracaso del proyecto. Los
proyectos que atienden varias cuestiones simultáneas deben
incluir un proceso participativo que posibilite la implicación
de la población en la realización de las metas prefijadas. La
participación implica una dedicación extra, pero esto evita los
costes innecesarios generados cuando no se toma en cuenta las
opiniones de aquellos que realizan los trabajos, así como las de
los afectados o beneficiados por los mismos.
La posibilidad de desarrollar proyectos que previamente han
fracasado en otro contexto deriva del hecho de que el sistema
cubano se basa en un modelo estructurado de forma participativa
del nivel local al nacional. Esto ha facilitado en gran medida
la interacción con la población, la capacidad de movilizarla, así
como la posibilidad de integrar los proyectos con las entidades
responsables de la toma de decisiones.
El Proyecto Parque ha sido capaz de profundizar en la cuestión
de la colaboración internacional y de adquirir herramientas y
códigos de comunicación con el fin de llevar a cabo un trabajo
de campaña eficiente. Los medios promocionales desarrollados
(vídeos, manuales, folletos) han contribuido a la toma de
conciencia de la riqueza de algunos espacios de dentro y de fuera
del país.
Transferibilidad
Los nueve Consejos Populares del parque se han formado en
técnicas de trabajo en equipo, mejora de los procesos, control,
evaluación y formulación de los proyectos. Hemos formado Grupos
Ambientales en los nueve Consejos Populares. El objetivo ha sido
crear un centro de formación para actividades ambientales a nivel
de base. El equipo técnico de PMH también ha recibido formación
en estas cuestiones. Conjuntamente con una ONG cubana, estamos
desarrollando un segundo proyecto de reciclaje de residuos
sólidos en otro municipio del parque , y tenemos en mente
extender este tipo de experiencias al resto de la capital.
El manual que implica a la comunidad en el proceso de
planeamiento sirve como documento base para el trabajo realizado
en los 102 municipios de la ciudad y ha sido utilizado también
en Paraguay y Jamaica. El proyecto Parque ha trazado una
tendencia a recurrir a las ONGS cubanas en los procesos
educacionales y participativas.
Las universidades utilizan el Proyecto Parque como un laboratorio
y como modelo a seguir en el trabajo social, arquitectónico y
ambiental. Los estudiantes se suman al proyecto a través de
tesis, trabajos académicos y prácticas de producción.
El boletín informativo del parque constituye una gran oportunidad
de difundir nuestro trabajo y los resultados obtenidos. También
ha ofrecido la oportunidad a profesionales de otras instituciones
de publicar artículos y compartir su experiencia.
Los métodos empleados en la reforestación del parque por parte
de las comunidades que se han dedicado específicamente a esta
actividad constituye un modelo digno de ser extendido al programa
de reforestación de la capital.
Perfil financiero
año | CUI | OXFAM CANADÁ | OXFAM BELGIUM | CRIC&COSPE | HIVOS |
1995 | 100% | - | - | - | - |
1996 | 69.3% | 30.7% | - | - | - |
1997 | 97.2% | - | 2.8% | - | - |
1998 | 48.5% | 19.5% | 7% | 5.6% | 19.4% |
1999 | 87.2% | - | - | 12.8% | - |
Referencias
Contamos con una publicación oficial trimestral de corte
ambientalista, el boletín "Siempre Verde", donde recogemos el
quehacer diario de nuestros técicos y se reparte a diferentes
zonas geográficas.
Barbara Avenda (Octubre de 1999) "Oído a una invocación"
(Tribuna)
Lilliam Riera (Marzo de 1999) "Un espacio ecológicamente
activo en La Habana" (Granma Internacional)
Marilyn Fernández (Octubre de 1998) "La gestión ambiental y
la participación: el caso del Parque Metropolitano de La Habana"
(Mensaje de Cuba)
Alberto Bendoyro (Junio de 1998) "Operación de pulmón verde
a corazón abierto" (Opciones)
Joaquín Rivery Tur (Marzo de 1997) "Mas verde para la Ciudad"
(Habanera)
Iramis Alonso (Enero de 1996) "El Río que nos une" (Opus
Habana)
(Noviembre 1995) "Medioambiente" (Contactos) .
David Crane (Agosto de 1995) "No reason to join U.S. in
hipocritical embargo on Cuba" (The Toronto Star)
Buenas Prácticas > América Latina y el Caribe > Concurso Internacional 2000 > http://habitat.aq.upm.es/bpal/onu00/bp312.html |